Sánchez está creando desde la legislación española dos nuevos estados, el catalán y vasco. Por Carlos Magdalena

Y lo está creando por la necesidad que tiene el Sr. Sánchez de utilizar en la actualidad los votos independentistas, siete escaños. En efecto desde la legislación española está creando dos nuevos estados y cuando llegue Feijóo, o el que sea, tendremos dos estados totalmente independientes llamando a la puerta europea y desequilibrando más todavía a los 27 estados de la Unión.

Yo veo a Feijóo metido en un bucle del que es incapaz de salir. Hay medios, hay herramientas para impedir la desintegración del Estado de España pero no se usan por pusilanimidad. Es Puigdemon quien dirige España desde el palacete de Waterloo y poco a poco desde la minoría parlamentaria va consiguiendo los pilares de un nuevo Estado en Europa. En breve llegará el Cupo catalán, la autonomía en las finanzas, la trasferencia de la inmigración, las fronteras y un largo etcétera al igual que ya han impuesto que el catalán se hable en las instituciones cuando la mayoría de los ciudadanos hablan castellano.

Ante estos pasos agigantados que van consiguiendo los independentistas catalanes y vascos, se acabó España. El Estado que conocemos deja de existir como lo conocemos.
Una forma para evitar todo esto es echar a Sánchez, pero ante unas elecciones con la Ley Electoral que tenemos sería muy difícil porque faltaría la doble vuelta puesto que lo de las mayorías absolutas resulta muy difícil dado el amplio abanico de partidos existentes. La única  fórmula es llevarle a los tribunales, que no se hace, de momento está su esposa y su entorno imputados, pero el tiburón sigue en Moncloa dirigiendo la destrucción de un Estado soberano que ha costado cientos de años construirlo.

Este individuo lo está destruyendo a la vista de todos y de momento de forma impune. Lo peor es que cuenta con los militantes del PSOE y con muchos tontos de capirote y estómagos agradecidos para cumplimentar ese trabajo, la destrucción de España como estado soberano. Y esto es así aun cuando lo venden de muchas maneras la banda de los 23 ministros obediente, que también tendrán que pasar por los tribunales más pronto que tarde.

Los ciudadanos catalanes y vascos no quieren independizarse, pero si les obligan tendrán que someterse a sus dirigentes, así está el panorama político desde hace  años. Y Feijóo no consigue abrir la lata, es tan prudente, tan prudente tan precavido que está permitiendo la destrucción del Estado de España sin decir ni mu salvo chascarrillos en sus declaraciones.

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