Gobierno de malos retales,
España no puede seguir haciendo el ridículo a gran escala. Con Sánchez se ha venido abajo todo el trabajo duro y el sacrificio que se había hecho estos años pasados
A estas alturas del Gobierno del plagiador se puede comprobar que ha elegido a lo más ‘selecto’ de la sociedad. Pensábamos que se libraban tanto Borrell como ‘el astronauta’, pero no, no se libra nadie. Demasiados problemas sin resolver en poco tiempo. Demasiada corrupción amontonada; exceso de literatura barata sobre la regeneración; degeneración inmediata de su Gobierno de retales; abundantes visitas a las cloacas del Estado por parte de alguna componente en vías de dimisión; oscuros pactos inasumibles por la ciudadanía aunque sí por quien decía que nunca pactaría con populismos, proetarras, independentistas,…
Pedro Sánchez, presidente “cum fraude”, cargado de desidia, cobarde y escondido tras su propia ineficacia no puede seguir al frente del Gobierno de España. Primero fue el hazmerreír en España con su plagio y sus mentiras, después lo fue en Europa por sus torpes sumisiones hacia el independentismo catalán y ahora sigue siendo la mofa internacional tras visitar a Trump; un presidente –Donald Trump– a quien Sánchez “cum fraude” poco menos que quería hacer desaparecer del mapa político mundial y, pasado el tiempo, se presentó ante él y la primera dama de EE.UU con su compañera ataviada con un vestido más propio para hacer el paseíllo en una tarde soleada que para una recepción. Ya no solo le fallan “sus políticas”, si es que las tiene (se ha demostrado que no existen), sino que fallan sus asesores: da lo mismo que sean personales, profesionales o políticos.
España no puede seguir haciendo el ridículo a gran escala. Con Sánchez se ha venido abajo todo el trabajo duro y el sacrificio que se había hecho estos años pasados, a pesar de los palos en las ruedas del propio PSOE y los inútiles populismos. Y, si bien creíamos que había elegido un Gobierno aceptable, el paso del tiempo ha demostrado que era un conjunto de retales, plagiadores, tramposos con sus titulaciones, otros metidos en el albañal y en las cloacas del Estado,… E incluso ‘el astronauta’ seguía en la luna: quien creíamos que era el más honrado también se había mojado el trasero en la porquería líquida del albañal de los impuestos y de la Hacienda Pública. Astronauta, sí, pero defraudador también. No es éste el momento para contar nada sobre la imagen en la empresa del parque empresarial de Boecillo. Hoy no toca. En cuatro días se les ha visto el plumero y a alguno le faltó tiempo para constituir empresa a lo Rosa María Mateo. “¡Manda huevos!”, como dijo el otro.
¿Y la oposición que forman el PP y Cs? El primero demuestra estar muy desorientado después de que todo el arco parlamentario le haya acusado de corrupto y ladrón. Lo cierto es que están a la sombra quienes robaron, trincaron y dieron a trincar a otros. La grave cuestión viene ahora, cuando alguien da a conocer que la trama Gürtel se “escribió” en las cloacas del Estado, por corruptos expulsados de la Judicatura y de la Policía. Algo huele a podrido albañal en el Gobierno y en los aledaños de éste. Pero tranquilos, Pedro “cum fraude” volverá a volar lejos cuando vea el agobio que le genera tanto escándalo en sus filas. Tiene la suerte de que
ya hay otros dos “cabezas de turco” para salvar la suya: Duque y la ministra “soplona”, Delgado.
Respecto a la formación de Alberto Rivera, sigue descentrada, desnortada y, a veces, abobada; tan abobada como el actual “bobierno” de titulados sin titulación y afán de titulitis sin formación. Si en Cataluña no han sabido actuar, a pesar de ganar las elecciones autonómicas, ya me dirán ustedes qué podemos esperar a nivel nacional. No sé si Ciudadanos es flor de un día, de un cuarto de hora o invento de unos retaleros. Ante la inminencia de elecciones, no tardaremos en comprobarlo de nuevo. “¡Joder, qué tropa!”, como diría el conde de Romanones.
Sé el primero en comentar