Sánchez presenta un plan tarde, mal y con perfume comunista. Por Carlos Magdalena

Y lo presenta desde el más puro estilo demagógico recriminando y apostillando con una frase victimista de ?qué más tiene que pasar para dejar a un lado rencillas y sectarismo?. Por favor si el plan es bueno será siempre acatado y bien recibido por las empresas, por los trabajadores y fundamentalmente por los ciudadanos. Si el plan es malo sólo  es acatado por parte de su militancia y por los que viven a cuenta del chupe y de algunas empresas que esperan recibir una subvención para pasar unos meses y poco más porque están en quiebra. Y para presentar este plan no se tenía que haber esperado tanto tiempo.Y tratar unidad cuando todos nos enteramos de su contenido por el BOE.

Por favor señor Sánchez a estas alturas de la película no engaña a nadie

Este plan no arregla nada ni mira al futuro y además enzarza aún más a la opinión pública. Si Sánchez  tuviese lo que hay que tener llamaría al señor Feijóo y pactarían entre el PSOE y el PP un plan económico y de futuro para el 90 % de los españoles porque la situación del país es lo suficientemente grave como para dar los pasos necesarios y dejar de lado los orgullos mal entendidos, dejaría de hacer el huevón con cuatro comunistas que se representan a sí  mismos. Y si no lo hace es porque no tiene confianza en sí mismo ni en sus capacidades ni en sus representados que son los partidos periféricos independentistas, comunistas ultraizquierda y herederos de ETA. Luego se queja de que no le reciben en Estados Unidos ni le tienen en cuenta para nada los líderes europeos. Pero con  estos mimbres  difícilmente se puede hacer ni construir un plan para España y para que salga el país definitivamente del hoyo. Ya no cuela el seguir echando balones fuera amparándose en cualquier subterfugio, primero en que estábamos  metidos en plena pandemia  y ahora  a la guerra, con la carestía del gas o de la electricidad o de las materias primas que importamos porque anterior a todo esto ya se precisaron medidas que no se tomaron. Naturalmente que todos los factores anteriores no ayudan pero la culpa fundamentalmente la tiene la mala gestión de este Gobierno, desde un ministro que anima a no comer carne a una ministra que no sabe por donde entra la electricidad, ese es el nivel.

Va siendo hora de que se produzca un cambio desde arriba o un cambio desde abajo pero difícilmente España puede continuar por un derrotero equivocado que va a llevar a una continuada pérdida del estado de bienestar de todos los españoles. Hay que dejar que los españoles, los ciudadanos, los empresarios, los trabajadores piensen por sí mismos y dejar de lanzar medidas coercitivas que impiden el desarrollo del país. Es fundamental bajar los impuestos e intervenir menos la economía y sobre todo cuando se hace a mal y contra los intereses económicos que se deberían de proteger.

¿Tanto le costaría al señor Sánchez copiar la gestión económica que se practica en Europa?