Pegar a un "guardia", muy fuerte y reprobable.
En los mentideros santanderinos se escucha que muchos agentes de la policía local no están contentos con el tratamiento que se ha dado a una agresión de un policía en el cumplimiento de su deber. Se quejan, quizás con razón, de la gran tipografía que ha dado un medio de comunicación facilitando incluso el nombre de la victima, sólo faltaba el DNI y la dirección de su casa.
Por desgracia estos hechos suelen ocurrir con demasiada frecuencia, tenemos una sociedad muy faltosa de educación y respeto y nuestros gobernantes y para colmo nuestros representantes políticos están en la picota porque no dan ejemplo.
En los mentideros santanderinos se escucha que muchos agentes de la policía local no están contentos con el tratamiento que se ha dado a una agresión de un policía en el cumplimiento de su deber. Se quejan, quizás con razón, de la gran tipografía que ha dado un medio de comunicación facilitando incluso el nombre de la victima, sólo faltaba el DNI y la dirección de su casa.
Éste hecho reprobable (la agresión) no admite justificación ni lógica, es rechazable y no se le debería dar ninguna publicidad, directamente al Juzgado y que se impongan las penas en el grado que establece el Código Penal. Nada más.
Naturalmente que existe el derecho a informar y el derecho a estar informado pero todo tiene unas pautas que han de ser defendidas y protegidas. De esta cuestión se ha discutido mucho y como muchas son las opiniones los desacuerdos son importantes.
A veces proteger un derecho es desproteger otro. De ahí que algunos medios tenemos en nuestra forma de dar noticias un cuidado especial con preservar la identidad de las personas anónimas aunque no en lo que se refiere a las personas públicas que ocupan cargos públicos, o que han ocupado, y que están en candelero a causa de su puesto, y también a aquellos que tienen imputaciones o denuncias, pero nada sobre las personas privadas porque no están en la escena pública o política.
Insistimos en que las agresiones a la autoridad ocurren con demasiada frecuencia, recuérdense las últimas agresiones a los antidisturbios en las manifestaciones de Madrid y en este caso al parecer en la entrada de la península de la Magdalena simplemente por recriminar la actitud a unos jóvenes.
Pero de ahí a dar una publicidad- vende periódicos- va un abismo. Estamos en una sociedad del todo vale, el derecho a la intimidad no existe y dependiendo del día ponemos tal o cual noticia. Nos hacemos eco de este hecho porque han sido varios los policías locales que se han dirigido a nuestro medio de comunicación para recriminar esas formas de dar una noticia que afecta a un compañero.
Sí aprovechamos para pedir un verdadero Estatuto de Protección a nuestras fuerzas de seguridad. ¿Por qué lo decimos? pues aunque no deberíamos, ya saben como las gastamos de coger el rábano por las hojas, puede ocurrir que un policía que no está en servicio mire a otra parte para no verse involucrado en tener que dar explicaciones, demasiadas, por acudir en ayuda de un simple viandante o de una persona que se ve agredida verbal o físicamente en un local cerrado cuando como decimos está de “anónimo”. Ese estatuto es una materia pendiente que se debería poner encima de la mesa. El ministro del interior recientemente con los enfrentamientos que se están produciendo en la frontera Melilla dijo que hay que reforzar la protección jurídica de la Guardia Civil, esa protección debería de ser ampliable a todos los cuerpos de seguridad.
¿Quieres envíar un comentario?
Comentarios(1):
Es una noticia o es un cotilleo