12-05-2013 06:53
San Martín de Bajamar
José María Díez Prieto.-Ahora les ha tocado a los Peos(Pompeyo) y a los Calde(Hnos. Calderón) que durante años han mantenido viva la llama del piragüismo santanderino y han aportado a la nómina algún que otro campeón de España y algún finalista olímpico que, obligados,han tenido que trasladar su base de operaciones a las bacas de las furgonetas y sus campos de entrenamiento a la ría del Pas.
El anuncio de licitación de las obras de derribo, acondicionamiento y parking de la zona del dique de Gamazo y la zona de Bajamar para los eventos del mundial de vela de 2014 ha dado paso a las máquinas de SIEC y a los trabajos de explanación de la superficie que servirá a los remolques y embarcaciones participantes de pañol improvisado para el aparejo y puesta a punto de los aspirantes a campeones.
El otro domingo pude comprobar los avances de las obras y como van desapareciendo retazos de la adolescencia y juventud, lugares y recuerdos que van a quedar enterrados entre los escombros de las naves que ocuparon en su día los carpinteros de ribera, calafates y ensambladores de costillas, codastes y careles que forman parte del acerbo de esta ciudad y que se va a perder irremediablemente.
Como no se trata de ponerse uno en plan melancólico y comprendiendo que las últimas instalaciones que quedaban en pie ni cumplían con el fin previsto, ni eran un modelo ejemplar para una zona de la ciudad que se merece mejor destino, aceptamos la remodelación de la parte de la bahía que queda asilvestrada con la esperanza de que se aproveche la oportunidad de incorporar para la ciudad y el ciudadano unos recursos que son fundamentales para mantener la actividad náutica en una ciudad que cada día lo tiene peor.
Y es que, en los últimos años, no soplan buenos vientos para la náutica en Santander. La contestada Ley de Costas ya se ha llevado por delante el edificio del balneario del Polo Norte, con la intensa actividad que ha generado en los últimos 20 años, dejando huérfanos a piragüistas, surfistas, escolares de la vela y motonáutica.
Hace fechas nos enteramos de que el Gobierno regional ha decidido cerrar la Escuela de vela de la Isla de la Torre. Seguramente se volverá a la situación de los años 60 del siglo pasado, donde la herrumbe, los cascotes y los cristales campaban por un islote abandonado por la Sociedad de Fomento de Caza y Pesca que en 1943 convirtió en su sede y que le costó mantener operativa. Está claro que las tasas portuarias son un lastre para actividades deportivas, siempre a la quinta pregunta,
Ahora les ha tocado a los Peos(Pompeyo) y a los Calde(Hnos. Calderón) que durante años han mantenido viva la llama del piragüismo santanderino y han aportado a la nómina algún que otro campeón de España y algún finalista olímpico que, obligados,han tenido que trasladar su base de operaciones a las bacas de las furgonetas y sus campos de entrenamiento a la ría del Pas.
Queda por saber que ocurrirá con el CEAR de Vela. Las relaciones-disputas entre la RFEV, el Ayuntamiento, el Gobierno autónomo, el CSD; los cambios en la presidencia de la española, otra vez las tasas portuarias, la resaca del mundial de vela de 2014, pueden traer desagradables nuevas. Para nosotros son oportunidades perdidas.
Los que tuvimos oportunidad de vivir la transformación producida en Barcelona con motivo de su Olimpiada del 92 nos gustaría ver en estas transformaciones una oportunidad de mejora de la ciudad en la que vivimos, pero yo no lo tengo tan claro.
Para un deportista, se trata de una pérdida de instalaciones donde realizar su actividad favorita, a pie de agua, con transportes urbanos, de calidad de vida.
Para un economista se trataría de una pérdida de recursos ya que si no se sustituye por otros equipamientos se estaría empobreciendo la ciudad. Ni que decir tiene la pérdida de patrimonio inmaterial cultural, etnográfico y social. Con el dique de Gamazo se ha hecho.
Santander, mi ciudad, no puede permitirse dar la espalda al agua de la bahía ni condenar al exilio a las actividades náuticas tradicionales que han ocupado tantas horas a tanta gente. A la explanada de los veleros del mundial 2014 hay que darla un contenido más allá de la cita y canalizar la demanda deportiva que dormita en la ciudad y que actualmente carece de horizonte claro. Si las crisis traen cambios y los cambios oportunidades, tenemos posibilidades de dejar a nuestros hijos una ciudad mejor que la que nos encontramos, que es de lo que se trata.
José María Díez Prieto
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Comentarios(4):
A mi me parece bien adecuar y adecentar esa zona porque estaba abandonada y muy estropeada.Era penoso pasear entre tanta ruina y suciedad con el marco tan bonito de la bahia detras.Como usted dice esperemos se urbanice bien y no se haga algo a medias.
Es muy necesario reformar esa zona y mas de cara a los campeonatos de vela de 2014 pero aunque no los hubiera es algo que se pedia agritos entre los mucho paeantes que por alli vamos y veiamos un deterioro constante y sin que nadie pusiera remedio.
!!!!Que bien!va a quedar un paseo precioso porque el entorno ya lo tenemos y es poca sosa lo que hay que hacer lo que no he entendido nunca es porque esa zona estaba tan horrorosa y mas teniendo al lado el Palacio de Festibales.
De acuerdo al 200% de que se arrege esa zona pero habra que adecentar todas esas fachadas de casas pequeñas medio abandonadas y si ademas sirve para dar vida al cear de vela mejor que mejor haber si para algo bueno que tenemos lo dejamos morir como es la escuela Principe Felipe.