Derechización

Y dirán  mis amigos de la boina, ¿qué es estar derechizado? Para empezar, hay que desnaturalizar la palabra derechización de la connotación política. En el actual “status quo”, derechizado es aquel que incumple las obligaciones políticas que tiene contraídas.

¿Estaré yo también derechizado? Dios mío. ¿Qué dirán mis amigos de toda la vida cuando se enteren? Hice un rápido recorrido en mi trayectoria personal y profesional y me respondí rotundo. No estoy derechizado.

Quien está derechizado es un diputado senador socialista que lo ha sido durante 30 años en democracia, aunque no ha hecho nada por Cantabria -verdadero mueble de madera noble del hemiciclo-. Derechizados están también los voceros del PSOE y del PP que, cuando gobiernan, se olvidan de nuestra tierra y defienden a sus partidos, callan o miran para otra parte cuando los presuntos delincuentes -Bárcenas, Olmos etc. - son de los suyos. Derechizada está la socialista Gorostiaga, que antepone su partido a los ciudadanos de Cantabria. Derechizados están los universitarios docentes que aceptan que una agencia de publicidad cree una cátedra con nombre propio en nuestra Universidad… Ellos sí que están derechizados.

En la tertulia de radio del Avispero,  junto a representantes políticos, la conclusión que saqué sobre el tema de la corrupción es que los ciudadanos están hartos de la clase política por muchas justificaciones que se den, ya que, cuando se actúa por sospechas de corrupción contra uno de los suyos, lo primero que hacen es defenderlo, cuando deberían suspenderlo “ad cautelam” o a “divinis”. La sociedad no está derechizada, sólo que no aguanta a los corruptos de palabra y obra.

Son ellos, los políticos, la rémora, el cáncer que impide -porque lo han impedido- que esta Cantabria progrese, avance y encuentre su sitio en el desconcierto autonómico que existe de ver quién gasta más y más rápido.

Son los que provocan, porque no impiden, que los cántabros tengan los peores empleos, mientras llegan los del carné se quedan con los puestos cuando los nuestros, los suyos, tienen que emigrar. Basta con hacer un repaso a nuestras instituciones, desde la Fundación Comillas, Universidad, CES, Valdecilla, etc. y echar un vistazo a la lista de nombres de quien las componen. Lo dicho, ellos sí están derechizados.