Una cátedra anticorrupción
Hace escasa fechas me hice eco de la sorpresa y estupor que supuso la creación por la UC de la cátedra Fraile & Blanco, nombres propios conocidos por ser la agencia de publicidad de las consejerías socialistas. Muchos lectores se han dirigido a mí para que incida en esa creación y a ellos me debo.

En primer lugar, y ante la posibilidad de que se siga con la creación de cátedras de complacencia, rogaría con todo respeto al equipo rectoral una Cátedra Anticorrupción... Y es que las cátedras hay que darlas el nombre de cántabros ilustres de la cultura, del deporte, de las ciencias, etc. Cuando uno se confunde por motivos exógenos hay que enmendar el error.
La Universidad debe de estar en el sitial que le corresponde como docente y por encima de cualquier veleidad societaria, nunca en una sociedad genial porque es de todos y en ella deben caber todas las siglas. Es, o debería ser, el foro de entendimiento, dialogo, y convivencia intelectual.
Recuerdo que cuando llegaron los socialistas al Gobierno de Cantabria dijeron que iban a levantar alfombras, pero aquí no se levantó nada. Todavía recuerdo los ataques que recibió el anterior consejero del PP que ocupó la consejería de Medio ambiente, mientras se llenaban la boca diciendo que iban a descubrir ciertos chanchullos, algo que, después de cinco años, hemos podido comprobar que ha quedado en nada.
Ese ex consejero no formuló querella criminal por haberse atacado su honorabilidad. Tenemos al portavoz de los populares, anunciador de querellas, que parece que las va a meter todas, pero sólo parece. Se desespera porque no le dejan ver las cuentas de Mare -cuyo responsable es ahora Martin-, no le muestran la patochada de la ingeniería societaria de Agudo -que no es otra cosa que una consejería mercantilizada con sociedades instrumentales-.
En mi opinión, se precisa una cátedra anticorrupción cuya sola existencia evitaría suspicacias. Agudo piensa -en alta voz- que la consejería es suya y que las cuentas las tendrá la oposición cuando ganen las elecciones... Bien, pero a los que no somos ni peperos ni sociatas ¿nos condena a no saber a qué se dedica su consejería? Por silencio positivo dijo que no, que somos impúberes. Como no me creo lo que dicen los políticos yo voy a mi bola y voy a ponerme a recoger firmas para crear una Cátedra Anticorrupción en la Universidad de Cantabria, eso sí, sin restar protagonismo a la recientemente creada.
La humilde aportación de los firmantes será un euro, a diferencia de los 80.000 euros que ha aportado la agencia de publicidad por el sillón (cátedra) conseguido en la Universidad que eran de todos.
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Comentarios(7):
Carlos, muchas gracias por tu valentía en airear, esa realidad innegable del mercantilismo de UC, con Fraile y Blanco, esa idea de crear una Cátedra anticorrupción es genial, ánimo.
Parece ser que las catedras, como todo lo demas, se da a quien conviene no a quien lo merece,este es un ejemplo mas de lo que nos rodea.
Es una pena que la gestion de ciertas instutuciones ,como es la Universidad, quede manchada por la gestion de ciertos individuos
GRACIAS POR HACERNOS VER ASUNTOS QUE NOS PASARIAN DESAPERCIBIDOS SI NO FUERA POR DENUNCIAS DE ESTE TIPO
La Universidad de Cantabria es una verguenza y su Rector más
Cuente con mi aportación de un euro para crear la Catedra Anticorrupción propuesta. Acertadísimo el artículoaunque no ha aclarado qué sdentido tiene la Catedra anunicada. Claro que igual eso explica el papelón que hace la UC en la vida social, económica, industrial, etc. de esta región. Por qué no miran y copian de la Universidad del País Vasco, por ejemplo.
La UC puede llegar a morir de autocomplacencia.Fruto de esa complacencia es por lo que desde hace tiempo ha sacado los pies del tiesto y se adentra en los foros sociales y politicos.Se esta metiendo en un callejon sin salida que puede llegar a enredarlo todo Creo que el actual Rector debe marcharse cuanto antes de la UC y si quiere a su tierra de Burgos y fundar o quedarse en la de Burgos.