Noticias de Cantabria
16-01-2012 11:45

Soñar siempre es posible

Soñar siempre es posible cuando existan políticos soñadores-honestos y honrados-, que lleven sus sueños llenos de ilusión a feliz puerto: los españoles/as que votaron PP, es decir, al señor Rajoy (actual presidente del Ejecutivo español), necesitan y esperan que él se convierta en un ‘soñador para un pueblo’: para el pueblo español.

El bueno de Rajoy-porque lo es-, ha de asumir que tiene que compadecer ante los medios para dar las explicaciones que crea necesarias ante cualquier rueda de periodistas, que haya convocado con anterioridad. Que se acuerde que existen los ricos, la clase media y la clase baja: menos los primeros, los demás están al cabo de la calle…

Ambos partidos mayoritarios en su día -PSOE y PP (hoy el último lo es con mayoría absoluta)- tienen y tuvieron la ocasión, en sus manos, de cambiar nuestro sistema electoral proporcional (Francia lo eliminó en el año 1958) por el sistema mayoritario: éste permite que se mantenga una relación directa entre diputados y sus electores, contando los primeros con cierta independencia con sus respectivos partidos políticos. Espero que el señor Rajoy tome la sartén por el mango y lo lleve a cabo: aquí y ahora. Acuérdese, señor Rajoy, de eliminar las ‘subvenciones a CEOES y Sindicatos’, y así seremos todos menos pobres…
Por tanto, si hemos de salir reforzados de la coyuntura económica en la que nos encontramos, debemos partir de una premisa `sine qua non` (condición sin la cual no): la reforma de la Ley Electoral española, para pasar de un sistema proporcional a un sistema mayoritario: así de sencillo.

Se pregunta uno de dónde van a salir tantos dineros (euros) suficientes para estos nuevos endeudamientos de nuestras comunidades autonómicas y ayuntamientos... Como de costumbre ha sido y será siempre: de los bolsillos de los españoles, que ya los tenemos casi vacíos. Es la `fruta del tiempo político` en que vivimos.

El mal humor con el que nos divertimos, pues no vamos a llorar, quienes vivimos es esta `Piel de Toro` llamada España (nos habían dicho con anterioridad que el mundo estaba al alcance de los españoles), se debe, principalmente, a que nos sentimos engañados, mentidos, burlados por nuestros anteriores gobernantes del PSOE, aunque también nos engañaron los que nos gobiernan en la actualidad del PP -sus integrantes-, se equivocaron y mintieron en la pasada legislatura en el caso del petrolero Prestige.

Comenzó su hundimiento el 13 de noviembre de 2002, y, al poco, se hicieron eco las manifestaciones del señor Rajoy (21-11-2002): "(...) No va a verter un sólo litro más". "No es en ningún caso una marea negra, se trata sólo de manchas localizadas", formuló el 23 de noviembre de 2003. Siguen equivocándose y mintiendo durante los graves sucesos –atentados– de la Estación de Atocha en Madrid (11-M), cuando el ex presidente, señor Aznar –con esa prepotencia política que le distinguía– se apresura al manifestar que "la autoría de los anteriores acontecimientos correspondían al grupo terrorista vasco". Tantas y tantas equivocaciones induce a pensar que, presuntamente, mintieron en alguna de ellas, y todos sabemos que las mentiras marcan `tocata y fuga de muerte política` para los partidos políticos que las emplean. Todos los españoles esperamos que, Mariano Rajoy, no meta en el baúl de los recuerdos el 11-M y el caso ‘Faisán.

Nuestro sistema proporcional de votos empleado actualmente ha permitido y sigue permitiendo que se creen partidos políticos nacionalistas en las distintas comunidades autónomas, que forman nuestra geografía española. Éstos existen en Galicia, Navarra, Aragón, Canarias, Cataluña, Valencia, Comunidad Vasca…, quienes pueden convertirse en cualquier momento en `partidos bisagra`, y que, a la corta o a la larga, sacarán sus réditos económicos y políticos del Ejecutivo de turno: así es muy difícil gobernar, así no se puede gobernar, así estuvimos tan mal gobernados: aunque ahora el PP-el presidente del Ejecutivo, el señor Rajoy-es quien ‘corta el bacalao’

Estos pequeños partidos políticos (CiU, BILDU, PNV, BNG...) que a su vez hacen causa común en la implantación de sus propias lenguas –que lo son-, gallego, catalán y vascuence–, están fomentando una especie de `extranjerías` o `extranjerismos` en sus propias autonomías, que hacen que sus habitantes miren a España como una nación enemiga: nada más lejos. Han de entender, y de verdad, que, con sus idiomas –y una vez que atraviesen los Pirineos–, nadie conocerá los últimos, y sí el inglés y el español: ésta es una realidad como un templo.

Ahora, sin embargo, saldrán a la palestra viejos nacionalismos extremistas que no podemos reconocerlos como plenamente racionales, en tanto en cuanto proponen el reconocimiento sólo de los miembros de su grupo étnico. "A orillas de un barranco, / dice un negro, con afán: / Dios mío, quién fuera blanco, / aunque fuera catalán" (Coplas y cantares del pueblo ecuatoriano, donde se conserva el recuerdo de viejos conquistadores, y, al mismo tiempo, una fuerte rivalidad regional).

Esto último está ocurriendo en España, lamentablemente, y el PP lo debería arreglar, pues para eso cobran grandes sueldos del Estado español, van a tener `grandes retiros`, amén de los gastos de representación, y, por tanto, es su obligación `organizar` un poquito España, digo yo… que no es mucho pedir.

Entiende uno -en su poco saber político y menos aún económico- que, el máximo tiempo de mandato de un presidente -jefe del Ejecutivo en funciones- , debería estar limitado a dos legislaturas. Es decir, a ocho años: ¡qué ya está bastante bien…! Si una persona, hombre o mujer, permanece en el poder por más tiempo, suelen crearse alrededor de su persona toda una serie de intereses creados, posibles corrupciones políticas y económicas, amiguismos interesados en ganar dineros fáciles, compra de votos, etc., etc. Somos humanos, y como tales nos comportamos. Siempre lo he dicho y lo seguiré diciendo siempre: "Las ideas políticas de un hombre son sus hechos".

Cuando fue portavoz del Gobierno del PP (13 de noviembre del 2002), Mariano Rajoy, hubo de enfrentarse a dos acontecimientos importantísimos de su vida política: a) el desastre ecológico como consecuencia del vertido del petrolero ‘Prestige’, y b) cuando el apoyo del ex presidente Aznar al ex presidente George W.  Bush, a raíz de la invasión de Iraq en 2003.

Y como Mariano Rajoy es un hombre activo, que mejor que recordar lo que dejó escrito  John Bunyan: “El sueño es un dulce placer para el hombre activo”. Continúe usted siendo un hombre activo, señor Rajoy, pues así experimentara supremo placer al dormir mucho. Sepa también que en las democracias actuales es costumbre que, para dar sensación de libertad mal entendida, los gobiernos que rigen éstas hagan oídos sordos a las demandas de los ciudadanos- votantes sempiternos-, que cada día del año están pidiendo a voces más presencia de las fuerzas policiales, cuya principal función consiste, y siempre ha consistido, en prevenir los delitos contra las personas y la puesta a disposición judicial de los presuntos delincuentes que los cometen…antes de que los lleven a la práctica.


 

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