¡No me roben España!

El pasado domingo he visto como todo esto ha saltado por los aires, al comprobar cómo desde una comunidad autónoma de España, se permiten el lujo de vulnerar la ley y romper con una convivencia pacífica y democrática para poner en marcha un proceso de ruptura de parte que pretende llevar a Cataluña y por ende a España a una situación de caos democrático y político para cumplir ciertos sueños y planes que no son ni comprensibles ni admisibles en este siglo XXI.

Siempre he creído en que el estado sería capaz de protegernos a los ciudadanos de estos desmanes políticos y que la fortaleza del mismo, nos garantizaba pertenecer a una sociedad democrática en libertad y respetuosa con las leyes para convivir. Lo que no contaba y parece que desde ayer está pasando, es que los políticos que tenemos fueran tan timoratos a la hora de proteger a los ciudadanos, defender la democracia y hacer prevalecer la ley por encima de todo. No entiendo que teniendo los instrumentos que tenemos para defender la democracia no tengamos el valor de aplicar artículos como el 155 que ponga en su sitio a quienes quieren hacer daño a España. Tampoco comprendo cómo quienes nos rigen contemplen una posibilidad de diálogo con quien ha vulnerado la ley, porque quien vulnera la ley, queda deslegitimado para representar a nadie, venga de donde venga y pretenda lo que pretenda.

Como español, exijo a mi gobierno que actúe de una vez, que haga algo por mí y por los 47 millones de españoles que configuramos esta gran nación que es España y que nos quieren robar por la cara. Aquí, no valen siglas ni partidos, no valen ni izquierdas ni derechas, solo hay un camino y es la aplicación de esa ley que nos hemos dado todos para convivir en paz, democracia y libertad. Lo contrario a esto, sería una gran estafa política a todos los ciudadanos.

Particularmente tengo que confesar que estoy decepcionado porque durante toda mi vida, que ya pasa del medio siglo, siendo de donde soy y habiendo visto morir a jóvenes servidores de  España y a políticos de mi generación por la defensa de la Constitución, la democracia y la libertad. He vivido muy de cerca el sufrimiento de muchos ciudadanos que por defender a España y sentirse español, han sido acosados, vilipendiados y en algunos casos vejados, teniéndose que marchar incluso de la tierra que les vio nacer, entre los que yo mismo me encuentro. ¿Qué les vamos a decir a todos estos que se han sacrificado por esta nación? La verdad es que esta gente no se merece todo lo que está pasando ni consintiendo. ¿Es este el resultado a tanto sacrificio y dolor? Yo no sabría dar respuesta a su pregunta.

Por favor ¡no nos roben España por la cara y apliquen la ley! ¡Defiendan la democracia, la libertad y el estado de derecho!