Socialistas del País Valencià

El Congreso “Nacional” del Partido Socialista del País Valencià –PSPV- aún no ha concluido, están solo en el obligado descanso para recuperar el resuello y seguir dándose mamporros.

He de confesar que a mi me gusta más “Congreso Mundial” que “Congreso Nacional” pero ellos, que son muy modestos, se conforman con ser sólo una nación, eso sí bien servida de tribus, clanes y linajes. Cada militante tiene su propia corriente de opinión y alguno a punto ha estado de escindirse de sí mismo con motivo del cónclave socialista.

El derrotado Joaquín Puig no se pudo contener y organizó un “mitin respuesta” al nuevo líder Nacional-Mundial, Jorge Alarte, en el mismo recinto asambleario, lo que tiene la novedad de ser una división en tiempo real.

Jorge Alarte tiene la gran ventaja de que no puede empeorar la gestión anterior y el inconveniente de que, aunque su valía esté por demostrar, hasta ahora se lo han reconocido poco, negándole incluso el acta de diputado autonómico. Su experiencia dista mucho de ser la que nuestra Comunidad reclama.

Se tendrá que enfrentar a Francisco Camps que antes de ser candidato fue conseller de educación, secretario de estado, vicepresidente del Congreso de los Diputados, teniente de alcalde de la ciudad de Valencia, Delegado del Gobierno, en fin, que mucho me temo que el PSPV no le haya dado a Alarte las posibilidades formativas que el reto le exige.

Con todo lo trascendente del Congreso Nacional-Mundial del PSPV no fueron  las personas, que pasan, y en este caso aprisa, sino la vaciedad de ideas y la carencia de propuestas.

El único paso en la actualización de su prehistórica estructura es que al fin, 30 años después de la aprobación de nuestra Constitución reconocen la existencia de las provincias, sólo falta ya que asuman nuestro Estatuto de Autonomía que lleva más de 25 años recordándoles que somos “Comunidad”, antes fuimos “Reyno” y nunca seremos “país”.