RESTAURACIÓN DE LA NATURALEZA Por Juan Goti Ordeñana Catedrático jubilado de la Universidad de Valladolid
Considerando el mal trato que se ha dado a la naturaleza, ya es hora de que se haya pensado en una Ley de Restauración de la Naturaleza. No hay duda que es una ley necesaria, visto a donde hemos llegado con los abusos que se han hecho. ¿Pero ésta es una ley que, en verdad, va a Restaurar la Naturaleza? No podríamos más que aplaudirla si fuera, en realidad, para una regeneración de la Naturaleza.
Considerando el mal trato que se ha dado a la naturaleza, ya es hora de que se haya pensado en una Ley de Restauración de la Naturaleza. No hay duda que es una ley necesaria, visto a donde hemos llegado con los abusos que se han hecho. ¿Pero ésta es una ley que, en verdad, va a Restaurar la Naturaleza? No podríamos más que aplaudirla si fuera, en realidad, para una regeneración de la Naturaleza.
De primera impresión, uno llega admirarse con el rimbombante título de esta ley, y con la pretensión de marcar las líneas que se deberían pensar seguir en la explotación de la naturaleza, pero en la actual presentación de la ley no se ve con claridad el camino a seguir. Pues, en primer lugar, hay que tener en cuenta, como algo elemental, que la naturaleza no perdona, dispone de tiempo para ir superando todas acciones del hombre y volver a su ser con el ritmo de su marcha. Así han desaparecido ciudades que fueron grandes en otros tiempos.
Previamente habría que considerar y valorar el aprovechamiento que de la naturaleza se ha hecho por el hombre durante milenios, y que ha servido para ir mejorando la vida de la humanidad. Sólo ahora que ha caído en manos de grandes explotadores es cuando han surgido los problemas. La primera gestión nociva contra la naturaleza, en estos tiempos, es la acción de ir echando a los labradores del campo, con las travas y dificultades que se ponen a su trabajo. Con su abandono se advierte la vuelta a la selva. Pues son los que, en verdad, conocen y aman sus tierras y los que la han ido restaurando y valorando, con su trabajo y cuidado, al tiempo que han dado de comer a las poblaciones.
Dotado de un título ostentoso, es el proyecto de unos idealistas que se califican con el nombre de Pacto Verde Europeo, pero no valoran al hombre. Muestran grandes preocupaciones: como el cambio climático, con lo que llevan muchos años asustando a la población, sin que se haya supuesto nada, y quedando, todavía, en la esfera de los proyectos, pues la variación del tiempo en los últimos siglos es muy poco, y sin que, aún, hayan descubierto cómo resolverlo. Es un hecho incuestionable, como muestra la historia, que siempre ha habido variación del clima. A través de los siglos hay un vaivén de temperatura fácil observar, pero imposible de dominar, la naturaleza actúa según su ritmo de marcha.
En la degradación del medio ambiente, el gran problema de nuestros tiempos, se ha achacado a las emisiones de gases, que, según ellos, producen un efecto invernadero, pero en realidad con todos los estudios y afirmaciones que se han hecho no se ha conseguido concretar en qué consiste, y se pone como límite el año 2050, es decir, se manda «ad kalendas graecas». Esta Legislación se propone, como objetivo, el reparar el 80% del hábitat europeo que está en mal estado, dirigiendo y comprendiendo en esta acción a los bosques, a las tierras agrícolas y a los ecosistemas marinos, y también el agua dulce y los centros urbanos.
Además, en esta legislación se pretende establecer unos objetivos jurídicos que vinculen a algunas áreas concretas, y afectan al cultivo de las tierras, a la polinización, al curso libre de los ríos y a los ecosistemas marinos. Con la pretensión de restablecer y mejorar hábitats biodiversos en gran medida, con el fin de fomentar las poblaciones de especies mejorando sus entornos. Parece que su fin es establecer estas medidas en el 20% de la superficie terrestre y marítima de la Comunidad europea. Al mismo tiempo sueñan con estas medidas asegurar a largo plazo la alimentación, difícil de conseguir cuando obstaculizan las labores tradicionales del campo, y asustan con el cambio climático, cuando, sin mayor problema, se ha dado en toda la historia de la humanidad, y son accidentes temporales con años de escasez y abundancia, como ya se advertía en el Egipto que reseña la Biblia.
Y ya como complemento se hace referencia al aumento de biodiversidad forestal, y algo que tienden a fomentar todos los centros urbanos con espacios verdes, el fomento de la agricultura, pero sólo la sostenible. Hubiera sido el momento para analizar lo que supone la agricultura en los pueblos europeos y fomentar con unas medidas adecuadas de promoción de los labradores, y en lugar de dejar que las aguas de los ríos sigan a su marcha, sería conveniente hacer un proyecto de utilización de las aguas con suficiente comunicación de unas tierras con otras, al tiempo que hay que cuidar de la riqueza marina. Todo ello, sin duda, en línea del marco global de la biodiversidad de la COP 15.
Lo más interesante es que se solicita de los Estados miembros el que elaboren planes nacionales de restauración de la naturaleza. Veremos las líneas que van a seguir. En los cuales se deberán detallar la iniciativas y proyectos que se llevarán a cabo, respondiendo a las líneas que se ha señalado en esta ley de Restauración de la Naturaleza, aunque lógicamente se podrán señalar áreas protegidas según cada una de las naciones, con la flexibilidad de su implantación.
Al final muestran, con esta ley, la desolación y la ruina de este mundo que vivimos y quieren solucionarla con una doctrina neopaganista, de la que ya advertía Chesterton: toda adoración de la Naturaleza acaba haciendo al hombre antinatural.
En esta ley se han acordado de todo, menos del ser humano. Si este proyecto se refiere a la naturaleza, cómo no advertir que dentro de ella hay un ser inteligente, el cual es quien ha dirigido toda la evolución del mundo hasta estos tiempos y lo va tener que hacer en el futuro. Y considerar que a este ser humano la naturaleza le ha hecho hombre y mujer, y que en el desarrollo de esta ley de Restauración de la Naturaleza no se advierta esto, para que las leyes de las sociedades, tan avanzadas, respeten la Naturaleza también en el ser humano, y no se produzca el desajuste TRANS con enfermos por toda la vida. La consideración de la Naturaleza exige que se respete la naturaleza humana como es, si esto se trastrueca. ¿Qué se vas a exigir del resto de la Naturaleza?
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Comentarios(1):
Casi mejor que no intervengan asociaciones que solo van a chupar dinero he visto la plantación de miles de árboles para cobrar y no ha salido ni uno