Noticias de Cantabria
Opinión 17-02-2019 11:34

La Autonomia de Cantabria precisa de pedagogia autonomista

Sin Revilla de cartel electoral no será lo mismo

De seguir así las cosas en este “totum revolutum”, Cantabria tendría que negociar su propio Estatuto de Autonomía. Cantabria no “asoma” ni en un plan ferroviario y el Puerto de Santander sigue en el olvido de las inversiones estatales a pesar de los “cantos de sirenas” que se lanzan por interés personal utilizando la plataforma de un medio de papel. 


 
Nosotros hemos dicho desde Cantabria Liberal de forma muy reiterada que si el partido regionalista quiere convertirse, consolidarse, como un partido de Cantabria de futuro tiene que posicionarse en Madrid. No puede seguir como hasta ahora, como cola de ratón de PP y PSOE. Cierto que Revilla ha sido fundamental en la gestión de Cantabria por su permanencia en el poder, ha gobernado con el PP y con el PSOE, eso no lo puede negar nadie, pero se ha quedado a medio recorrido porque en Madrid mandan los partidos Popular y Socialista, y ahora se une el Cs de Rivera. 

 


El PRC intentó en su día ir a Madrid, (2011) y no se consiguió, ahora todo ha cambiado, todo es posible porque Revilla dispone de un eco nacional tremendo. 


Cantabria es una pequeña comunidad que muchas veces la comparan, con error manifiesto, en una barriada de Madrid por su limitada influencia electoral. Cantabria a pesar de disponer de un número de ciudadanos inferior al de otras comunidades tiene su propia identidad, su territorio, sus gentes e historia, su idiosincrasia aunque nunca haya servido, hasta ahora, para conseguir reivindicaciones históricas a pesar de la estratégica posición geográfica que no sólo  no se ha sabido vender sino que ha condenado a Cantabria a un ostracismo en las comunicaciones.

 


Cantabria no “asoma” ni en un plan ferroviario y el Puerto de Santander sigue en el olvido de las inversiones estatales a pesar de los “cantos de sirenas” que se lanzan por el presidente de turno de la AP cada cuatro años.


De seguir así las cosas en este “totum revolutum” que se nos presenta, Cantabria tendría que negociar su propio Estatuto dentro de ese concierto incierto de CCAA.


Y sí Cantabria quiere seguir siendo una comunidad autónoma para empezar hay que realizar una -pedagogía autonomista- que nunca se ha hecho, se ha vivido con el titulo pero sin el contenido. En su día el partido regionalista levantó la bandera de autonomía y esto ya no tiene vuelta atrás. Ahora tenemos que hablar del presente y del futuro inmediato. El presente consiste en si queremos tener una autonomía, en consolidar un Partido autonomista estrictamente reivindicativo hay que forzar la máquina en nuestras reivindicaciones. Ese espacio en la actualidad lo ocupa una persona, el presidente Revilla, pero tiene que acudir el resto de ciudadanos si quieren mantener el estatus de Comunidad Autónoma. Hay que abrir puertas y ventanas. Si no es así, el partido y la autonomía se diluyen, desaparece. Cantabria hemos dicho muchas veces necesita voz y voto en Madrid. Lo que no podemos seguir manteniendo es la actitud plañidera y que los “recados” de Cantabria los hagan el Partido Socialista o el Popular, y ahora se une el partido Ciudadanos de Rivera que nombra su candidato desde Madrid. Se presenta unas elecciones muy complicadas pero muy importante para los ciudadanos de Cantabria, se trata de seguir o dar un giro importante. 


Si queremos pensar en clave de Cantabria debemos requerir a los partidos que vamos a votar si en caso de conflicto en el Congreso, como ha ocurrido hasta ahora, primarán los intereses de sus partidos en Madrid o los de Cantabria. Debemos tener en cuenta que el voto que damos a los partidos nacionales, salvo que rectifiquen y lo incluyan en sus respectivos Estatutos de partido mediante una adenda, Cantabria nunca estará representado al cien por cien en Madrid y mucho menos nuestros intereses.

No es suficiente el que  los diputados de Cantabria, ya sean del PP o del PSOE se "marchen" del hemiciclo, del Congreso, cuando hay que votar una moción o ley que afecta a los intereses de Cantabria, ¡hay que votar a favor de Cantabria!


Y en lo que se refiere al PRC más pronto que tarde tiene que refundarse y ampliar su base y órganos directivos para adquirir fuerza mediante una transparencia total y absoluta para defender los intereses de Cantabria. Muchos dicen, y es cierto, que el partido de Revilla está en el principio de adquirir fuerza y potencia con presencia en el Congreso de Madrid pero para eso tiene que ser foto de cartel el presidente Revilla independientemente de que se mantenga en Cantabria y pueda ser sustituido por el segundo del cartel. Existen fórmulas, todas, pero ahora el partido regionalista necesita posicionarse en Madrid y la única manera es que Revilla sea foto de carácter electoral, seamos realistas, nos jugamos mucho y éste es el momento, hay que ser pragmáticos.


Aparentemente el escenario político ha cambiado drásticamente, el modelo territorial está en cuestión y la Constitución también  porque los nacionalismos periféricos piden más, piden la independencia de España. Esa independencia perjudicaría a todos, incluidos los peticionarios y a la propia UE por el efecto llamada que se produciría frente a reivindicaciones estatalistas de diferentes territorios de la Unión Europea. El actual sistema de CCAA unos quieren convertirlo en una República Federal, que en esencia ya lo es, y otros en Confederal. El convertir España en una República Confederal es lo que piden los independentistas del País Vasco y Cataluña. Pero por otra parte el escenario electoral no es tan “revolucionario” como algunos lo presentan por ignorancia histórica, solo tienen que leer nuestra historia política moderna y verán el “calco” total del ayer al hoy.

 

Si queremos pensar en clave de Cantabria debemos requerir a los partidos que vamos a votar si en caso de conflicto en el Congreso, como ha ocurrido hasta ahora, primarán los intereses de sus partidos en Madrid o los de Cantabria.
 
 
 

¿Quieres envíar un comentario?

Comentarios(1):

regionalista - 18-02-2019

Siendo una autonomía no se entiende que el partido en la capital no remonte en las sucesivas elecciones Algo falla