Hoy vamos a hablar de la cuesta de enero….  2021. por Carlos Magdalena

 
Si amigos, de la cuesta de enero, de febrero, marzo, abril, mayo, junio… y del año 2021. En efecto acaba de empezar el 21 y ya estamos pensando cuando va a terminar porque somos conscientes de antemano de que no va a haber ninguna recuperación económica, ni del paro ni de nada, y si conseguimos ajustar el balance de ingresos y gastos nos daremos por satisfechos, que muchos seguros que no llegarán.
 
De momento estamos inmersos en plena y empinada cuesta de enero del 2021 y con la “ayuda” de la pandemia con toda su crudeza y repuntando a velocidad de miedo. Al menos nos ha llegado la esperada vacuna   aunque con menos dosis de las deseadas. Ahora en la fase de vacunación existen carreras entre las CCAA a ver quién pone más pinchazos y en menos tiempo. Se hacen apuestas para ver sí en el verano se habrá vacunado a la mitad de la población. Todos coinciden que cuando más se vacunen más posibilidades existen de inmunizar a la población y por ese motivo se debería de buscar más personal para vacunar, pero ¡hete aquí! que algunas comunidades, entre las que nos encontramos, por ese corporativismo mal entendido dicen que el departamento de Sanidad es suficiente para vacunar y no necesita ayuda de nadie. El presidente de Cantabria Revilla dijo el otro día que aconsejaría a Sanidad, no impondría, porque ya saben que en Cantabria hay dos gobiernos cuando lo deseable sería que fuera uno solo, que   Sanidad utilizase más personal, no estrictamente ni necesariamente de la sanidad pública, e inmediatamente ha salido una nota de prensa de la Sanidad, que manda la cuota de poder socialista, diciendo que se valen y se sirven ellos solos ¿?
Nosotros pensamos que lo fundamental es vacunar y contar con todos los medios para inmunizar a la población lo antes posible, máxime viendo que los contagios van al alza.
 
Pero volviendo a la cuesta de enero, en este año estamos desde el año pasado sumidos en una cuesta que no deja de subir y ponerse cada vez más empinada debido y a consecuencia de la pandemia a nivel sanitario, económico, en fin, a todos los niveles. Y como no teníamos bastante nos llegó la gran nevada Filomena, porque resulta que en los tiempos que vivimos las inclemencias meteorológicas tienen nombre, y las viejas del pueblo sonríen y dicen aquello de “año de nieves año de bienes”… pues va a ser que No.
 
Cuando paseas por Santander y ves el comercio, y ves las terrazas con los interiores cerrados de la hostelería, y muchosbares o restaurantes cerrados te preguntas qué está pasando, cómo vamos a salir de esta ruina. Y no sabes responder.
Si abres un periódico digital y recoge literal las noticias de los políticos te echas las manos a la cabeza de las muchas mentiras o medias verdades, insensateces, que largan todos los días. Pero lo más triste es ser conscientes de que nuestra Comunidad no progresa, estamos anclados, y si no progresa no es solo por culpa de la pandemia, es por culpa nuestra, por nuestra dejadez y porque les reímos las gracias a los ineficaces que elegimos en las elecciones cada cuatro años.