¿A qué jugamos?
Casi diariamente escucho en todos los medios de comunicación que es preciso “adelgazar” las Administraciones. ¡Y estoy totalmente de acuerdo en ello!. ¿Saben cuántos miembros tiene el Tribunal Supremo de los EE. UU.?... ¡Nueve!). ¿Y saben cuántos senadores tienen?... ¡Cien!. Dos por cada Estado y algunos estados como California, son tan grandes en extensión y población como España.

Casi diariamente escucho en todos los medios de comunicación que es preciso “adelgazar” las Administraciones. ¡Y estoy totalmente de acuerdo en ello!. Es más si no lo hacemos de verdad, la dinámica económica se nos va a atascar en el laberinto administrativo y burocrático….
Pero, por otra parte, escucho, en muchas ocasiones a los mismos, que de recortes, nada de nada.
Y entonces me surge la entelequia, pues son dos posturas contradictorias y “o recortamos o mantenemos el gigante administrativo de nuestro país”.
Otra discusión sería la prioridad de los recortes y del adelgazamiento de las administraciones. Pero convendrán conmigo que si es posible “adelgazar” el aparato burocrático público y realizar “recortes”.
Y nadie mejor que los propios funcionarios –yo también lo he sido- para saber de dónde se puede adelgazar el aparato burocrático del país. Y puedo asegurar que, salvo alguna contada excepción, es posible ahorrar en todos los departamentos. ¡También la Sanidad!. Y la Educación y cualquier otro departamento. Y ello sin recurrir a eliminar el despilfarro o el “robo” puro y duro (¿Cuánta “lencería” es preciso reponer en el Hospital Marqués de Valdecilla?. Como me decía hace unos días una señora, pues ella veía cómo la vecina colgaba sábanas y otras prendas con el logotipo del SCS y trabajaba en el Hospital).
Pero cuando este Gobierno, sostenido por el PP, ha tratado de “adelgazar” el aparato burocrático, se ha encontrado con la oposición en la calle y, en alguna ocasión, con sus propios cargos públicos, quizás temerosos de perder su posición. Y en otro artículo publicado en estas mismas páginas realicé algunas de estas propuestas para “adelgazar” las administraciones y ahorrar dinero de los Presupuestos de todos:
- Supresión del 80 % de las empresas públicas, muchas de ellas refugio de amigos, correligionarios y paniaguados y forma de evadir el control parlamentario de sus actividades y gestión.
- Reducción al 50 % de todos los órganos parlamentarios (Congreso, Senado, Parlamentos regionales, Gobiernos, Órganos colegiados,… ¿Saben cuántos miembros tiene el Tribunal Supremo de los EE. UU.?... ¡Nueve!). ¿Y saben cuántos senadores tienen?... ¡Cien!. Dos por cada Estado y algunos estados como California, son tan grandes en extensión y población como España.
- Supresión de todas las representaciones en el Exterior que no sean las del Estado (Y éstas, con la dimensión y gasto adecuado). Es una broma que algunas Comunidades Autónomas tengan “embajaditas”, algunas en carísimos edificios y “funcionarios” que no hacen nada a cambio de sueldos millonarios.
- Supresión total de subvenciones a Patronal, Sindicatos y Partidos Políticos (que deberán vivir de sus cuotas, como cualquier otra organización).
- Control por el Estado del gasto de ¡Todas! las Comunidades Autónomas (Debe acabarse la “barra libre”, por mucha autonomía que tengan. Si Europa controla a España, ¿Cómo no vamos a poder controlar nosotros a nuestras Comunidades?). No puede tolerarse un “reino de taifas”, dónde cada una haga lo que quiera, legisle libremente, interprete las Leyes como le venga en gana, etc. (Por ejemplo: ¿Cómo es posible que para cazar en toda España sea preciso tener licencia de cada una de las Comunidades Autónomas?).
- Reorganización de los Ayuntamientos españoles (8.112), dejándolos en unos 2.000). ¿Cómo puede haber un ayuntamiento con menos de 100 habitantes? ¡Pues los hay en Cantabria, sin ir más lejos!.
- Racionalizar los sueldos de Alcaldes y Concejales y las dedicaciones de los mismos. ¿Cómo puede ser que existan en España muchos Ayuntamientos cuyos alcaldes cobran bastante más que el Presidente del Gobierno?.
- Eliminación total de cualquier pago, dinerario, en especie o prebenda, a los cargos políticos y representativos, tanto durante el ejercicio de su cargo como con posterioridad al mismo, que no sea la derivada de su vida laboral en el cargo como cualquier otro ciudadano (Se les pagará por su trabajo, se les tendrá en cuenta la cotización para su jubilación… ¡Y nada más!).
- Reducción drástica de la estructura del mundo de la política: liberaciones, vehículos y chóferes, teléfonos, ordenadores, asistentes, asesores y un largo etcétera.
- Supresión y venta de medios de comunicación públicos (permitirá obtener dinero y evitará su uso partidista; ya no hay periódicos públicos… ¿Por qué ha de haber televisiones, que sólo son órganos de propaganda política y en algunos casos con costes inasumibles?).
Podríamos seguir enumerando muchas otras iniciativas….
Y estas medidas las están pidiendo a voces muchos ciudadanos y si así fuere, podremos aceptar de mejor grado los recortes, pagar con menos dolor el IVA o lo que sea. ¡Y que no vengan los de siempre a invadir la calle para protestar, especialmente cuando a ellos les toca!
Y podemos entrar a valorar las grandes decisiones políticas, como es la agrupación de municipios (ahorrando personal político y funcionario) o, simplemente, utilizando lo más posible los nuevos sistemas informáticos. ¡No vaya a ser que hemos informatizado la Administración, pero hemos contratado a más personas!
¿Quieres envíar un comentario?
Comentarios(1):
Amigo Pedro totalmente de acuerdo con tu art y opinión que no es otra que la opinión de los ciudadanos Hasta que no se elimine suprima esta clase política al 50% no habrá regeneración Y es lo mismo PP que PSOE porque ambos y sus huestes tienen montado un chiringuito a costa y por cuenta de los ciudadanos .Y ahora a votar europeas ¿Para qué?