El queso de Santillana del Mar… ¡Un regalo!,

Y allí, en plena campiña y divisando todo el núcleo urbano de Santillana del Mar, Milagros Rioz Cobo (Suances, 1959) y Simón Gutiérrez Roiz atienden a sus huéspedes y elaboran el queso, actividad que comenzaron en 2013. Y también colaboran sus hijos, especialmente Simón Gutiérrez Rioz.

Casa Milagros es un hospedaje que se encuentra “en plena naturaleza y a un paseo del casco histórico de Santillana del Mar”; la filosofía de esta casa rural, es ofrecer los recursos que tiene el entono, los paisajes, la villa histórica, el desayuno con leche de calidad, el poder hacer una barbacoa en el campo… Para los niños es un lugar magnífico, pues pueden visitar la ganadería, ver las vacas, el caballo, que se llama Tango, así como el resto de animales domésticos, como los perros, los gatos,…

Y me encontré a Milagros en la XVI Feria del Producto de Santander, dando a conocer sus quesos, explicando cómo los elabora, porque el queso artesano, además de su exquisito sabor, textura, olor,.. ¡tiene alma!; el alma, la dedicación y el cariño que le dedican sus queseros

Una casa de campo con ganaderos desde hace muchos años, pues el bisabuelo de Simón tenía ganado y que se ha transmitido de generación en generación; ahora han pretendido dinamizar la explotación y obtener nuevos recursos, especialmente a la leche que es de excelente calidad y que, con la elaboración del queso, se obtiene un valor añadido. 

¡Toda la familia implicada en el trabajo!... Toda la familia está implicada en el trabajo de la ganadería, la casa rural y la quesería; especialmente su hijo, Simón. Y me dice Milagros que ella misma que es quien lleva el peso de la quesería, colabora activamente en la ganadería y es el alma de la casa…. Abajo, las cámaras de maduración del queso en la quesería

Su ganadería, compuesta por unas 60 reses, la mitad de ordeño, produce unos 160.000 l. de leche, que se vende a un precio muy bajo, lo que no compensa al ganadero cántabro, que se ve obligado a cubrir mínimamente los gastos y por ello muchos han tomado el camino de transformar esta leche en queso, que tiene una mayor compensación, tal como ha hecho la familia de Milagros.

Así, pues, complementan con una quesería, para la cual utilizan leche de vaca cruda de su propia ganadería, unos 50.000 l., con los que elaboran unos 6.000 Kg. de queso, el queso “Milagros”, curado, que tiene al menos 60 días de maduración y lo comercializan en formato redondo y rulo, con un peso de 280 gr. y 630 gr., en cada uno de los formatos.

La tarea es dura, pues Milagros, atiende a su trabajo en el campo, atendiendo al ganado, ordeñándole y también la casa rural, totalmente llena en épocas de vacaciones y temporada alta, con la quesería. Y, además, elaborar el queso, en función de la época del año y las circunstancias, obteniendo un producto magnífico, con el nombre comercial de la dueña, “Milagros”, y que tiene una excelente aceptación por los consumidores.

En la propia quesería se puede catar el queso y adquirir los mismos, alojarte en su casa rural, ver las vacas, el caballo, los perros y gatos, así como el huerto donde crecen las verduras y hortalizas; el contacto con la plena naturaleza es una de sus ventajas y, a un paso, Santillana del Mar, uno de los pueblos más bonitos de España.

…Y después de elaborar un buen queso, quizás lo más difícil es venderlo y ajustar la producción a la demanda; y así venden en la propia quesería, pues la villa de Santillana del Mar es un buen mercado potencial, ya que recibe miles de visitantes. Sin embargo, también es necesario distribuir con el vehículo familiar en toda la comarca del Besaya, a veces distribuyendo al comercio minorista y buscando todos los lugares donde pueda comercializarse.

Tiene una interesante Pág Web (https://casamilagros.es/queseria-ganaderia/) y la ilusión por ofrecer lo mejor para el visitante y quien quiera probar un queso de calidad y hecho solo con leche y leche de unas vacas que pastan libremente, también con la vista lejana de la medieval colegiata de Santillana del Mar. ¡Qué más se puede pedir!