Noticias de Cantabria
28-03-2008 21:00

Esto es lo que hay

La victoria de los socialistas en las elecciones del pasado 9-M ha de servir para renovar profundamente la cúpula del Partido Popular, así como su Comité Ejecutivo Nacional. A pesar de que los pesos pesados de esta formación cerraron filas en torno a Mariano Rajoy, se especulaba con su marcha y finalmente no fue así.

Y es que de lo contrario hubiera sido un error, ya que se hubieran abierto luchas intestinas por la Presidencia de los populares; no era cuestión de echar por la borda el excepcional trabajo de José María Aznar de aglutinar en su día a todo el centro-derecha en un mismo Partido.

Cierto que los resultados no han sido los esperados, pero nadie ha puesto en cuestión el liderazgo de Rajoy desde dentro. No estamos ante tal varapalo que necesitase de una purga inmediata dicha formación: se ha alcanzado una cifra histórica de votos, con el 40% de los sufragios. Hemos de tener en cuenta que con pocos votos más, Aznar obtuvo la mayoría absoluta en el año 2000. El acierto y la astucia de Rodríguez Zapatero ha radicado en apropiarse de los votos de la izquierda española y de los nacionalistas.
 
Rajoy ha mantenido honrosamente al electorado que ya le apoyara en 2004, y no sólo eso, sino que lo ha aumentado sustancialmente por eso que llaman “el centro”. Si bien, como decía estos días atrás, Zapatero ya no es “Presidente por accidente”, Mariano Rajoy tampoco es el candidato señalado por el dedo de Aznar para presidir el PP y optar a la Presidencia del Gobierno en 2012. Estoy convencido por ello de que el Partido Popular saldrá fortalecido del próximo Congreso de junio.

Acertadamente, aunque de forma irónica, como es habitual en él, Rajoy se comparó con González y Aznar, recordando que ambos perdieron también dos elecciones antes de llegar al poder. Hay que reconocer que los dos primeros salieron de la nada y siguieron una espectacular trayectoria ascendente, algo que no sucede con el pontevedrés, pero ahora ésa no es la cuestión.

Rajoy ha sugerido ya que prescindirá de sus principales colaboradores en estos cuatro años, lo cual ya es una feliz noticia, porque de lo que se trata ahora de hacer oposición con nuevas caras y, sobre todo, con nuevas ideas e iniciativas, aunque se mantengan y fortalezcan los valores de una formación representativa de millones de españoles.

Mariano Rajoy cuenta con un amplio respaldo de los barones populares, como Gerardo Camps y Esperanza Aguirre, responsables dos de las organizaciones territoriales clave: Valencia y Madrid.

Nadie le puede negar a Rajoy su moderación, honestidad y compromiso con los valores y principios que defiende el Partido Popular, pero habrá de hacer un gran esfuerzo para transmitir con más ímpetu la ilusión necesaria para superar a Zapatero en popularidad. No es nada nuevo. Mientras a éste las cámaras le quieren, al primero le falta algo que le permite conectar de una forma más intensa con los ciudadanos. Al decidir presentarse de nuevo a la Presidencia Nacional de su Partido va a ser mucho más lo que se le exija, es lógico. Como él ha sentenciado: «Esto es lo que hay». Y hay que apoyarle, sin lugar a duda.

En la Comunidad, Lola Gorostiaga nos daba la feliz noticia a todos, todas y todes, de que también optará a la reelección en la Secretaría del PSC-PSOE. No sé si algo tendrá que ver las dudas al respecto que desde esta columna se le planteaban de cara a su futuro, ya que de no mantenerse atrincherada en Bonifaz, o de no llevársela ZP a Madrid para seguir engordando su interminable lista de asesores, no sé qué sería de ella. En Piélagos no creo que quiera finiquitar su rentable vida política; por otro lado no la quieren. De no ser así, ya me dirán cómo y dónde podríamos colocarla.

En relación al PP, los de Joaquín Costa habrán de esperar a ver qué pasa en el Congreso de junio y proceder a un cambio tranquilo, en el mismo sentido que los de Madrid. La incógnita estará en si Mariano Rajoy se lleva a Iñigo de la Serna a Génova o le pedirá que asuma el reto de liderar el Partido a nivel regional con la encomienda de recuperar el Gobierno autonómico, previa reconciliación con el PRC, su militancia y su electorado.

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Comentarios(4):

Pepero - 31-03-2008

Lo de que el PP que hizo Aznar aglutino a todo el centro derecha no es cierto,ya que este PP esta mas a la derecha que al centro, es por este motivo por el que no obtienen los votos necesarios.Habria que cambiar de lider para que se identificara a este partido como mas centrista por muchas luchas internas que se originaran,me veo en las proximas elecciones con mas de lo mismo y sino al tiempo.Mas vale una revolucion momentanea en el partido que un estancamiento por seculan seculorum...

NUNCA MAIS - 30-03-2008

Efectivamente, Iñigo de la Serna sería un buen fichaje en el nuevo equipo del PP. El chico promete y sería estupendo que Cantabria contara en Génova con su voz. Eso traería aires nuevos al PP de Cantabria que es lo que le falta para arrasar en las autonómicas. La indolencia de anteriores equipos ha propiciado la permanencia de Revillas y Gorostiagas en el gobierno regional. Ha llegado el momento de reaccionar y mandar a Revilla a hacer un curso de meteorología a la Antártida, a ver si aprende...

Del PP - 01-04-2008

No se quien seria buen fichaje para el PP de aqui,lo que esta claro que Nacho Diego es una losa demasiado pesada para el partido,yo creo que no saben a quien nombrar pero el actual presidente en cantabria del PP esta desprestigiando al partido.Que le reenvien a Astillero donde nunca debio salir

Krut - 01-04-2008

Pues tengo la esperanza de que el cambio en el PP nacional imponga el cambio en el regional. Y no estoy nada seguro de que Serna sea tan distinto en el fondo a los actuales, que es hermano en lo político de Diego, hijos (también en política) los dos del nada ejemplar José Luis Gil. El recambio ilusionante ya se ha ido del partido gracias a la labor de Zaplana.