Los aspirantes a presidir cuatro salas del TS comparecerán el próximo martes en el CGPJ para defender su candidatura

El encargado de abrir la ronda de comparecencias ante la Comisión de Calificación del CGPJ será el magistrado Andrés Martínez Arrieta, que se postula para la Sala de lo Penal. Su entrevista se ha adelantado a las 9.00 horas porque forma parte de la Junta Electoral de las votaciones a la Sala de Gobierno del TS, que se celebran también este martes.

Los demás comparecerán a partir de las 11.00 horas, empezando por Ignacio Sancho, único candidato para la Sala de lo Civil. Le seguirán Ana Ferrer (11.15), la otra aspirante para la Sala de lo Penal; los dos contendientes para la Sala de lo Contencioso-Administrativo, Pablo Lucas (11.45) y Pilar Teso (12); y, por último, los dos postulantes a la Sala de lo Social, Juan Molins y Concepción Ureste, serán entrevistados a las 12.15 y 12.30, respectivamente.

Cabe recordar que será el Pleno del CGPJ el que decida a quién adjudica cada plaza. Para ello, se necesitan un mínimo de 13 votos, lo que obliga a un acuerdo transversal, ya que en el nuevo Consejo los bloques progresista y conservador están empatados, con diez vocales cada uno, un equilibrio que puede romper la presidenta, Isabel Perelló, de sensibilidad progresista.

Los esfuerzos de ambos bloques se centran en las presidencias de las salas de lo Penal y lo Contencioso-Administrativo porque son a las que corresponde investigar a los aforados --tales como el presidente del Gobierno, diputados o senadores-- y decidir sobre los recursos dirigidos contra las decisiones del Consejo de Ministros, respectivamente.

Fuentes del órgano de gobierno de los jueces consultadas por Europa Press indican que los vocales progresistas darán la batalla para situar en esas plazas a Ferrer y Teso, dos nombres recurrentes en las quinielas para presidir el CGPJ y el TS que también sonaron en la última renovación, aunque se acabó imponiendo Perelló, precisamente, por el veto del bloque conservador a esas dos magistradas.

Ferrer se ha significado con dos votos particulares recientes: uno donde aboga por amnistiar la malversación del 1-O, consumando así el distanciamiento de sus compañeros del tribunal del 'procés'; y otro, firmado junto a Susana Polo, donde se desmarcan de la sentencia que confirmó las condenas por el 'caso ERE' defendiendo que debió absolver al ex presidente andaluz José Antonio Griñán y otros cuatro condenados que eran "ajenos" a la Consejería de Empleo.

Teso, por su parte, fue ponente de una sentencia que anuló un nombramiento acordado por la entonces fiscal general del Estado, Dolores Delgado, pero se desmarcó del fallo que anuló el nombramiento de la propia Delgado para Memoria Democrática y Derechos Humanos. Además, fue ponente de la sentencia que respaldó el decreto catalán sobre enseñanza que no aludía al castellano como lengua vehicular. Y formó parte del tribunal que por unanimidad avaló exhumar al dictador Francisco Franco.

Ferrer compite con Martínez Arrieta, el número 1 del escalafón de la carrera judicial. Precisamente, por ser el magistrado más antiguo de la Sala Segunda, sucederá interinamente a su actual presidente, Manuel Marchena, cuando el 5 de diciembre concluya el mandato de este último, que podría continuar en funciones pero no lo hará.

Lucas aspira a una plaza que ocupa interinamente desde que César Tolosa desembarcó en el Tribunal Constitucional en enero de 2023. Destaca por ser el juez que desde hace 15 años se encarga de controlar al CNI y, recientemente, fue ponente de la sentencia que anuló el nombramiento de Magdalena Valerio como presidenta del Consejo de Estado. También firmó la sentencia que anuló la designación de Delgado para Memoria Democrática y Derechos Humanos. Y avaló la exhumación de Franco.

LA REGLA DE PARIDAD

Sin embargo, en esta ocasión la trayectoria profesional de los candidatos no será el único factor a valorar. La nueva ley establece que "en estos nombramientos se garantizará el principio de presencia equilibrada de mujeres y hombres, de tal manera que las personas de cada sexo no superen el 60% ni sean menos del 40%".

La interpretación de este inciso legal ha dado lugar a una nueva lucha en el seno del CGPJ. Los vocales progresistas defienden el criterio plasmado en el informe redactado por sus colegas Lucía Avilés y Carlos Hugo Preciado desde la Comisión de Igualdad, conforme al cual al menos dos de las cuatro plazas en juego deben ocuparlas mujeres.

Por contra, el sector conservador se aferra al informe encargado por Perelló al Gabinete Técnico, el cual aboga por imponer los criterios de mérito y capacidad al de género, al tiempo que subraya que la paridad debe asumirse como un objetivo a alcanzar en el conjunto de las plazas ofertadas en la carrera judicial y a lo largo del mandato del CGPJ (cinco años). Asimismo, destaca que no hay sanción alguna en caso de incumplimiento.

Con dos informes contradictorios sobre la mesa, el Pleno tendrá que resolver cómo aplicar la regla de paridad a estos cuatro nombramientos, una decisión que será determinante para acordar quién ocupa cada sillón.

En esta fase embrionaria, los progresistas han cerrado filas en torno a Ferrer y Teso, no solo por situar a mujeres en "puestos de poder", sino porque creen que supondrían un "soplo de aire fresco". Los conservadores, por contra, reivindican la veteranía de Martínez Arrieta y Lucas y, aunque no desmerecen la trayectoria profesional de sus contrincantes femeninas, sostienen que la de ellos es mejor.

Así las cosas, el acuerdo exigirá que ambos bloques transiten desde las actuales posiciones a terreno común. Es en este escenario donde las otras candidaturas --a las salas Primera y Cuarta-- podrían cobrar importancia, según las fuentes consultadas. Algunas voces apuntan incluso que podrían reabrirse las ternas para lanzar una candidatura femenina a la Sala de lo Civil y dar así mas alternativas a las negociaciones.