Huidos, rescatados, evacuados, liberados y abandonados.

Elijan ustedes amigos míos la denominación que se quiera emplear, la nuestra se resume sencillamente en admitir que Europa ha abandonado a una población desesperada, a mujeres, niños y hombres  en Afganistán, aunque  farisaicamente se han traído unos miles de muestra para enseñar. Reconocemos que los acontecimientos se han sucedido muy rápidamente y no ha habido tiempo de reacción. Tendría que haberse previsto otra manera de actuar y colaborar para ello Europa y Estados Unidos. 

Entendemos la marcha de Estados Unidos de Afganistan, ya lo habían anunciado hace tiempo,  porque no van a estar poniendo el dinero y la carne de sus soldados mientras Europa que carece de un ejército cohesionado  y letal siempre a expensas de que los Yanquis les protegieran mientras los europeos enviábamos  unos cientos o miles de soldados para quedar bien.

Que las cosas se han hecho mal desde el primer día es ya una evidencia porque ese país tenía que haber sido invadido por Europa para defender la libertad, la democracia y para defender en definitiva la vida de las personas y los derechos humanos pero como decimos para eso se precisa de un ejército en condiciones.

Ahora, ya lo hemos dicho en otras ocasiones,  vendrán las ONGs a llorar subvenciones y no todas valen Y la señora Irene Montero la primera, aunque no hemos escuchado a los Podemos manifestarse sobre este tema con contundencia, como suelen hacer en otras ocasiones menos llamativas y graves, y todavía no han condenado a los talibanes porque debe ser que es progre llevarse bien con todas las izquierdas aunque sean asesinas y dictadores como su buen amigo Maduro, al menos así lo entienden esta nueva corriente progresista de la izquierda radical española.