Una visita a Cudaña.  Por Carlos Magdalena

No era la primera vez que iba a Cudaña, hace dos años y pico la visité de camino hacia El Soplao pero en esta ocasión iba a tiro hecho. Se trataba de una visita a propósito  y como objetivo único la Granja Cudaña para conocer sus instalaciones y funcionamiento. Sí es cierto que iba con la mejor compañía posible, una  parte de la peña que lidera el ínclito y gran colaborador de nuestro digital don Pedro Arce muy aficionado a visitar los rincones de nuestra rica Comunidad culminando siempre todas las visitas con una fabulosa comida.

Como fuimos en varios coches y el mío fue el primero en llegar enseguida nos pusimos a curiosear, junto con  el buen amigo que me acompañaba, Miguel, lo primero que nos llamó la atención fue la belleza del lugar, el enclave privilegiado en el que se asienta la Granja y el tamaño de las vacas. Se trata de unas vacas grandiosas, altas de alzada, de grupa recta y cuarto trasero perfecto, todas iguales hasta el punto que  parecían clónicas. Como diría un entendido de vacas se trata de vacas de exposición, productoras de lecha de alta calidad y de premio en feria y exposiciones .
En ese momento estaba el robot ordeñando, como hace las 24 hora del dia. y todas las vacas en fila esperaban su turno como si hubiesen cogido un ticket guardando la cola sin colarse, pura disciplina, mientras otro robot las aseaba y ellas, se las notaba, agradecidas al robot, no vi personal en esa fase de producción o estarían en otros menesteres pues el robot es totalmente autónomo y no necesita que nadie esté con él.

Se puede decir que es una Granja que muy bien puede ser presentada como signo de identidad de la Cantabria del siglo XXI. En sus habitáculos individuales y convenientemente protegidos de las inclemencias del tiempo, se encontraban los jatos de pocos días y mimados como si de niños se tratara.Acababan de darles el biberón a alguno de ellos, que lo agradecieron vivamente por su alegría y querían que les acariciáramos y así hicimos

De repente un robot parecido al de las Guerra de las Galaxias pero más bajito se desplazaba hacia nosotros, ya estábamos preparados para quitarnos de su camino cuando de repente cambio de dirección y fue en ese momento cuando conocimos a uno de los dueños, Ivon Entrecanales, quien nos fue contando algunos aspectos del funcionamiento habitual de la granja, mientras dirigía algunas operaciones a través de aplicaciones del teléfono. ¡Es el siglo XXI!

Pero sigamos con nuestro amigo el robot para saber adonde  se dirigía, despacio y con parsimonia fue a los comederos de las vacas y empezó a arrimar la hierba a los comederos donde lo esperaban sin ansiedad aparente sabiendo que nadie las iba a quitar su yantar. Ivon nos empezó a dar todo tipo de explicaciones de la Granja, su funcionamiento, operatividad, número de vacas etc. que lo pueden encontrar en su página WEB porque ésta es un complejo  moderno como tiene que ser y ojalá hubiera muchas explotaciones iguales en Cantabria.

Cuando estábamos en lo más entretenido de la conversación empezaron a llegar el resto de amigos rezagados y el alma mater e imagen de la Granja Cudaña, Carolina Entrecanales, hermana de Ivon, fue entonces cuando empezó la verdadera visita a la magnífica instalación.
Esta mujer es un vendaval, no paró de hablar desde el principio hasta el final, no se puede decir que tenía la lección aprendida porque la información brotaba natural propia de la persona que conoce su oficio, que lo vive. En efecto es la primera que se pone manos a la obra,

En las fotos se puede ver las camas de las vacas y como las hacían y el ordeño en otra perspectiva, llama la atención la limpieza de toda la instalación y sobre todo de los animales. Estos son los tipos de negocios que sí que merecen ayuda, aunque no la precisa, porque son un ejemplo de esfuerzo y buen hacer. Pero casi prefieren que no les molesten, producen la mejor leche de calidad de Cantabria y ya no la venden a la famosa fábrica de toda la vida que ponen el precio que quieren según nos han contado sino que han tenido que salir de nuestras fronteras autonómicas para poder venderla a un precio digno para así poder mantenerla y ampliarla a pesar de todas las dificultades.

No se lo pregunté, no quise ser un sabelotodo, pero seguro que esta emprendedora está apuntada al dicho de:¿si se quiere, se puede?. Porque ya saben ustedes aquí se habla de la leche y de ganaderos desde el principio de la legislatura hasta el final de legislatura, pero lo único que se ha visualizado ha sido una macro tractorada que finalizó en la Delegación del Gobierno y otra en el Sardinero que no habrán servido para nada o muy poco, pidiendo ayudas, precio justo para la leche cuando las granjas siguen cayendo, desapareciendo, ya sea de carne o de producción láctea. Algo lleva tiempo haciéndose muy mal y mientras la leche y los quesos de Europa se importan, no he visto que la leche de Cudaña se exporte a Europa a pesar de su excelente calidad. Algo falla insisto, algo se está haciendo mal, muy mal y la culpa no la tiene el lobo ni el ganadero. Tenemos los mejores pastos, los mejores ganaderos de leche, de carne, pero algo no carrula. Y es que los consejeros de lo Rural llegan, prometen, cada cuatro años, y se van, pero no se ven avances y todas las legislaturas se habla del precio de la leche, excepto en ésta solamente un poquito cuando también lo hicieron a nivel nacional para subirnos al carro, porque el monotema ha sido el lobo que, ¿será una fórmula para ocultar las carencias reales de la ganadería?.

Carolina nos enseñó su Granja que junto con su hermano Ivon son verdaderos emprendedores, junto a Adrian,hijo de Ivon que sigue la saga y los trabajadores de la granja. Aquí los que hablan de emprendimiento tenían que venir, incluido los de los emprendimientos oficiales, que reciben tantas subvenciones cuando el verdadero emprendimiento está a pie de la fábrica de quesos de estos hermanos, impresionantes quesos que produce, porque además de la leche tienen otros muchos productos que también comercializan y entre otros gran variedad de quesos, como el Cudaña Supra. Medio en broma, medio en serio, teniendo en cuenta las vistas que tiene hacia el mar la finca le dije que allí se podía hacer una gran urbanización, aunque los tiempos no están para la segundas viviendas, pero prefieren que las propietarias sigan siendo las vacas.

Las explicaciones de Carolina fueron abundantes, les invito a visitar la Granja en sus visitas guiadas para ver cómo se fabrican los quesos y sobre todo a mí el que me encanta es el queso fresco, que es bueno y sabroso con una textura deliciosa porque tiene la mejor leche y se nota en los productos, les ánimo  a que lo prueben porque pronto desaparecerán del mercado cántabro a otras CCAA que saben apreciar la exquisitez de estos quesos, algunos de 10 kilos. Las macro superficies y macro super deberían comprar productos lácteos de Cantabria de esta Granja productora de leche y comercializadora de quesos y de otras del mismo estilo por lo que valen, pero lo quieren a precio regalado. En esta fase final es donde debería ser más exigente la consejería, y vuelvo a la frase de arriba de: el que quiere puede.  Fue una visita corta así que volveré.