Noticias de Cantabria
22-09-2024 06:38

Ucrania entre Trump y Kamala. Miguel López Sintes

La participación de USA en la guerra de Ucrania no parece que a corto plazo pueda sufrir muchas variaciones, gane el que gane, en la carrera presidencial americana. Hay que medir las promesas electorales y ninguno de los dos ha dejado muestras de inclinarse de forma clara hacia algún de los lados,

 

La participación de USA en la guerra de Ucrania no parece que a corto plazo pueda sufrir muchas variaciones, gane el que gane, en la carrera presidencial americana. Hay que medir las promesas electorales y ninguno de los dos ha dejado muestras de inclinarse de forma clara hacia algún de los lados, y como no puede ser de otra manera reconocer el apoyo firme al pueblo ucraniano dentro de lo mensajes políticamente correctos.

Trump quizás con un sentido más practico y con un discurso dirigido a la América profunda donde los problemas son claramente los cercanos y los importantes conflictos e intereses internacionales se ven mas como un coste que como una inversión, es muy posible que sin tener a la vista una solución, pueda ir tomando distancia sobre el problema, y sin disminuir drásticamente la aportación militar, busque una salida dentro de la política internacional. La imagen que de él se transmite por esta parte del Atlántico es un estereotipo un poco alocado, pero dudo que se corresponda con la realidad de un hombre llegado desde el mundo empresarial y con el bagaje de una legislatura al frente del país más poderoso.

Kamala me parece que es una incógnita. Partiendo de la base que ha llegado de rebote a la carrera presidencial, tras una vicepresidencia un tanto gris, y nominada como mal menor dentro de su partido ante la carencia de tiempo para la búsqueda de un candidato en sustitución de Biden, parece lógico que surjan dudas de su liderazgo. No se sabe realmente quien definirá la política exterior, y si será autónoma en esa toma de decisiones o dependerá de los núcleos de poder que la han aupado. Si parece, según la imagen vendida por estos lares, su cierta tendencia de izquierdas.

Tanto uno como otro, supongo que en sus decisiones tendrán que tomar en cuenta el importantísimo apartado económico, y fundamentalmente el apartado de la industria armamentista americana que vive un momento dulce gracias a este conflicto y como es lógico presionaran para su continuidad. Detrás de todo conflicto siempre encontraremos alguna motivación económica.

Otro apartado de peso es la posición de la sociedad ante el conflicto, y desde luego lo que a primera vista no aparece, es una presión social en ninguna dirección, como en su día hubo con la guerra de Vietnam. La no implicación directa evita la aparición de muertos propi osque es lo que aumenta esa sensibilización y por el momento esa posibilidad parece descartada.

Así las cosas, ninguno de los dos parece que se pueda mostrar proclive a decantarse por alguna opción y en esto de las elecciones ya sabemos que enseñar la patita a destiempo puede acarrear descalabros. Como ejemplo reciente la prudencia en la toma de decisión sobre el uso de misiles de largo alcance. Lo que sí parece que puede tener una influencia clara, será la evolución del conflicto de Israel en Oriente Medio y por supuesto la presión de China como contrapeso en la política mundial, que cada día es más acentuado, y lógicamente trae de cabeza a todo el estamento americano.

Sé el primero en comentar