Carlos Magdalena Menchaca

En esta tierra de Cantabria desde siempre se nos ha calificado de cortafuegos entre Asturias y el País Vasco para justificar la situación privilegiada que teníamos en la España centralista.

Estoy seguro que todos sus enterradores en vida estuvieron escuchándole y tomando nota. Por ese motivo les lanzó el guante y les dijo que no tenía un tumor ni ningún cáncer, que estaba muy vivo y más lúcido que nadie. Ningún banquero de postín salió.

No hay que confundirse, hay que ir a China y hacer allí un boicot activo contra ese régimen, que no respeta los derechos humanos, que carece de democracia, y que ataca a minorías, étnicas y culturales, como los tibetanos.

Algunos, sin sorna, decimos, que por fin se ha instaurado el bipartidismo en nuestro país formado por los republicanos conservadores y por los demócratas progresistas. Estamos totalmente convencidos que esta legislatura va a ser la de los cambios con acuerdos y consensos.

Diego amenaza con presentarse y esa no es buena noticia para el PP de Cantabria. El partido necesita insuflar nueva savia y debería coger la antorcha Iñigo y los chicos del Ayuntamiento con nuevas incorporaciones que por la calle suenan……..

Puede molestar a algunos pero llegados a este punto, que pena que el PSOE no disfrute de una mayoría absoluta, no tendría que pagar el peaje a los nacionalistas de CIU añadido a la crisis económica que tenemos aquí.

El día de urnas hay que ir a votar pero con el convencimiento de que inmediatamente después tenemos que ponernos de acuerdo, ganen las siglas que ganen. Los que tienen que ganar somos los ciudadanos y nosotros no tenemos siglas.

Si el PP quiere ganar, necesita el centro. Y ¿qué es el centro? La filosofía centrista no pertenece ni a la derecha ni a la izquierda, ni existe ‘un poco a la derecha y un poco a la izquierda’; es, simplemente, una forma de pensamiento que engloba a una gran mayoría civilizada.

No ha pasado tanto tiempo y ya pertenece al recuerdo la entrevista que mantuvieron ZP y el Lendakari Ibarreche de Euskalerria, que suele llegar a la Moncloa cual presidente de un gobierno extracomunitario.

Los sondeos dan ganador al PSOE con una ligera diferencia, luego nos tememos que ésta próxima legislatura va a ser una continuidad de la anterior. Pena. Va ocurrir como en Cataluña una nueva Entesa entre el PSOE y los partidos nacionalistas. Y ¿el pacto a la alemana PP y PSOE?. Nada.

La pregunta que nos hacemos surge como consecuencia -lo adivinarán nuestros lectores- del debate que se produjo recientemente entre los dos líderes del PP y PSOE. Ambos, son genuinos representantes -dicen ellos- de dos modelos de sociedad.

La diferencia entre ambos casos es que el relevo se producirá siempre en la persona en que se estanque en los votos (Diego) y más difícil aun perdiendo en Gorostiaga porque se dirá que no eran las regionales, que hay que dar estabilidad a Cantabria que si tal que si cual. ¡¡Que no dimito¡¡

Nuestro nuevo colaborador, Espino, dice, propone, que los aspirantes electorales lo que pretenden es vivir del cuento, perdón, de la política, y para impedir eso sugiere, en su artículo, que avalen con sus puestos y sus retribuciones el cumplimiento de las promesas de que van a hacer `tal o cual` obra.

Nuestra independencia centrista, y regionalista, no se vende por un puñado de lentejas, amigos lectores. En nuestro caso, se nos dice que “a esos nada”, ni publicidad, a pesar de lo que dijo nuestro presidente en la inauguración de una televisión: “a más medios de comunicación, más libertad de expresión”.

La ciudadanía española podría no asumir, no una coalición de gobierno, más que legítima, sino un gobierno de coalición con partidos nacionalistas que no creen en España – nación. Sería un fraude democrático. Naturalmente que se podría optar por un gobierno a la alemana.

A los actuales contendientes electorales les diríamos: hay que ir menos los unos contra los otros y más recoger de ambos. Esta receta sirve para los dos grandes partidos de este país así como para sus abanderados y escuderos. Vi las dos entrevistas del servil Gabilondo. Patético.

Solo un pero, en Europa nuestro Presidente Zapatero no goza de demasiada credibilidad y así se lo han dicho en la cara Sarkocy y la canciller Merkell. ¿Qué hacer? Desde el Ejecutivo de ZP se deberían enterar que este partido lo jugamos todos y se ha de contar con todos, por lo que después del 9M, el cambiar de entrenador no va a producir ningún beneficio, el daño está hecho.

Lo de la Iglesia no fue una accidentalidad, pero la actuación de ZP sí fue una superficialidad, atendiendo a su plano político personal. Yo le llamaría ‘el presidente de los charcos’. Es el jefe del ejecutivo que más se ha metido en charcos en nuestra joven democracia y sin pedírselo nadie. Es como los niños, ven agua y ¡a rebozarse!

Ahora aparece otro auto convidado a este circo, la Iglesia. Entra en escena y ZP con sabiduría sibilina, de jugador a la desesperada, utiliza a ese jugador para intentar crecer en un segmento fundamental, el centrismo, poniéndose en plan victimista frente a la cavernícola Iglesia. Bien cogido el envite.

