¡¡No nos moverán¡¡

Se ha celebrado  el “Congresillo”, el acto formal de comparecencia para informar a algunos militantes de lo que ya todos sabían, que según instrucciones de Madrid el Congreso se celebrará en Cantabria una vez que se elija Secretario General en Madrid. La autonomía del socialismo de Cantabria es ninguna, nunca ha tenido autonomía. Los partidos nacionales, lo que tienen son delegados en provincias y el más independiente y autónomo, el catalán, tiene que comulgar con ruedas de molino mal que le pese.

Nuestro análisis, de la crisis inveterada del PSC, mejor,  del cisma socialista en Cantabria, sigue siendo el mismo desde sus orígenes en que se instauró la democracia en nuestro país. La bandera del socialismo fue "acogida" en aquella época por “una familia” mantuvo el testigo cuanto pudo y la dejaron, se produjeron peleas inter familiares, hoy me toca a mí, mañana a ti y lo de debatir las ideas del socialismo, de la socialdemocracia, de lo que interesa los ciudadanos, pues lo enviaban desde Madrid en un tapex.

Se nos puede imputar que nuestro análisis  lo hacemos de forma simplista, igual si o igual no, pero creemos que  como lo que decimos se entiende y los sujetos intervinientes no precisan de mayor reconocimiento intelectual es suficiente.

Quizá toca hablar de esa gran oportunidad que ha tenido el socialismo cántabro en la gobernación de Cantabria, (según ellos) y la gran frustración que se ha perdido de progreso si se hubiese contado con los ciudadanos a los que se les ha dado la espalda. A lo que se ha dedicado, no el socialismo de Cantabria, si no los que se apropiaron de las siglas, la cuota socialista de Gorostiaga  ha sido  a vivir, a recolocar a sus amigos y familia, al visceralismo, al sectarismo político, y no repetimos porque es de sobra conocido, a dejar unos pufos de la madre que les  parió. Nada más.La retahila de vividores lo contemplan las hemerotecas, resulta ocioso reiterarnos.

 Y es que esta acción política de irresponsables nos ha llevado en Cantabria y en el resto del país, y siempre referido al estado doméstico, a un cataclismo económico difícil todavía al día de hoy de valorar y cuantificar.

Existe una frustración desesperante al conocer las cifras de los pufos y mal gobierno de esta gente. Peor no se podía haber hecho. Y no nos vengan con andanas de justificaciones injustificables, que  hacen en sus declaraciones insustanciales carentes de contenido y para llenar páginas de papel que no del medio ecológico desde el que escribimos y comunicamos.

 El socialismo de Cantabria necesita de una fuerte, auténtica, y necesaria renovación. Ese partido que tiene que actuar de oposición difícilmente es creíble frente a los ciudadanos con el bagaje  des intelectual que llevan en la mochila más las mentiras que calza.

Se puede decir que existen tres corrientes en el Partido Socialista de Cantabria, los que se tienen que ir, que no se van, porque son profesionales de seguir, de continuar, porque carecen de dignidad y porque no tienen dónde ir; los que pueden asomar y regenerar el partido que no les van a dejar; y los tibios de ni chicha ni na de na que  ni se definen, ni definen. Los llamamos "los nanas y ninis".

 Difícil lo tiene la ideología socialista de que encuentre personas que puedan abanderarla porque estamos en pleno siglo XXI y la lucha de clases y las banderas y siglas se las dejamos a los nostalgicos y trasnochados. Pero es que además en  el PSOE-PSC, no exista democracia interna y solo una democracia   sui generis de los que están para seguir. La honradez exigiría que la secretaria general hubiese dimitido en mayo, que hubiese vuelto dimitir en las generales, que se hubiese producido un Congreso y que otra clase social menos parasitaria hubiese tomado el poder en el PSOE.

Ha sido que no y todo quedará igual con la frustración que ello supone. Tenemos ahora un Partido Popular como único asidero para salir de la crisis y para poner orden en el galimatias en que han sumido Cantabria.Está naciendo una nueva Europa en la que sus parametros indiciarios son el ajuste y la austeridad y solo pueden llegar de un gobierno conservador en los planteamientos y progresista en su ejecución.

Mirar y participar activamente en la Europa que lidera Merkel y que actúa de freno la Francia de Sarkozy es el futuro de España.Antes habrá que modular los mini-estados  que hemos creado para que nuestra fuerza de empuje como nación no quede descafeinada.