Una nueva quesería en Soba…, por Pedro Arce Díez
Soba es una de las zonas más alejadas de la Bahía de Santander y una de las menos conocidas por los cántabros; sin embargo, tiene un paisaje embriagador, con una paleta de verdes que deja extasiado a cualquier visitante…
Pues en este elevado valle se ha instalado una nueva quesería hace poco que viene a ser un elemento dinamizador de una zona eminentemente ganadera y que ya está dando sus frutos con los primeros quesos sacados al mercado con indudable éxito.
Es la quesería Axia de Soba, instalada en Aja de Soba, a 610 m. de altitud, un bello lugar del valle, con una larga historia, pues ya en el siglo IX existía en el lugar el Monasterio de San Andrés y actualmente el núcleo rural tiene menos de medio centenar de habitantes, donde destaca la casona blasonada de los Gutiérrez del Otero.
La quesería es propiedad de Daniel Viedma Abanades (Madrid, 1983), persona inquieta y con deseos de comerse el mundo. Con 19 años se va a Londres a aprender inglés; de allí a Barcelona, donde finalizó sus estudios de dirección cinematográfica y se sumergió en el sector audiovisual durante un largo periodo de 13 años…
Pero, mientras tenía un interesante trabajo, poco a poco y casi sin darse cuenta, fue fraguando una idea, la de volver a su raíz veraniega, reinventarse a sí mismo y dar un giro de 180 grados a su vida. Y en este lugar de Soba existía la casa de su familia y donde él mismo había pasado todos los veranos de su vida, lugar donde se embriagó de los verdes de estas alturas, contactó con sus habitantes y disfrutó de un paisaje auténticamente salvaje. Y es que su padre llegó por vez primera a este lugar ya hace medio siglo y desde entonces no dejó de venir ni un verano, construyéndose una casa en Aja, que ha sido, según el propio Daniel nos cuenta, “la guinda del pastel” de sus vacaciones
Dani nos recibe en su quesería de Aja de Soba…
Una imagen de la quesería ubicada en el lugar de Aja y los quesos, ya elaborados y en la cámara de maduración, donde duermen hasta que alcanzan su punto óptimo, momento en que son envasados y puestos a la venta
¡Y hace dos años dejó todo y se vino a Soba! Este lugar le consideraba “su pueblo” y ha sido el lugar donde ha forjado un sueño, en la vivienda que su padre había levantado y construir, con gran esfuerzo, una pequeña quesería artesana, donde antes estuvo el garaje y la bodega. Él mismo reconoce que al principio, a la escasa población del lugar le sorprendía que quisiera montar una quesería en este lugar bastante alejado, en Aja, una pequeña aldea en mitad del valle. Y lo que es la filosofía de la vida, pues para Daniel “esta situación de cierto aislamiento siempre fue un valor añadido”, aspecto que las actuales administraciones debieran valorar para asentar población joven en nuestros pueblos medio abandonados y tremendamente envejecidos. Pero hay que ofrecer incentivos compensatorios, generando servicios dignos similares a los que disfrutan otros ciudadanos (infraestructuras, sanidad, educación, ocio, etc.), compensando fiscalmente, apoyando iniciativas innovadoras y pioneras para asentar nuevas poblaciones, etc.
La quesería es moderna, higiénica y funcional
Y tanto es así que su novia, que posee una empresa familiar, gracias en este caso a las nuevas tecnologías que sí existen en este valle de Soba, puede gestionar todo por ordenador y está encantada de acompañarle en este viaje y su padre, ya jubilado, también se ha trasladado a este lugar para ayudarles en toda esta aventura.
El nombre de “Axia”, hace relación con Aja, en su forma latina, lo cual ya indica una de las aristas culturales de la quesería y su quesero.
Así, pues, en esta vieja vivienda familiar, rehabilitada para instalar la quesería, con todas las condiciones técnicas y sanitarias exigibles en nuestros tiempos, es donde elabora y modela, con ilusión, perseverancia y manos artesanas unos quesos que, quienes los han probado, dicen que son exquisitos, por lo que las perspectivas futuras son halagüeñas y se le puede dar la bienvenida al mercado… La leche la adquiere a un ganadero local, cuyas vacas, que considera “suyas”, se alimentan del fresco pasto de estas alturas, en una total libertad y sin comer alimentación “ensilada” que podría dar un sabor poco agradable al queso. ¡Ahí está la diferencia!
Elabora un queso semicurado, cremoso, de un mes de maduración, con mohos en corteza, del tipo geotricum, camembert; y todo el proceso es completamente manual, salando el queso a mano, sin salmuera y con los ingredientes naturales. Es decir, ¡Un queso como se hacía antaño! Las piezas que elabora tienen formato redondo o tipo “rueda” y rulo
Se ha posicionado en las redes sociales, básico en nuestros tiempos, en Google, Instagram o Facebook, donde ya podemos constatar la interacción con sus visitantes y clientes, en una relación muy constructiva.
Daniel se ha instalado en este pequeño lugar y se ha integrado con su paisaje y sus gentes, hasta el punto de que ya ha participado en las últimas fiestas del lugar, las de Nuestra Señora de Irías, con una degustación de sus quesos.
Dado que está empezando, todos los quesos que elabora los vende en la propia quesería y en la zona más cercana, llegando solo hasta Ramales de la Victoria, aunque ha podido comprobar la buena aceptación de lo mismo, lo que le impulsará a aumentar la producción y ampliar la zona de venta de sus productos.
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Comentarios(10):
Mi mayor felicitación por ese sueño hecho realidad que seguro conseguirás muchos éxitos. Animo Dani!!!!
Mucha suerte
Enhorabuena, mucha suerte. Orgullosa de ser de Soba, saunque estoy a 800km.
Pasaremos a conocer tu quesería este mismo verano! Tendrás mucho éxito, ánimo!!
Me alegro mucho que jóvenes como tú tenga esta iniciativa, y sobre todo que se hagan en nuestro PRECIOSO valle. Mucha suerte.
Te deseo lo mejor en tu andadura persiste en ello y el mundo será tuyo ????
Explendida crónica informativa, para poder seguir adquiriendo conocimientos sobre nuestros quesos
Enhorabuena eres un campeón!!
Enhorabuena eres un campeón!!
Me alegro que haya jóvenes emprendedores que vuelven al entorno rural buscando desarrollar su ámbito profesional. Ánimo Dani