No se puede ni se debe "dar palos de ciego" en la Sanidad! Por Pedro Arce

Llevamos casi año y medio de terrible pandemia sanitaria y los ciudadanos ya estamos más que hartos con los gobiernos que no tienen ni pajolera idea de cómo afrontar esta crisis y se dedican a dar palos de ciego, sin atajar los verdaderos problemas con seriedad y conocimiento de causa.

En primer lugar, no se puede atajar una crisis sanitaria de estas colosales dimensiones, con decisiones políticas y sin saber muy bien a qué nos enfrentamos?

?dejando atrás aquellas funestas decisiones del Gobierno de España, con las famosas manifestaciones del 8-M, voy a centrarme en el problema cántabro y en la última decisión, para cerrar el interior de la hostelería de los principales municipios turísticos de Cantabria.

Suelo comer dos o tres días a la semana en distintos restaurantes de Cantabria y tengo la absoluta convicción de que se están implementando las medidas adecuadas para asegurar la salud de los usuarios, de acuerdo con las normas establecidas y con la lógica. ¡Y me siento seguro!

Ahora observamos que los infectados por Covid suben de manera más que alarmante y lo fácil de este consejo de Sanidad de Cantabria es cerrar el interior de la hostelería, en un claro ejemplo de seguir dando ?palos de ciego?, caiga quien caiga.

La consejería de Sanidad y la parte del Gobierno de Cantabria que le apoya, debiera de reflexionar y analizar dónde existen los mayores riesgos de contagio; yo suelo utilizar el transporte público y me da mucho más miedo ir sentado durante media hora pegado a un ciudadano que no conozco o de pie junto a otro desconocido, que sentarme en una mesa de un restaurante, guardando las distancias y utilizando la mascarilla para ir al baño. Piensen los sesudos responsables de Sanidad en los botellones de los jóvenes y no tan jóvenes, en las fiestas y guateques que hacen algunos irresponsables sin guardar ninguna medida de protección y distancias, en las aglomeraciones de personas, etc?

Muchos ciudadanos de Cantabria estamos pasmados con las declaraciones de Miguel Ángel Revilla sobre las medidas adoptadas, con las que no está de acuerdo; es como si ya no fuera presidente o no presidiera el Gobierno de Cantabria; y también es sorprendente las declaraciones de apoyo a la medida sanitaria de cerrar los interiores de los restaurantes de los alcaldes socialistas, que actúan de corifeos y les debe importar poco lo que sucede en sus respectivos municipios, especialmente de algunos, donde el sector hostelero es básico en su economía y actividad laboral, abocando a muchos a los ERTEs o al paro. Y me pregunto: ¿Les seguirán cobrando los impuestos, ahora que les obligan a cesar la actividad?

Pudiera seguir argumentando sobre este espinoso tema, que nos está ya dando una imagen nefasta de Cantabria y que hará desistir a muchos de venir en agosto a nuestra verde región a disfrutar de nuestras playas, pueblos, cultura, gastronomía y demás excelentes recursos, que podemos estar dilapidando con medidas no muy coherentes.

Si no tienen ideas, que es lo que parece, mírense en el espejo de Madrid, que ha resuelto equilibradamente lo sanitario con la actividad económica y no es una ?bomba vírica? como la han venido acusando sistemáticamente desde distintas esquinas del país. Y ello en la mayor concentración urbana de España.

Y, finalmente, detecto que ha faltado algo esencial en la toma de decisiones: ¡Diálogo!