El Sarruján de Carmona…

…Pero hoy me voy a referir a Julián Díaz, a quién se le conoce como Sarruján de Carmona, y este oficio le practicó durante años en los puertos de Sejos, allá en las altas cumbres de la Mancomunidad Campoo-Cabuérniga.

Julián nació en 1924 en Carmona y era hijo, nieto y bisnieto de pastores; con cuatro años sube por vez primera a Sejos, mal calzado y mal vestido, pues todo su atuendo era una vieja y remendada camisola y como prenda inferior, la “joraca”, especie de calzón, con abertura por delante y por detrás para hacer las necesidades biológicas.

Allí pasó duros veranos guardando el ganado de los demás, conjuntamente con su padre y hermanos y aún aprovechaba los inviernos para hacer de criado en otros lugares como Prellezo, Valle de Cabuérniga,… Allá en las alturas tuvo su universidad de la vida, pues no fue a la escuela, ya que Julián cambió la escuela de su pueblo por la escuela de las alturas de Cantabria y, con la perspectiva del tiempo, se puede decir que esta escuela de la naturaleza y del esfuerzo la aprovechó bien, pues hoy, desde la altura de sus cerca de noventa años, es una persona realizada y culta, bastante más culta de lo que parece…. En las alturas de Sejos conoció al oso pardo y al lobo, que merodeaban para saciar su apetito con el ganado que ellos guardaban; allí aprendió la propia supervivencia, de allí guarda recuerdos imperecederos…

Cada 16 de junio, el ganado de la zona cabuérniga sube a pastar a las alturas de la Mancomunidad Campoo-Cabuérniga, día en que Julián no desaprovecha la ocasión para subir a Sejos, y acabado el verano, el ganado, vuelve a los pueblos gordo y lucido y se realizan fiestas folklóricas como la Fiesta de los Campanos en Abiada (Hermandad de Campoo de Suso), la Pasá de Carmona, la Campaná de Cabuérniga o la Olimpiada del Tudanco de Cabezón de la Sal, que celebrará el próximo día del Pilar su XXXIV edición.

Probablemente, es el momento más esperado del pastor, con el deber cumplido, acompañando al ganado, en un paseo hacia los pueblos del valle que bien se parece a aquellos paseos triunfales de los victoriosos generales romanos…

En el valle de Cabuérniga, cada segundo domingo de octubre,  se celebra la “Campaná”, que es una “pasá” de ganado tudanco que regresa de su estancia en los puertos altos, engalanadas y haciendo sonar los campanos en su recorrido, y que atraviesa los lugares del municipio de Cabuérniga de Renedo, Selores, Terán, Valle y Sopeña. Julián, quién ha vivido este mundo con gran intensidad, nos ha dejado estos versos:

Ya bajan las vacas tudancas,
camino de las praderas,
por senderos y cañadas.
son las vacas de mi tierra
Bajan de los puertos altos,
que subieron en primavera,..

Y este es el momento culminante del oficio de los pastores,  la Pasá, como aquella que antaño se hacía en Carmona, después recuperada y que ha vuelto a dejar de hacerse,  como espectáculo para propios y extraños…. Julián siguió después otros derroteros, trabajó en varios oficios, creó una familia y nunca olvidó sus raíces, que ha ido contando y pregonando por los pueblos de Cantabria, así como su saber artesano de la madera y aún le podemos ver en algunas de las actividades festivas más importantes, como el Día de Cantabria en Cabezón de la Sal.

Podría seguir hablando largo y tendido de este interesante personaje y algo más diré en la conferencia que pienso ofrecer, conjuntamente con el mismo Julián, en el Centro Gallego de Santander, el próximo día 16 de octubre a las ocho de la tarde…