Presidente Revilla, se deberían mantener o incrementar las restricciones ante el temor fundado de una tercera ola

Estamos en un momento en el que “abrir la mano” de las restricciones puede significar echar por tierra todo el esfuerzo que se ha hecho, que mucho ha sido baldío por ignorancia política al no gestionar ni decidir los expertos y la técnica-médica. 
 
Adolfo García-Sastre (Burgos 1964), uno de los virólogos españoles más prestigiosos del mundo, que sigue trabajando en su proyecto de vacuna contra el covid en Nueva York, donde dirige el Instituto Global de Salud y Patógenos Emergentes en la Escuela de Medicina del Hospital Mount Sinai, ha sido rotundo:

“...hay que seguir aguantando y haciendo lo posible para evitar los contagios hasta que tengamos una vacuna que se ponga la mayor parte de la gente”. 

No nos podemos fiar de que los contagios han bajado porque ya existe experiencia de que los rebrotes se pueden producir en cualquier momento y expandirse los contagios. Si ha dado resultado, relativamente, lo que se ha hecho hasta ahora
en esta segunda ola en que las CCAA llevan la responsabilidad, lo que procede es mantenerlo hasta que la población sea vacunada, hacer lo contrario sería un gran error. 
¿Qué las medidas son antipopulares para hostelería, el comercio y la industria en general?, totalmente de acuerdo, pero hay que elegir entre la vida y la economía cuando estamos muy cerca de acabar con esta peste del siglo XXI. La responsabilidad que tienen los políticos es fundamental y ahora Cantabria tiene que decidir en Cantabria y no en Madrid, seamos sensatos con medidas y no con declaraciones plañidero -políticas-populistas. Al pan pan y al vino vino.