Europa, los 27, financian el genocidio de Putin en Ucrania. Por Carlos Magdalena

La cifra la empiezan a dar  algunos medios de comunicación y son cientos de millones diarios los que Europa, en particular Alemania, pagan por estar calentitos en sus casas y para que sus industrias sigan funcionando aunque sea a precio de oro.

Y con nuestro dinero Putin financia las matanzas, la invasión a Ucrania.

Atendiendo al parámetro miedo, gas, petróleo, gasolina etc. la guerra puede durar y el genocidio seguir sine die  porque  Europa paga la ronda. Y mientras seguirá corriendo  la sangre de civiles indefensos y masacrados por los rusos y la gente de la peor calaña que está contratando Putin y que paga Europa sus sueldos millonarios por asesinar ucranianos y saciar la ambición del presidente ruso.

¿Qué es una paradoja diabólica?Sí lo es, pero hay que llamar a las cosas por su nombre y lo de Ucrania es un genocidio permitido desde los democráticos países europeos por mucho que se quiera paliar con sanciones económicas. Y esto va a seguir salvo que Europa se plante y corte el gas, busque otras opciones, otros mercados o pase frío. En esta vida todo requiere un esfuerzo y sacrificio, gratis no hay nada para obtener al final un beneficio pero no se puede comer y sorber al mismo tiempo que es lo que pretende Europa. Claro está que todo tiene su contraprestación,  Europa cubre sus carencias humanitarias mandando autobuses, vehículos, ropa, medicinas, comida? para ayudar en las fronteras y recoger  a los que huyen del horror y del infierno putiniano pero no es suficiente la ayuda y el enviarles unas mantas para que pasen menos frío  o mueran con algo de calor.

Ya va siendo hora de que  Europa enseñe los misiles al genocida Putin. Porqué, o se le para y detiene ahora o este individuo nos tirará los misiles cuando le venga en gana y seguirá invadiendo países fronterizos dando rienda suelta a su ambición desmedida.

Es hora  de dar un giro y pasar de aguantar amenazas a decirle a la cara que el apocalipsis nuclear será para todos, no habrá ganadores y todos seremos derrotados. 

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