Noticias de Cantabria
Opinión 16-08-2019 06:19

Denuncia que algo queda...

..Y Plácido Domingo ya está juzgado y condenado. Por Carlos Magdalena Menchaca

El tema de los presuntos abusos y acosos en el mundo profesional no tiene las mismas características, ni perfil, ni proyección que cuando se producen a nivel de calle, son totalmente diferentes, por el perfil de las personas, entorno social, situación económica y salarial del denunciante, celos profesionales, rencillas, envidias y un sinnúmero de cuestiones.

 No es que sean más inocentes o más culpables unas y otras situaciones, sino que se atiende a otros parámetros que se pueden deslindar.


Ambos, el de calle y el profesional, tienen un común denominador, que el acusado de abusos o de acoso una vez que se hace pública la denuncia ya es condenada de por vida, aunque después sea absuelto por los tribunales. La frase es conocidísima: “denuncia que algo queda”.


Los medios de comunicación tenemos mucho que decir en esta cuestión. Si una mujer apoyada por una asociación feminista, que necesita de denuncias para seguir en la subvención, formula la denuncia contra el “macho” antes era condenado -sine qua non-, ahora ya los jueces han cambiado su postura y se lo miran con lupa cuando llegan estas denuncias que tienen su origen y apoyo en la asociación feminista subvencionada y que hacen flaco favor a otros casos graves que precisan de un seguimiento.
Recientemente ha salido en España una asociación que formulaba denuncias falsas para no hacer entrega de los niños a sus padres. Han tenido suerte de que la Policía haya investigado y desentrañado estas patrañas para poner en evidencia éstas y otras argucias que se utilizan y que son difíciles de probar si no existe una concienzuda investigación, que las más de las veces no existen al levantarse el parte de denuncia y dar traslado al juez. Y ahí quedó todo.
Un ejemplo de lo que decimos a nivel popular es el famoso caso de Woody Allen, fue absuelto, pero no levanta cabeza en sus películas en cuanto a su financiación por el lastre que lleva consigo, y así decenas y decenas de casos que condenan al presunto aun cuando sea inocente.
Ahora llega el caso de Plácido Domingo, el gran tenor español, que se dé por condenado porque aun cuando finalmente le absuelvan ya ha sido condenado económica, social y profesionalmente hasta convertirlo en un paria porque una vez juzgado sea cual sea el resultado ya ha sido condenado por la sociedad a través de los medios sensacionalistas.
 
Este tipo de delitos en el ámbito profesional, de relaciones, son muy complicados y no porque tengan una versatilidad diferente en cuanto al pronunciamiento judicial sino porque existe un elemento exógeno, la comunicación, que incide directamente no en la voluntad de enjuiciamiento del juez, que también, sino en el de la sociedad que “todo lo sabe” y lo sentencia.
 

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Comentarios(3):

José Ramón - 16-08-2019

Un artículo muy interesante, para que lo tengan en cuenta.

Rk - 16-08-2019

No juzgo. No sé la verdad. Pero él no lo ha negado. Ha hablado de otros tiempos. Hay mucho que oir para saber la verdad. Tampoco me importa. El canta como siempre.

T de AM - 16-08-2019

No hay como ser importante, a ninguna las ha acosado el butanero ni ha tenido hijos con el lechero. Es un misterio.