La desescalada
Nosotros no entendemos muy bien el término "desescalada" porque no hemos subido a ninguna parte, pero ya sabemos que los políticos, o mejor su aparatic de marketing y propaganda, buscan palabras llamativas o frases, se trata de una costumbre de esta clase política.
Lo que debería de transmitir Sánchez no es que vamos a desescalar nada sino que vamos a tener, por necesidad, que convivir con este virus, o con otro que mute, como así nos han venido diciendo virólogos de fama mundial. Y sí, estamos de acuerdo con el presidente Sánchez, que necesitamos un período de readaptación de nuestras vidas porque este virus mientras no se disponga de una vacuna, se ha interpuesto en nuestra forma de vida.
Estos dos próximos meses son importantes para la readaptación de nuestra nueva forma de vida y también tenemos que admitir claramente que no hemos vencido al virus, que sigue matando, por lo que, no podemos alegrarnos de nada ni menos aplaudir. Tenemos que reorganizarnos y aprovisionarnos de material sanitario de cara al invierno porque esta pandemia no ha sido derrotada, todavía.Y no olvidemos la gripe. Pero, por otra parte, como decimos arriba tenemos que convivir con ese virus, salir adelante y poner en marcha todo nuestro sistema productivo sin olvidar el de investigación y el científico.
El sector sanitario, de investigación y científico, es el que hay que dotar económicamente y con alegría.
Y fundamental, para salir adelante se precisa financiación y esa hay que pedirla a Europa pero para pedir tenemos que demostrar credibilidad y solvencia por lo que procede cuanto antes un -gobierno de coalición- entre el Partido Socialista y el Partido Popular, junto con Arrimadas, porque el partido de Iglesias, de Podemos, es "de andar por casa",y para los nostálgicos del ayer pero no para enseñar en Europa.
Y si no se consigue esto último, un gobierno de coalición, los ciudadanos tienen que pensar si procede, a pesar de todo, ir a unas elecciones en otoño.Los ciudadanos en un corto trayecto han pasado de todo, bueno y muy malo, por lo que son los los ciudadanos los que tienen que validar la actuación del gobierno de la pandemia.
"O vamos juntos o son las urnas las que tienen que decidir".
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Comentarios(7):
Para Podemos cuanto peor mejor para ellos
El feo verbo "desescalar" inventado por este Gobierno de España, me va a acabar gustando. Al menos, como nos comenta el Sr. Magdalena, puede ser de utilidad para describir como la pandemia la política, la economía, el confinamiento va bajando, o sea va para abajo irremediablemente. A no ser que llegue un maldito rebrote tras la época estival y alguien mantenga la escalera de este Presidente para que no se caiga. Que todo puede ser en esta España, entre aquellos que les cuesta tanto mencionar su bonito nombre, ESPAÑA.
Ya le he leído en otro artículo que manda callar y no aplaudir, que la cosa es más seria para andar con aplausos. Ahora ahonda mas y pide aprovisionarse , reorganizarse para el otoño y también de forma muy cauta pide lo que cualquier país democrático pedirían los ciudadanos que se establezca un consenso para remar todos juntos y si no es así ir a unas elecciones. enhorabuena
La negligencia con resultado de muerte es a lo que se enfrentará el Gobierno en las querellas que están en marcha o se elaborarán para presentarse en los Juzgados. Para este Gobierno social-comunista son un problema de imagen esos más de 30.000 muertos. Tras la mal llamada “desescalada” y salida a la calle de la población, el Gobierno lo va a tener muy difícil porque irán los muertos allí donde vaya un ministro, el presidente del Gobierno o cualquiera de la tropa de vicepresidentes. No se puede basar la política en la superficialidad y en el desprecio a la ciudadanía. Demasiados parásitos y miserables asentando su ideología en la desidia, el sectarismo, el tráfico de influencias, la corrupción y la mentira y la permanente actitud miserable.
Cualquier acuerdo con los actuales es absurdo.
Totalmente de acuerdo con una coalición, pero con Sánchez ni a apañar duros; es un falso, un mentiroso, un ineficaz gobernante y la empresa privada no le contrataría ni de portero, por su nula fiabilidad. Los españoles con sus votos le han puesto ahí y ahora ya estará comprobando cómo funciona y es muy probable que ni siquiera se arrepientan y vuelvan a las andadas. Una personalidad de prestigio, con el apoyo del PSOE, PP y Cs, y un gobierno de tecnócratas que sepan bien cómo se gestionan las cosas y dentro de tres años elecciones.
En lo sucesivo, tendremos que rebajar la escalada de “desescalada”. Pocas veces a lo largo de nuestra historia hemos recibido tantos neologismo como ahora; también es verdad que nunca antes tuvimos tantos medios y tantas posibilidades de comunicación como ahora. Lo de “desescalar” se ha incorporado al discurso político como se incorporaron otros “palabros” del estilo de “miembra”, “machirulo” y “jóvenas” o expresiones absurdas muy propias del postureo izquierdista: “vascos y vascas”, “trabajadores y trabajadoras”, “empresarios y empresarias”, “ciudadanos y ciudadanas”, por poner un ejemplo.