A cada uno lo suyo.
Que la gestión de Zapatero al frente del Gobierno fue un fiasco no lo niegan ni siquiera buena parte de la familia socialista.
Pero si bien es verdad que Rodríguez Zapatero no gobernó bien lo que no es de recibo es que un año después de ganar las elecciones Mariano Rajoy nos quiera convencer que las cosas van mal por culpa de la herencia recibida. Eso no se lo cree ni él.
Más allá de la crisis, la cuestión es si se está abordando con las medidas adecuadas y lo cierto es que las recetas de Mariano Rajoy lo único que están provocando es que se agudice más la crisis. El presidente y sus ministros nos piden a los ciudadanos que hagamos profesión de fe en las medidas que están poniendo en marcha y que según ellos darán resultado en el futuro. Pero el futuro va llegando y España continúa empeorando.
Hasta ahora, con la excusa de la crisis el Gobierno, lo único que hace es desmantelar lentamente el Estado del bienestar. Nunca un Gobierno había conseguido tener a tantos colectivos en su contra por más que Rajoy haya dejado dicho en Toledo que está convencido de que continúa contando con una amplia mayoría de ciudadanos.
Yo creo que los ciudadanos estamos casi desesperados porque tenemos un Gobierno que está arrasando con los pilares del Estado del bienestar y por otra parte el principal partido de la oposición, el PSOE, está ausente de la realidad mientras se entretiene mirándose el ombligo.
Pero insisto, no es la herencia de Zapatero la que está provocando que las cosas vayan a peor, sino que son las políticas de Rajoy orquestadas desde Bruselas las que nos están llevando al borde del precipicio.
No digo que el presidente no intente hacer las cosas bien ni que no ponga todo su empeño en resolver la crisis, lo que digo es que ha elegido el camino equivocado. Rajoy camina por la senda señalada por Angela Merkel no solo porque esta señora sea la que manda en Europa sino por afinidad ideológica. Ambos son conservadores y tienen una idea de la política bastante similar más allá de las diferencias que pueda haber entre las características de España y Alemania. De manera que las medidas que se están aplicando en Europa tienen una sólida base ideológica, es la imposición de un modelo de sociedad que no es que había imperado hasta ahora, porque la realidad es que en Europa hasta los partidos conservadores respetaban las líneas rojas que delimitaban el Estado del Bienestar.
Pero la nueva derecha lo tiene claro y su modelo pasa por el "salvase quien pueda", es decir el modelo norteamericano. Y en eso estamos. Eso sí empieza a resultar cansino que el Gobierno quiera echar la culpa de todo a Zapatero. A cada uno lo que es de cada uno, Zapatero lo hizo francamente mal pero Mariano Rajoy está a punto de superarle. Me parece a mí que los líderes del PP deberían de cambiar de cantinela, lo de la herencia recibida ya no cuela.
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