El nuevo curso político desde la perspectiva de un regionalista
Iniciamos un nuevo curso político en Cantabria con el problema de la crisis económica que afecta a la economía española y al mismo tiempo, el debate sobre las medidas que viene aplicando el Gobierno de España.
Antes de entrar en el detalle de asuntos más específicos de Cantabria -aunque esa situación económica lo es, sin duda- la visión que mantengo sobre este asunto, parte del interés general:
Se precisan, digo, acuerdos generales para ofrecer alternativas que respondan al conjunto de la política española, es decir, una especie de renovación de Pactos de la Moncloa, que puso en marcha el recordado (al menos por mi) Adolfo Suárez y que tan buenos resultados ofrecieron para la modernización económica de España. Pactos en los que intervinieron las fuerzas políticas, los sindicatos y el empresariado. En la coyuntura que vive España, la medicina no debe ser, de izquierdas ni de derechas, sino del sentido común, del sentido de Estado y responder así, al interés general, que es lo que demandamos los españoles y por tanto, los cántabros.
En algo sí estamos de acuerdo los regionalistas. Ciertamente hay asuntos en los que coincidimos con unos y con otros:
a). La necesidad de mantener políticas sociales para los sectores más afectados por la crisis.
b). La oportunidad de elevar al máximo, la inversión en infraestructuras, para mantener e incrementar, la inversión pública, con su repercusión en el empleo y en la parte que toque, a Cantabria.
c). Que la solución no es subir impuestos, más aún, si ello incidiera negativamente en la clase media y en su capacidad de gasto o inversión.
d). Por último, la necesidad de incorporar al empresariado al pacto nacional, porque para salir de la crisis, la voz de los empresarios, no sólo debe ser escuchada, sino atendida en lo posible. Realizadas estas reflexiones sobre lo que acontece a nuestro alrededor como españoles, centro la atención sobre asuntos más domésticos, más cercanos y que por ello, tienen un gran interés.
Sin duda hemos vivido un verano intenso en lo político. Se ha demostrado como el Gobierno de Cantabria, hace los deberes y así, ha sido constante la presencia del Presidente Revilla y de su Consejero de Obras Públicas, señor Mazón, en la inauguración de variantes, nuevos trazados, firmes de carreteras, puentes y otras infraestructuras que demuestran que el dinero y sus inversiones, se ejecutan.
Esto ha sido importante, como también, los resultados de la temporada turística en Cantabria, pues si es cierto que el dinero de lo turistas ha sido más.. controlado, por los efectos psicológicos de la crisis, los niveles de ocupación en nuestra Comunidad, se han situado por encima de registros de años anteriores. Evidencia la cosa que, se está trabajando bien en este Sector, difundiendo todas las posibilidades naturales y culturales que ofrece la región y que atrae a un turismo. de calidad. Los datos están a la vista y se ha aguantado, insisto, mucho mejor la caída nacional del turismo.
De lo vivido institucionalmente, destacaría desde mi particular punto de vista, dos hechos: las reuniones en Comillas, bajo el amparo de la Fundación, del Instituto Cervantes, así como, de los Colegios del Mundo. Presencia ésta gracias al convenio que el Presidente Revilla firmó el 30 de mayo en presencia de los Reyes y que culminaba una de las aspiraciones más deseadas del Presidente Cántabro. Esta Fundación de los Colegios del Mundo ya ha elegido formalmente a Comillas, como Sede de su futura presencia en España.
Pero siguiendo en Comillas, quiero destacar la importancia de la Cumbre cántabro-vasca entre los dos Ejecutivos,.prueba de la normalidad institucional y que ha colmado otra de esas aspiraciones de Miguel Angel Revilla, al hacerse realidad el desalojo del PNV del Gobierno Vasco con el consiguientes cambio de política, es decir, el triunfo del constitucionalismo, sobre el soberanismo. Creo profundamente que de estos encuentros, pueden y deben salir culminaciones positivas de objetivos comunes de cántabros y vascos.
Septiembre ha marcado el inicio del nuevo periodo de Sesiones del Parlamento. Se ha iniciado marcando desde el Grupo Regionalista, la iniciativa política en dos vertientes: la reivindicativa y defensa de los intereses de Cantabria y la institucional, con la necesaria reforma del Estatuto que planteamos los regionalistas. La entrevista del Presidente y del Ministro de Fomento, se ha visto necesaria desde este Grupo, sobre todo por la necesidad de que el Ministerio aclare la situación de algunos tramos del tren de alta Velocidad con Madrid, en concreto el que une Villaprovedo-Alar y Alar-Reinosa. En el PRC han surgido dudas en torno a algunas iniciativas del Ministerio y es nuestro deseo que se aclaren con prontitud, sobre todo a raíz, como bien se sabe, que Fomento enviase una circular a los Ayuntamientos de la zona afectada, en la que se les consulta «a efectos medioambientales» su opinión sobre el trazado que se extiende entre Villaprovedo y Reinosa. Pensamos que hay que despejar cualquier circunstancia que entendemos no justificada y por tanto, la entrevista que se celebrará será, sin duda, positiva a todos los efectos.
Finalmente hemos puesto sobre la mesa la reforma estatutaria. No se trata de reformar por reformar, sino reformar, por necesidad. Lo ha descrito perfectamente nuestro portavoz, Rafael de la Sierra, al afirmar «Cantabria está ya claramente perjudicada en algunos ámbitos por no disponer de un texto adaptado a la nueva realidad», lo que sin duda es inadmisible. En ese avance del estatuto, no queremos imponer criterios, sino consensuar objetivos que tienen que ser comunes, para que la reforma responda al espíritu de la de 1998, que significó un gran salto adelante: el acuerdo de todas las fuerzas parlamentarias. Esperemos que todos sumemos fuerzas para fortalecer el Estatuto y asumir nuevas posibilidades de autogobierno, con el fin de mejorar el servicio y el interés público.
La visión para el nuevo curso que se abre, se amplía especialmente a los presupuestos de 2010, sobre los que se espera una reducción en los ingresos. Ante esta situación, estimamos la necesidad de optimizar al máximo la inversión y que los presupuestos que apruebe el Parlamento, después del Gobierno, mantengan las políticas de interés social, pero también, de inversión pública, por que difícilmente se puede separar ambas cuestiones. A estos y otros objetivos, debemos aportar nuestro esfuerzo, con el fin de ser eficaces, mantener la gobernabilidad de Cantabria y defender conjuntamente, sus intereses.
Escrito por Rafael Pérez Tezanos, diputado del Grupo Regionalista.
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