¡Salvad la siderurgia de Cantabria!

El grito de guerra del PNV, del Gobierno Vasco, de las instituciones, de los empresarios es: ¡Salvad la siderurgia del País Vasco!, y ¿en Cantabria? Nada. Para empezar no tenemos ni una prensa de papel de aquí, sólo un periódico, el que más vende, dicen, y con accionariado del País Vasco. Pueden acceder a él  y verán fotos, auto loas y desayunos en algún hotel donde van curiosamente la clase política y algunos empresarios jubilados, los que están en activo no van, bastante tienen con salvar sus empresas, luego difícilmente puede realizar una defensa beligerante de la siderurgia de Cantabria salvo alguna página interior. 

Cantabria se juega mucho, se juega todo a una carta, y parece que estamos ya fuera de juego sin empezar la partida. Nosotros desde este digital vamos a ser beligerantes a favor del Alto Campoo porque es nuestra tierra, de los trabajadores, y lanzamos el mismo grito que en el País Vasco: ¡Salvad la siderurgia de Cantabria¡ Pero no es suficiente si además de dar el grito  mediático  no es acompañado por el poder político. Somos victimistas y no sabemos luchar por lo nuestro, así nos parieron.

Pero es que además el deshielo político, dice toda la prensa nacional, entre el PNV y Rajoy  producirá cuantiosas inversiones  estatales vía subvención etc. aparte  de las que se produzcan por parte del  Gobierno Vasco para salvar su siderurgia. ¿Y  Cantabria qué?. Nada.

Desde el principio vemos la desproporción en el planeamiento de reestructuración de la antigua Gerdau (Sidenor), para Cantabria será  del 75%  de los trabajadores, para Basauri el 20% y para el resto de las fábricas negociaran por debajo del 50%. Dice el run run de la calle que en el País Vasco ya está todo pactado, atado y bien atado y que la cenicienta será Cantabria. No tenemos la menor duda. A pesar de todo nosotros amigos de la boina, lanzamos el grito de guerra: ¡Salvad  la siderurgia de Cantabria¡

En esta guerra tan crucial para Cantabria carecemos de material de autodefensa y estamos desnudos, inertes,  frente a enemigos muy superiores en potencia de tiro. Nuestro armamento de defensa y de protección de nuestras empresas son tira chinas. Ahora bien, al menos nuestro gran embajador en Madrid, De la Serna, está moviéndose para que al menos a Cantabria se le dé lo mismo que a los demás porque hasta ahora no nos han dado ni la limosna los diferentes gobiernos del PP y del PSOE. Hacen bien y practican buena política  algunos políticos  que han modificado sus mensajes, dando un giro de ciento ochenta grados, y ahora  se postran de hinojos frente al Ministro de Fomento. Pero no nos desviemos del tema, a día de hoy nuestro grito de guerra tiene que ser: ¡Salvad la siderurgia de Cantabria!