Golpe de Estado...
¡Hay que llamar a las cosas por su nombre! Nos ha dicho Alfonso Guerra, con razón y conocimiento de causa, que “en Cataluña se está dando un Golpe de Estado a cámara lenta”

Nos ha dicho Alfonso Guerra, con razón y conocimiento de causa, que “en Cataluña se está dando un Golpe de Estado a cámara lenta”; es la segunda vez que una situación de este tipo se da en nuestro país desde la aprobación de la Constitución Española de 1978 y la anterior la protagonizó el 23 de febrero de 1981 un Guardia Civil secuestrando en el Congreso de Diputados a los representantes de la voluntad popular, Gobierno incluido, y que tenía detrás a algunos botarates y algunas personas relevantes que no acabaron dando la cara, escondiéndose cobardemente.
Entre ambas situaciones existen algunas similitudes y diferencias:
a) En ambos casos, se trata de antidemócratas, que desean torcer el Estado de Derecho que nos hemos dado, de forma consensuada y muy mayoritaria, todos los españoles, a través de una Constitución. Los máximos responsables, Tejero y Mas son dos iluminados que han arrastrado irresponsablemente a muchos a un abismo.
b) La de Tejero fue muy rápida y se desmoronó en horas. La de Cataluña se está produciendo “a cámara lenta”, como ha dicho el Sr. Guerra.
c) En aquella de hace ya más de tres décadas, todas las fuerzas políticas estuvieron del lado de los demócratas; en la de Cataluña, la izquierda está en la “equidistancia”, se pone de perfil y no sabe en qué bando está, aunque bien parece que del lado de los no demócratas. ¿Recuerdan aquella multitudinaria manifestación y fotografía con el Rey de Adolfo Suárez, Leopoldo Calvo Sotelo, Felipe González, Santiago Carrillo y Manuel Fraga al día siguiente del intento de golpe de Tejero?.
d) En la de Tejero, acabaron muchos de ellos en un Consejo de Guerra por intentar un golpe de estado que cambiase el rumbo del país, con nuevos dirigentes salidos de la fuerza de las armas; muchos fueron condenados y tuvieron que pagar por la fechoría. En la Cataluña de nuestros días se está produciendo, “a cámara lenta”, una secesión, rebelión, sublevación, sedición, desacato e incumplimiento de las leyes, intento de golpe de estado y demás atrocidades jurídicas y sociales; todos los implicados deberán acabar ante los correspondientes tribunales de justicia y deberán pagar por su osadía y por el daño producido.
e) Lo mismo que se restableció el orden y la ley en 1981, deberá restablecerse en la actual y endemoniada situación catalana, con todo el peso de la ley y la actuación de todos los resortes de los poderes públicos, depurando las responsabilidades personales, civiles y penales de todos los participantes, sean políticos, funcionarios, medios de comunicación y demás cómplices.
f) Y la gran diferencia entre ambas actuaciones es que Tejero era un patriota equivocado que en ningún momento pensó en dividir España; Mas y los suyos, sólo tienen una obsesión: dividir España y provocar una ruptura.
g) El uno lo hizo con la fuerza de las armas para subvertir el orden constitucional; el otro lo hace desde el ejercicio del poder, también subvirtiendo el mismo y utilizando los propios poderes que le otorgan la Constitución y las leyes, pues es el representante del Estado en Cataluña, lo que es una total traición y una deslealtad inconmensurable. ¡Y yo, y muchos ciudadanos, nos sentimos violentados!.
h) Algunos han olvidado que sin el cumplimiento de la Ley no hay Democracia.
Nos quedan a los demócratas muchos interrogantes: ¿Desde cuándo el derecho a decidir se antepone a las leyes vigentes?; ¿Cómo es posible que estos independentistas desprecien la bandera de la Comunidad Autónoma de Cataluña y se abracen a una “estelada” de anacrónicas reminiscencias revolucionarias?; ¿Dónde estarán aquellos alcaldes de la vara que fueron a presionar y hostigar a los tribunales cuando toque pedir responsabilidades?; ¿Quién se va a hacer responsable de la división social que se ha provocado entre los propios catalanes?; ¿Quién se va a hacer responsable de los daños morales y económicos que ya se han producido al resto de los ciudadanos españoles?; ¿Cómo es posible que una buena parte de la izquierda, incluido el propio PSOE con sus subterfugios, estén en el bando de los independentistas y sediciosos?; ¿Cómo es posible que PedroSánchez manifieste sin ningún pudor que el responsable del independentismo catalán es Mariano Rajoy?; ¿A qué viene este delirio?; ¿Es para él y los suyos más importante ganar las próximas elecciones que defender la unidad de España, en la que parece que no cree?; ¿Cómo es posible que pretenda ser el próximo presidente del Gobierno de España, si no cree en la unidad de España?...
A este paso, yo también me voy a independizar y proclamo “la república independiente de mi casa” (Sic).
No nos quepa la duda que, así como los asaltantes del Congreso de los Diputados acabaron saltando por las ventanas, a los actuales dirigentes responsables catalanes del independentismo, habrá que sacarles por la puerta de la vergüenza para conducirles a los tribunales y de éstos a la cárcel, dónde ya estuvieron otros responsables catalanes de similares actuaciones en tiempos ya pretéritos, pero no olvidados.
A los demócratas nos queda la seguridad de que se actuará conforme a la ley y al sentido común, con un timón que está bien asido a las manos de Mariano Rajoy y que tiene como fiel timonel –“coincidimos en lo esencial”, ha afirmado- al catalán Albert Rivera; los demás,…. ¡Ni están ni se les espera!.
Y espero que al actual Gobierno si tiene que intervenir la Autonomía de Cataluña, es decir, aplicar lo que dice la actual y vigente Constitución Española de 1978 en su artículo 155, lo haga sin que le tiemble el pulso y estoy seguro que no pasará absolutamente nada y que la mayoría de los catalanes y españoles se lo agradecerán. Aunque, ¿Vd. cree que tendríamos la foto del Rey con Mariano Rajoy, Pedro Sánchez, Albert Rivera, Pablo Iglesias y Alberto Garzón contra el independentismo catalán?.
El Rey Juan Carlos I fue el mayor artífice para desactivar el golpe de Tejero (No olvidar a los subsecretarios presididos por Francisco Laína); Felipe VI está teniendo un papel fundamental para deslegitimar la diarrea independentista catalana.
Que nadie tenga duda que vamos a ganar los demócratas y alguno se va a ir de bareta por la pata abajo.
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