Noticias de Cantabria
13-12-2014 22:34

Pobladura del Valle. Las bodegas

Pobladura del Valle, es una localizada zamorana, que pertenece a la comarca de Benavente y Los Valles. Cuenta actualmente con 316 habitantes que la mayoría trabajan en la veintena de empresas allí ubicadas, con lo que su tasa de paro es prácticamente nula.

Al estar bien comunicada, sus museos y bodegas son visitados por mucha gente de Benavente, León, Valladolid y Zamora, entre otros muchos orígenes. Es Camino de Santiago para los peregrinos que van desde Madrid o Andalucía y Extremadura, que enlaza después con el Camino de Santiago Francés y está en medio de la Ruta de La Plata que une Sevilla con Astorga.

Con sus dos museos, el del Whisky, que se encuentra dentro del bar-cafetería Vafer y que colecciona cerca de 2.000 tipos diferentes de botellas  de whisky, el Museo Naval y Ferroviario de maquetas en una nave industrial, cerca de la urbanización Las Fontanillas, con más de 150 embarcaciones de guerra, transatlánticos y buques de carga, cuenta además con 400 bodegas de vino registradas, horadadas a pico y pala, en el interior de la tierra. 

Estas bodegas se comenzaron a horadar en la Edad Media aprovechando los pequeños promontorios de materiales arcillosos en lugares alejados del pueblo y se construyeron tierra adentro a pico y pala, a partir de los ventanucos que sobresalen en lo alto, para terminar su construcción por la puerta. Dentro de las inmensas bodegas que pude visitar, hay tinajas, allí dentro construidas, con capacidad para 100.000,-litros de vino, la más grande. Lógicamente hay bodegas de todos los tamaños, pero la que he visitado es enorme, pasillos por doquier, barricas en cada esquina, vagonetas con raíles para transportar la uva, algo indescriptible, por lo que es muy recomendable visitarlas y comer posteriormente en cualquiera de los restaurantes que hay dentro de alguna de ellas.

La forma de construirlas es muy curiosa, pues debido a que el espacio es reducido, cada vecino iba haciendo túneles en el interior de la montaña y cuantos más hacía, mas tenía. Lógicamente quien más mano de obra tenía, más grande era su bodega y más túneles hacía. De vez en cuando para delimitar propiedades, se hacían túneles laterales por si el vecino se acercaba y coincidían en uno. Si así ocurría, se tabicaba y se horadaba en otra dirección, convirtiendo el promontorio en un gran queso gruyere.

A partir del 17 de Septiembre de 2.010, los titulares de las bodegas, están obligados a su conservación y a reparar los desperfectos que las lluvias ocasionen en ellas, con el fin de no perjudicar a los titulares de otras que procuran su buen estado de conservación. Esta decisión se tomó ya que alguna de ellas debido a su mala conservación tuvo derrumbes en su interior que ocasionaron desperfectos en las bodegas colindantes, por lo frágil de sus estructuras y sus tabiques de separación de unas con otras. 

Así mismo se ordenó la retirada de la vegetación sobre las cubiertas de las bodegas y su entorno, pues se adujo que estos inmuebles fueron construidos con gran sacrificio y esfuerzo por los antepasados, quienes los legaron a su vez a sus descendientes.

Creo que es una muy buena política de mantenimiento de las bodegas por parte del Consistorio.

 

 

 

 

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Comentarios(1):

PAD - 16-12-2014

¡Qué recuerdos!.... En el año 1973 estuve visitando las bodegas cercanas de Altobar de la Encomienda, dónde pasé algunas jornadas con mis amigos Celso y Clemente degustando el vino de la zona y los embutidos y otras delicadezas de la zona. No ha sido fácil olvidarlo y con parte del vino que nos sobró, lo embotellamos y le pusimos una buena etiqueta: Bodega de la Sorbona y el tema tenía que ver con la forma de beberlo y no con la vieja universidad de Lutecia. Bastantes años después bebí algunas de las botellas y se conservaban en perfecto estado.... Pero son recuerdos que ya han doblado el cabo de las cuatro décadas....