El papel de España ante la violencia de género
Este martes se ha celebrado el Día Internacional contra la violencia sobre las Mujeres.
En todas las ciudades de España se han desarrollado actos de recuerdo a las 59 mujeres fallecidas en lo que va de año a manos de sus parejas, se han leído comunicados y repartido rosas para sensibilizar a la sociedad ante este mal que hasta ahora no hemos sabido combatir, se ha tratado, y aunque parezca mentira a estas alturas de siglo, espero que con éxito, de concienciar a los más jóvenes, de educar a las parejas en el respeto a la dignidad y derechos de la mujer, ya que parece que sus padres no han sido capaces.
Destaca, por el grado de compromiso adquirido a lo largo de estos años, la manifestación que en Castro-Urdiales organiza la Asociación de Mujeres Atalaya, que recorre las principales calles del pueblo en recuerdo de las mujeres asesinadas como consecuencia de la violencia de género.
Por mi parte he querido esperar a que pase este día para escribir mi opinión. Para ver si entre las múltiples declaraciones oficiales del Gobierno central, regional y diversos ayuntamientos cuyos sueldos de sus alcaldes y concejales superan en la mayor parte de las ocasiones, con creces, la labor que desarrollan, para ver, digo, si entre sus declaraciones había alguna novedosa que me recordara el papel que las instituciones están desarrollando en la lucha contra este tipo de delitos.
Los políticos son mucho de trasladar la solidaridad con las víctimas, de manifestar su más profundo rechazo, de lanzar mensajes de apoyo a las mujeres maltratadas o de tratar de construir una sociedad más tolerante y respetuosa. Todas estas frases hechas las ha empleado el Gobierno de Cantabria, las habrá recitado la Ministra de Igualdad de carrerilla, como la tabla del siete, y seguro que María Teresa Campos o Ana Rosa habrán derramado alguna lágrima al recordar los casos más sangrantes de este año. El caso es que 59 mujeres ya han muerto y que para que de todas las que sufren malos tratos diariamente no muera ninguna más es necesario que Bibiana Aido justifique su puesto (no vale lo de que es ahijada de Chaves) y haga algo más que lanzar mensajes de esperanza y pedir la implicación de la sociedad argumentando que el silencio nos hace cómplices.
El Gobierno de España podría aprovechar su turno de presidencia de la Unión Europea en 2010 para desarrollar el Tratado de Lisboa, ratificado el pasado 26 de junio por el Congreso de los Diputados, y que pueda ser el instrumento adecuado para luchar contra la violencia de género con una política común coordinada a la vista del fracaso práctico de la Ley de Protección Integral contra la Violencia de Género. Y es que, si bien los derechos de las mujeres de encuentran amparados por todos los ordenamientos europeos, la efectividad de las leyes de protección integral recientes dejan mucho que desear.
De momento, lo único que De la Vega ha adelantado es que combatirán eficazmente esta dramática violencia. A ver si en el año que resta hasta el semestre en que España presidirá la Unión Europea se les aclaran un poco las ideas y preparan algún plan concreto y efectivo contra la violencia de género. Ahora que el ejemplo sueco o finés nos ha demostrado que la violencia doméstica no guarda relación directa con la situación económica y la educación de los maltratadores, que hay que buscar medios efectivos disuasorios para que los maltratadores se lo piensen dos veces. Porque, ¿cómo nos explicamos que los países del norte de Europa, con mayor renta per cápita y un sistema educativo considerado modelo a seguir, sean los que tengan mayor porcentaje de maltrato doméstico?
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Comentarios(3):
Pues guapo, tú me dirás. Realmente no es cuestión de aumentar las penas, sino de que las medidas de protección desde que se denuncia por primera vez una agresión funcionen. No es por tanto un problema legistativo o judicial, e spolicial. ¿Cuántas mueren habiendo denunciado ya a su pareja? Esto sí qu ees grave.
Por qué no seguimos aquí el foro del artículo de Josemari, que ha desaparecido ya de portada? Pues eso, que lo tenéis jodido los actuales gobernantes del Ayuntamiento. También a nivel partido, porque os pueden mover el asiento! Ánimo a Miguel Ángel Hierro!
¿Cuantos hombre y niños han muerto a manos de sus mujeres/madres este año y no han merecido ni una triste reseña en ningún medio de comunicación? ¿Es justo condenar a una mujer a dos o tres meses de cárcel - es decir, a nada-, cuando se demuestra que ha denunciado en falso a su marido por malos tratos, y éste ha tenido que estar en prisión - dentro de la prisión- hasta conseguir demostrarlo?. Las injusticias, las falsedades y mentiras repetidas mil veces en referencia a que "las mujeres son asesinadas por el simple hecho de ser mujeres", es decir, "por que si", no van a solucionar este penoso asunto. Cuando muere una mujer, a nadie se le ocurre intentar justificar el asesinato o adornarlo. Sin embargo cuando es un hombre el asesinado, inmediatamente vemos como se intenta justificar el crimen por parte de los medios con comentarios como "no se conocía si había puesto denuncias (la mujer)", "la obligaba (su marido) a hacer esto o lo otro", cuando la realidad es que ni siquiera conocen los hechos ni estas cicunstancias porque, por supuesto, nadie ha hablado con ella.