Noticias de Cantabria
25-05-2009 10:00

A la segunda división económica

La crisis económica nacional no durará eternamente pero cuando remita estaremos ya en la segunda división económica europea para varias décadas. Hacer pronósticos en economía es siempre aventurado. Escribí el pasado año que el presente ejercicio sería “inimaginablemente” malo, y, como era fácil, acerté, advertí públicamente que veremos funcionarios sin cobrar y vamos camino de ello.

Así que me permito hacer alguna predicción que el tiempo juzgará.

Primero, en economía finalmente se alcanzan nuevos equilibrios y la crisis no es perpetua. Las actuales caídas en el empleo y la producción se van a moderar en breve, aunque se seguirá destruyendo empleo toda la legislatura. La morosidad bancaria y las intervenciones públicas en las entidades financieras no han hecho más que empezar, seguirá la caída de precios, y dejarán de llegar inmigrantes, aunque no se marchará ninguno de los cinco millones actuales.

Segunda, la pobreza será persistente, nos hemos instalado definitivamente en la segunda división de la Unión Europea. Cuando en 1995 el entonces ministro Pedro Solbes hablaba de una Europa de dos velocidades, lo hacía situando a España en la más lenta dado que era impensable, que cumpliésemos los criterios de Maastrich. Sin embargo un gobierno popular superó los cinco exámenes –inflación, tipo de interés, déficit, endeudamiento y tipo de cambio- y durante algunos años fuimos la locomotora laboral de Europa, estuvimos en la primera división e incluso Zapatero creyó que estábamos en la Champions, mientras su desidia en lo económico nos conducía a segunda.

Tercero, no habrá salida de la crisis con rebote, es decir en “V” como ha ocurrido siempre en Estados Unidos, ni en “U” como solía suceder en Europa, España tendrá salida en “L”, es decir, tras la caída seguiremos en el pozo indefinidamente. Tras la crisis no se destruirá empleo, el PIB será positivo pero inferior al 3% que permite en España la generación neta de empleo, o sea, que nos estabilizaremos pero en el fondo.

Cuarto, el número de parados es probable que alcance en 2010 los 5 millones y, lo que es peor, que se asiente durante años nuestra economía sobre en el entorno de los cinco millones de desempleados, en lugar de entre uno y dos que como en la última década.

Quinto, el déficit estará desbocado y la deuda pública alcanzará niveles desconocidos.

Sexto, crecerán las desigualdades, en España solo se han reducido durante la etapa popular según los datos de la Comisión Europea, y el actual nivel de prestaciones públicas, sanitarias, educativas y en pensiones no se podrá sostener.

Séptimo, el final solo vendrá dentro algunos años y principalmente por el sector exterior. La deflación –caída en los precios- hará que para los extranjeros vuelva a ser atractivo comprar viviendas aquí, las exportaciones por idéntico motivo crecerán y la inversión foránea vendrá a comprar gangas. Todo lo cual supondrá un impulso económico nacional.

Lo anteriormente expuesto tendrá lugar si continúa el mismo gobierno, con idénticas políticas, y no hay nuevos fenómeno imprevistos, lo que en economía se llama “ceteris paribas” –si todo lo demás sigue igual-.

La acción del gobierno con el Plan E, es decir llevando a cabo actuaciones públicas improductivas con deuda, agrava la crisis ya que  deja hoy sin préstamos a los particulares y mañana les sube los impuestos para amortizar la deuda pública que ellos sí pagan.

No en vano el anuncio de que la nueva Ley de Economía Sostenible se va a aplicar en Andalucía como modelo, que tiene diez puntos más de tasa de paro que la media nacional, indica el futuro que nos espera a todos los españoles.

Aunque no necesariamente debe ser así, se puede cambiar de gobierno y de políticas.

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Comentarios(1):

Adivino - 28-05-2009

Teniendo de presidente del gobierno a un inutil como Zapatero y unos ministros y ministras de lo mas incompetentes es facil averiguar lo que nos depara el futuro,nada bueno.