Los Snipes santanderinos se quedaron sin regatear por la decisión del Comité de anular la tirada cuando quedaba media hora para el tiempo límite

Hace años que el acuerdo para anular una jornada por falta de viento era que  habría que esperar hasta las 13:30h para hacerlo, con la condición de que si a esa hora el viento comenzaba a entrar, se daría una prueba.

Tras la anulación este fin de semana de la Copa de España de J80, la organización programó una jornada de entrenamiento el sábado para las clase J80 y Crucero, olvidándose de la clase Snipe, por lo que esta, que tenía reunión de flota el viernes, se puso en contacto con el Comodoro para que el Snipe tuviese un entrenamiento el domingo, publicándose el entreno el sábado en el TOA.

El domingo Santander amaneció con un viento suave de componente sur que fue amainando a lo largo de la mañana. El parte preveía para el mediodía una rolada del viento al cuarto cuadrante, que vendría acompañada con un aumento de la intensidad, que llegaría a alcanzar  entre los 6 y los 13 nudos.

Siete fueron las tripulaciones que tras la publicación en el TOA de la tirada de entrenamiento bajaron al casetón para preparar sus embarcaciones para tomar parte en la tirada, aparejándolas a la  espera que el viento, de acuerdo con lo previsto, se entablase en la bahía, que con la marea subiendo acabaría por hacerlo.

La espera a que esto sucediese fue larga; pero cuando el viento comenzaba a cubrir el sur de la bahía, inesperadamente, a falta de media hora para el  tiempo límite para proceder a la suspender la tirada, el comité decreto la suspensión.

A las 13:30h cuando terminaba el  tiempo límite, en la bahía soplaba viento del cuarto cuadrante con una intensidad media de 8 nudos, con rachas de 11.

Con esta insólita suspensión, antes del tiempo límite, los snipista, que estaban desde las 11 de la mañana esperando para regatear, tuvieron que recoger sus embarcaciones a la espera de la siguiente tirada, aprovechando alguna de ellas para navegar un rato