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Opinión 01-11-2019 07:00

Pedro Velarde, un quesero emprendedor…, por Pedro Arce Díez

Cuando hablo con los queseros, siempre el queso es el tema central de la conversación, pero en el caso de Pedro Antonio Velarde Collado (Pendes, Cillorigo de Liébana, 1964) la conversación discurre por otros muchos derroteros, pues la vida de este personaje tiene otras muchas aristas, especialmente la promoción del queso y de su comarca, plena de riqueza natural y artística.

 

 

Cuando era pequeño ya habían cerrado la escuela en su pueblo y su familia, ya con 6 años, le envió a estudiar a Santander, al Colegio “Santiago Galas”, un internado que le permitió conocer a profesores de prestigio como Juan Manuel Villoria o José Antonio Escobedo; y le permitió conocer la ciudad, quedándose a trabajar en la prestigiosa bodega Fuente Dé, por eso de la relación lebaniega…

 

 

 

 

 

Pero Pedro es persona inquieta y ha transitado por muchos escenarios; la política, los medios de comunicación y hasta el mundo de la aviación, en Iberia, en la sala VIP de los vuelos internacionales, consiguiendo, además, que dos de sus quesos fueran seleccionados por Iberia para incluirlos en su menú a los pasajeros de los vuelos internacionales al continente americano; desde hace una década, nadie podrá negar que sus quesos son de “altos vuelos”. Pero el queso también estaba en su tradición familiar y fue nombrado “Embajador del Queso” por Zacarías Puente, a la sazón Gran Maestre de la Cofradía del Queso de Cantabria. Igualmente, mantiene una excelente relación con otro quesero bien conocido en Cantabria: César Ruiz Cobo.

¡Y lo más sorprendente! Fue uno de los promotores para que la película de Heidi se rodase en Liébana y, lógicamente, también en Pendes donde se levantó la cabaña; Pendes es una pequeña localidad de medio centenar de habitantes, con un núcleo rural donde destaca su iglesia del siglo XVI, que aún conserva algunos restos románicos de la construcción anterior; en ella destaca un magnífico retablo, con sendas imágenes de la Virgen y el Cristo y un cordobán.

 

 

 
Cualquiera que se acerque a Pendes quedará más sorprendido que la propia Heidi; observar estas ovejas junto a la quesería de Pedro Velarde o contemplar este castañar milenario, compensará cualquier viaje por largo que este sea…
 

 

Pedro se ha planteado promocionar la cultura del queso a grupos de escolares o de otras personas interesadas, siendo pionero en visitas guiadas y, además, procura mostrar el entorno de la quesería, como es su pequeño pueblo, el castañar milenario de El Habario y el Corral de los Moros y toda la historia de la zona, que tiene un atractivo fantástico, que sorprenderá al visitante

 

Quizás por ello, con poco más de veinte años, volvió a su pueblo de Pendes y en 1987 reformó su quesería, pues su familia ya tenía una larga tradición quesera y sus padres hacían los tradicionales “quesucos” de Liébana. ¡Y así nació la Quesería Las Brañas de Liébana!, que se encuentra en la ruta del Camino Lebaniego.

Actualmente, la elaboración del queso la realiza un maestro quesero, José Antonio Alonso Gutiérrez, que es de Cabañes, pequeña localidad próxima a Pendes, y que lleva con él veintidós años; con unos 145.000 litros de leche de vaca y oveja que adquieren a los ganaderos de la zona y que son animales que pastan en estas praderías de altura, elaboran unos 15.000 Kg. de queso de las siguientes variedades:

- Quesucos de vaca de 400-500 gr., de leche pasteurizada, corteza amarillenta y pasta blanda y cremosa.

- Queso de leche cruda de oveja, semicurado o añejo.

- Queso de mezcla vaca y oveja, semicurado.

- Queso ahumado de Potes, elaborado con leche pasteurizada y ahumadero tradicional con enebro, anavias o roble.

- Quesuco casero de la Abuela de 300-500 gr., de leche pasteurizada, suave y cremoso para untar.

- Queso Picón Bejes-Tresviso, madurado en cueva natural.

- Tabla de quesos de los Picos de Europa (Vaca, mezcla, oveja y ahumado).

 

 

Pedro ha orientado la quesería a las visitas de la misma y del entorno de Pendes; y la quesería es la única que tiene un gran cristal para que pueda verse el funcionamiento de la misma, sin que afecte ni a su normal funcionamiento ni a la higiene de la misma.

Pedro se casó con Ana Isabel Sotres, que es maestra en el Colegio de Potes y en el CRA de Liébana y Peñarrubia. Tienen un hijo, pero ha seguido otros derroteros como profesor en la Universidad y el futuro de la quesería puede estar en el aire, lo que es bastante habitual en las queserías artesanales, pues he podido observar como varias han cesado en la actividad en los últimos años...

 

 

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Comentarios(3):

- 03-11-2019

Una gran persona

Pasiego - 01-11-2019

Una quesería como estas, puede dinamizar un pequeño pueblo, pero estos pueblos de montaña necesitan ayudas e incentivos para que surjan y se mantengan los emprendedores...

NONO - 01-11-2019

Una ruta interesante es subir desde Castro a Pendes y Cabañes ,visitar esas quesería ,seguir subiendo hasta el puerto de Pelea, bajar a Bejes y seguir bajando hasta la Hermida. Lo he hecho varias veces.