La salida del TS ha sido jurídicamente irreprochable, dar traslado a la quinta columna de ETA, sus partidos legales ANV y PCTV y después decidirá.

Desde hace días, ya está en el mercado (en los mentideros madrileños) el posible nuevo regalo que hace España, a través de Zapatero, al mercado eléctrico de Francia, mediante su caballero blanco Lancelot - que en el siglo XXI se llama EDF-. Vendemos a nuestra doncella Iberdrola y el traidor es ACS, el tiburón Florentino Pérez.

¿A quién votamos? A los unos o a los otros. Nosotros los vemos desde nuestra particular atalaya y lo único que oteamos es que ambos están preocupados de ponerse a caldo, unos a otros y los otros a los unos. Vean la propaganda y nos darán la razón. Solo el insulto o la descalificación y no hemos empezado.

La crisis está llegando y a Zapatero le están explotando en las manos los mercados financieros de los que no es culpable. Esta situación económica que estamos atravesando me recuerda a la fábula de la cigarra y la hormiga de Esopo, sólo que aquí todos hemos sido mas cigarras que hormigas.

Si se crea ese Órgano lo debe ser con todos los pronunciamientos y sacramentos a su favor, pensando en el beneficio que va a dar a Cantabria, pero no pensando ,como al parecer ocurre en el presente caso, que primero se nomina a la persona física que se va a poner al frente y después se crea.

Espe, la derecha no europea ha dado un repaso de autoritarismo a la vieja usanza de "aquí mando yo" al impedir centrar el partido del PP. Espe gana y, con ella, gana la canasta y el golf de escuela; pierde el mus y el golf de ingenio. Estamos en la política de la Yenka.

Pizarro con estos antecedentes y fajado en mil batallas tendrá mucho que aportar en estas elecciones porque dispone de muchas claves económicas que no están al alcance de los ciudadanos de la calle. Es un verdadero peso pesado que ponen en la parrilla de salida electoral con gasolina 98º.

El BS, el último banquero, ficha al ex del FMI, al ex ministro todo poderoso de la economía de Aznar, al actual director de la entidad financiera Lazard, Rodrigo Rato. Pudiera parecer que para las próximas elecciones, al ejecutivo de ZP, le pintan bastos, pero no estamos de acuerdo, porque siempre estarán a punto de echarle una manita la pareja feliz formada por Acebes y Zaplana.

Decálogo de razones dando respuesta al por qué nuestras tropas enviadas al Líbano (no sabemos todavía para qué) deben regresar a España.

Estas reflexiones vienen a cuento a raíz de la elección por parte del aparatic del “joven” Jaime Blanco y de la que se espera por parte del PP del diputado Martínez. Y el militante que no esté de acuerdo se le enseña la puerta. A eso se llama democracia interna

Esta fecha puede ser histórica para esta vieja nación tan llena de brillante presente como de claroscuro pasado, de arte, ciencia, creatividad, de heroicidad, como de traiciones, convulsiones y luchas fratricidas. Hemos sido capaces de desarrollar lo mejor que llevamos dentro, de construir y de destruir, de lo muy bueno y de lo que conviene no recordar.

El otro dia salía en prensa un conocido político de los sometidos al partido y a su “modus vivendi”, ¿? que ha sido Presidente de Cantabria, y otro de signo contrario de siglas, senador de toda la vida, pero con el mismo denominador común, no pegar palo al agua

No he perdido el norte sino que tengo los pies muy asentados en mi tierra en donde he nacido, resido y trabajo, Cantabria.

"Lo que sí que se dejó en Libia, para pesar del Rey y Zapatero, fueron los caballos. No se debe olvidar que el líder libio hizo migas con Aznar, tantas que éste último se llevó de regalo una bonita figura ecuestre".

"Imaginamos que este nombramiento, que se ha producido por unanimidad y avalado por dos grandes lideres europeos, Sarkocy y Merkell, sea saludado por todos los partidos políticos e instituciones de este país con igual unanimidad".

CARLOS MAGDALENA: "En la izquierda está ese leones tan contradictorio pero al mismo tiempo honrado consigo mismo con el que se puede estar de acuerdo o no. Está imbuido de grandes dosis de ingenuidad o de peligrosidad. A nadie deja indiferente".

CARLOS MAGDALENA MENCHACA: "No procede los cantos de sirenas de la mesa de partidos que enseguida proponen los partidos nacionalista cuyo fin es desmembrar el país. Procede un acuerdo de Estado entre los dos partidos mayoritarios de este país".

CARLOS MAGDALENA.- No se entiende el acudir a una competencia brutal que va a producir a la postre un descenso de la calidad de prensa, la huida como está ocurriendo a los diarios digitales y la pérdida de esa publicidad institucional tan deseada.

CARLOS MAGDALENA: "Revilla tiene la maquinaria perfectamente engrasada, porque las máquinas son él; sólo queda su decisión. Los egoístas de la poltrona y el chiringuito, de todos los signos, perfectos aduladores, le temen y dicen ¡No te presentes!"

CARLOS MAGDALENA MENCHACA.- Lo que España demanda es un gobierno centrista de progreso y lo que se nos ofrecerá a los españolas es un sentir de izquierdas de unilatelarismos personales con apoyo de nacionalismos radicales.