Sostenella y no enmendalla…

¡Aún más!. Es más peligrosa la actitud de Pedro Sánchez y su PSOE que las andanadas de Puigdemón y sus huestes. A éstos, ya se les ve venir de lejos; aquél, está engañando a muchos.

Su línea de actuación básica está dirigida a erosionar políticamente al actual Gobierno, que considera le hurtó su futuro. Además su actitud es ciega, iracunda, vengativa y está dispuesto a llegar hasta donde haga falta, aunque muera matando, como los kamikazes.

Tengo serias dudas que le prometiese a Rajoy que le apoyaría en nada en su defensa de la unidad de España; al contrario, quiso dejar muy claro que no apoyaría ninguna medida y menos la utilización del Art. 155 de la Constitución.

Nadie ignora en estos momentos que los actuales dirigentes de la Generalitat catalana están en un auténtico “golpe de estado” lento contra los intereses de España, en un acto de clara sedición.

¡Y son los Tribunales quienes deben actuar!. Y lo están haciendo con prudencia, quizás excesiva prudencia. Pero hace pocos días se han atrevido a entrar en el Parlament y en la propia sede de la Generalitat (aunque con guante blanco y sin hacer excesivas alharacas: “era una petición de información, no un registro”) y por eso el consejero de Presidencia Jordi Turull se ha atrevido a decir que no colaboran con la Justicia y ocultó lo que pudo (Ya debiera estar declarando y entre rejas por obstrucción a la Justicia).

Y mientras esto sucedía en Barcelona, en Lérida, Rajoy inauguraba un nuevo Parador Nacional, junto al alcalde de la ciudad, Ángel Ros, quien se ha posicionado en contra del independentismo y no va a facilitar la consulta electoral; lógicamente, este coherente alcalde, ya está en el punto de mira de sus jefes socialistas y en cuanto puedan, le laminarán, como sólo ellos saben hacerlo. En este acto, Rajoy ha vuelto a tender la mano, pero ya sabemos que dos no se ponen de acuerdo si uno no quiere y siguen ofuscados por “referéndum o referéndum”. ¡Tranquilidad!, nos ha recetado a todos.

Pedro Sánchez no estaba quieto ese día; se había trasladado a Vitoria para entrevistarse con Íñigo Urkullu y convencerle de la modificación de la Constitución, animarle a unirse a su “Estado plurinacional” (ni sólido, ni líquido, ni gaseoso) y a buscar puentes de entendimiento y ver cómo puede romper los que ha tejido el lendakari con el PP. Y respecto a esa petición de información ha dicho que “la crisis no se arregla con amenazas” (Palma, 22 de julio)

El Gobierno tiene un margen de maniobra reducido y aun así ha comenzado a controlar el grifo económico semanalmente, para que ni una gota de euro pudiera ir a gasto electoral. Y aún debiera controlar otros chorros que se van en gastos de propaganda sectaria, en embajaditas lujosas por todo el mundo y en otros temas que no son de recibo…. Por cierto, esta acción del Gobierno de Rajoy ha puesto de los nervios a Puigdemón y los suyos, que han salido por peteneras. Y es que, aunque parezca mítico, la pela es la pela. Y por ahí hay que entrar a saco.

También les pone nerviosos, que el independentismo está perdiendo fuelle al enterarse muchos ciudadanos de las mentiras que les han contado; muchos funcionarios están en contra de incumplir sus obligaciones, altos cargos se están apeando de la locura independentista y hasta muchos Mossos ya están pidiendo vacaciones para primeros de octubre.

¿Y qué hace el PSOE?. Pues, lógicamente, aunque sólo sea para contrariar a Rajoy, está en contra, con lo que pudiéramos deducir que está con Puigdemont y su gente. ¡Así como suena!.

Estos actuales sociolistos e incultos, creo que debieran repasar la Historia y conocer hechos como cuando el general catalán Domingo Batet Mestres recibió la orden del gobierno de la República (a la que Sánchez tanto añora) para bombardear el palacio de la Generalitat cuando el antecesor de Puigdemont, Lluís Companys, declaró la independencia de Cataluña en 1934.

Debiera de conocer Pedro Sánchez como los dubitativos independentistas han sido barridos por los puigdemón talibanes y hasta los secretarios e interventores han dejado claro que en la embestida por independencia de Cataluña se atendrán a la legalidad; y los sindicatos de los Mossos d’Escuadra también; y el letrado mayor del Parlament, Antonio Bayona, ha cuestionado la legitimidad del referéndum unilateral… Pero este Pedro Sánchez, en una clara actitud de sostenella y no enmendalla, prefiere alinearse con los Puigdemón, Podemitas y demás intentos de romper la unidad de España. ¡Inaudito!.

Y quieren que el presidente Rajoy desvele y explique ya sus planes, cuáles van a ser sus respuestas y sus posibles acciones, con la clara intención de neutralizárselos en beneficio de Puigdemont. ¡Habrase visto tamaña deslealtad!.

Menos mal que tenemos para estos difíciles momentos a un Presidente tranquilo, pausado, conocedor del paño y que va a dar las respuestas adecuadas y proporcionadas. Y aun así, supongo que contarán con que podrán llenar la calle, junto a las huestes de los separatistas, podemitas y, ¡Cómo no!, los socialistas de Pedro Sánchez.

Y tan vacío está de contenido de Estado, que Pedro Sánchez sólo hace lanzar frases para titulares de periódicos; ahí va una: “La crisis territorial no se resuelve con amenazas por tierra, mar y aire” (O es un lapsus, y estaba pensando en el general Batet).