El crucero santanderino volvió a los recorrido fijos.

con este tipo de recorridos nuevamente, la tirada se convirtió en un desfile, en el que lo único que importa son las polares de las embarcaciones participantes, no existiendo ninguna táctica a emplear durante la navegación, a no ser la de dejar que el barco corra, parándole lo menos posible.

A la hora programado para la salida, la tarde estaba cerrada en lluvia, y el viento no llegaba los tres nudos de intensidad, aunque lo peor era que rolaba más de 40º, soplando con una diferencia de presión brutal, que oscilaba de los 0 nudos a los 15.

Nuevamente el comienzo de la regata hubo de aplazarse a la espera de que el Ferry, que cada sábado sale a las 1530, dejase libre la canal de navegación comercial.

7 han sido las embarcaciones que han acudido a la zona de salida para tomar parte en la tirada, 2 de la clase I, 5 de la Clase II y 1 de la clase III, de los cuales tan solo 4 eran embarcación de socios del Club.

Una vez más los participantes de Crucero, que toda la vida han tenido la comunicación con el VHF en el canal 9, estucharon atónitos, que cambiasen el 8 para no interferir con el comité de la otra flota; cada vez son más las evidencias de lo poco que se considera a la flota de vela pesada más antigua del Marítimo.

Para la ocasión el recorrido designado ha sido el nº 8 del programa de regatas, recorrido que no aporta nada, pero que sobre todo favorece a las embarcaciones que tienen genaquer, los que a partir de unos metros de la salida, que fue a un descuartelar, pudieron largar esa vela de proa, mientras que los llevan spy contemplaban como les iban dejando atrás, al no serle posible largar esta vela.

La navegación entre la boya nº 14 de la canal y la primera baliza se desarrolló en popa cerrada, siendo costoso en este tramo el remontar la fuerte correntada que baja de la ría del Astillero que se veía aumentada por la marea vaciante

En este tramo la Canal es muy estrecha, lo que ocasión que el Gorilon encallase en los páramos, costándole un triunfo el poder desencallar; para este percance se desplazó una zodiac con un solo tripulante, que poco podía hacer en caso de que la varada se complicase.

En le tramo de la boya nº 10 de la canal hasta la baliza n 2º del recorrido solo entraba, el Genaquer, con lo que nuevamente los barcos sin spy perdieron todas las oportunidades, convirtiéndose el tramo en un penoso desfile de barcos, en el que adema existían grandes pozos de viento en la zona de entre boyas.

La navegación del tramo final fue un nuevo desfile, esta vez a un descuartelar.

En esta tirada, en la que aun están pendiente los certificados de rating de l