Quien creó el virus, golpea al médico.

El legado completo de deuda que la izquierda entregó a Rajoy es de 774.000 millones, el ajuste, insisto, es de 65.000 millones, y ahora los que hicieron el agujero se manifiestan contra quienes, ante la ausencia de crédito internacional, no tiene más remedio que cerrarlo.

Quien creó el virus que envenenó nuestras cuentas públicas y gangrenó el sistema financiero, ahora golpea al médico barbudo que intenta sanarlo.

En la Diputación Provincial de Castellón, sí queremos ayudar en esa cura nacional, y tras treinta y cinco medidas de reducción de gasto, ahora además, hemos decidido bajarnos el sueldo. Así, el presidente, Javier Moliner, ve caer su nómina en un 25%, y aplaza su cobro mientras no lo hagan nuestros 5.800 proveedores, los que somos vicepresidentes en casi el 20% y el resto de compañeros, incluida la oposición, en un 9%.

Hemos querido hacerlo junto a nuestros seiscientos  esforzados trabajadores, que se quedan sin extra, que supone un 7.1% de su salario anual y que sufren no por las medicinas, sino por los siete años de desidia económica que nos enfermaron gravemente.

Además de las rebajas salariales que suponen de media un 17%, y se suma a la ya sufrida del 5% de hace dos años,  se prescindirá de seis asesores, de un 30% de los vehículos oficiales, de un 33% de escoltas y desaparece la única empresa publica de la Diputación. Son todas ellas medidas, que ascienden a 650.000 euros, y que se adicionan a las que ya nos han permitido ahorrar 11 millones de euros en el primer año de gobierno, y todo para estar junto al médico al que otros se empeñan en golpear.