El rey también apela a la confianza de los españoles
Desde hace unos meses, y sobre todo ahora en Navidad, muchos organismos resaltan la importancia de la palabra ‘confianza’. Hemos visto muchos anuncios de televisión que se sostienen en esta palabra como caballo ganador para salir de la crisis. Las cosas están tan malitas que intentamos apoyarnos en palabras bonitas: confianza, fuerza, valor. Todo acompañado del nosotros. Algo así como: Sí, nosotros podemos.
Todos sabemos que la navidad es una época muy susceptible para las emociones. Reencuentro familiar, amigos que vuelven a su tierra para celebrar esta fecha tan importante, cenas y comidas copiosas llenas de sátiras… Nos entra una especie de alzhéimer o selección planeada para eliminar aquellas cosas malas y adentrarnos en un mundo mágico de optimismo, compras, emociones, amor, felicidad, magia. Por eso, la navidad es tan importante, porque es inocente.
Nos viene bien darnos un respiro e incluso un atracón de turrones, pero seguimos leyendo las noticias y ayer el rey de España hizo su mítico discurso de Navidad. Fue antes de cenar, como siempre.
Nos recordó algunas de las preocupaciones de los españoles, no todas. Se refirió a una crisis persistente que nos desgasta en el tiempo, una sociedad de bienestar en entredicho con los últimos acontecimientos. También hizo mención especial a los jóvenes, que están desanimados por la actual crisis económica y porque no tienen empleo. En fin, una serie de temas que todos sabemos. Asimismo, mencionó el desapego general del ciudadano hacia las instituciones públicas.
La palabra confianza salió a la mitad del discurso. Habló de un proyecto común, un proyecto de todos que sólo saldrá adelante si confiamos en nosotros mismos, porque no todo es economía. Efectivamente, la confianza puede ayudarnos a seguir caminando para ver cuándo atisbamos la luz al final del túnel. El problema es que la confianza, al igual que la esperanza, se pierde cuando te sientes traicionado una y otra vez.
Muchos españoles y españolas se sienten traicionados. Muchos han tenido que emigrar para conseguir un empleo digno que les reporte un salario justo. Ellos, ahora, han venido a España para celebrar con sus familiares una navidad muy distinta a la que se respira en los mercadillos navideños de Holanda, por ejemplo. Aquí, hacemos regalos conjuntos y comidas caseras porque nos hemos adaptado a nuestra circunstancia actual.
Respecto al discurso, ya han salido numerosas sentencias de partidos políticos y sus responsables. Unas lo tildan de “insulso”, otros de “resignado”. Esto es como los parones, según quien haga el reporte dice que la huelga ha sido del 90% o del 30%. No entraré en ese tipo de valoraciones, porque supongo que haya expertos que busquen en cada palabra las connotaciones. Sólo un apunte, esta crisis es de todos, no esperemos que en un discurso de casi 10 minutos nos den las pistas para salir de ella.
Pero…
…Aún así, tenemos confianza. Yo por lo menos. No queda otra, ¿o si?
Felices fiestas a todos/as :)
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Comentarios(4):
Muy buena reflexión
Santander Cantabria a 18 de Enero 2013 -------------------------------------------------------------------------------- Los españoles también apela a la confianza de que desaparezca el rey.
si con palabras se arreglara España estariamos ya fuera de la crisis pero desgraciadamente no es así,la confianza nos la tiene que dar los mercados,los bancos,las empresas ,el dia a dia pero vemos que no hay dinero y no circula asi que la confianza que tenemos es cero porque dia a dia vemos gente a nuestro lado despedida de su empleo, gente trabajando que hace meses que no cobra,empresarios con eres porque no aguantan sus empresas y toda clase de miserias economicas.Confianza de momento no tenemos pero suena bonito y algo hay que decir porque de lo contrario nos tirariamos por el faro
Yo no tengo confianza porque seguimos dominados por unos politicos que aunque sean mas austeros que los anteriores!! que remedio les queda, de donde no hay no se puede sacar !!, no mueven un dedo por eliminar ciertos cargos en la administración que sobran.Y sobran algo asi como el cincuenta por ciento, pero esos son cercanos a ellos y duele decir a un colega fuera...