Los presupuestos del palo y la zanahoria

Los españoles nos hemos desayunados con un proyecto de Presupuestos Generales del Estado que nos han dejado estupefactos y han aflorado el cinismo de los partidarios del gobierno falso de Pedro Sánchez, pues ya sabemos que todo en él es pura falsedad, sean sus presupuestos, sean sus ocurrencias, sea su tesis doctoral?

Las redes gubernamentales y sus acólitos han intentado contarnos la milonga de que son los mejores presupuestos de la historia de España, mientras la pusilánime oposición se empeña en decirnos que son falsos e irreales. ¿Y los ciudadanos?, pues estamos más que perplejos y yo en el límite de la indignación.

No me fío de los titulares periodísticos, ni siquiera de la letra pequeña de las informaciones, pues ya veo que cada uno arrima el ascua a su sardina. Pero cuando se profundiza en el documento vemos las cosas más burdas que no siempre han recogido los medios de comunicación y de todo ello se desprende que Pedro Sánchez demuestra de forma superlativa su sectarismo en el más importante documento para el funcionamiento del país, lo

que demuestra que es un auténtico irresponsable y solo tiene un objetivo, que es mantenerse él en el poder, aprovecharse del mismo y de sus prebendas y ayudar a los suyos.

Era ya sabido que iba a primar con inversiones y todo lo que fuera a los independentistas, a las comunidades que le bailan el agua y a los sectores que más detestan España, como ha hecho con algunos ministerios podemitas, con Cataluña, Valencia o País Vasco, en detrimento de las regiones gobernadas por el PP, como Andalucía o Madrid y lo de esta comunidad es absolutamente injusto y creo que prevaricador, por lo que quizás en el futuro se le deben pedir cuentas en los juzgados, si para entonces aún existe en este país una justicia no sometida a la dictadura sanchista.

Y cuando observamos algunos aspectos, como el relacionado con las pensiones, donde deben aportarse de los presupuestos 43.258 millones de euros en 2022, lo que es una barbaridad y echa por tierra la sostenibilidad de las mismas y su ¿viabilidad futura?, pues en cualquier momento puede venir la Unión Europea, con sus `hombres de negro` y obligarnos a hacer lo que ya se hizo con Grecia; es decir, bajar las pensiones el 30 %, para compensar las alegrías de este irresponsable gobierno, al que algunos aplauden y muchos aún votan (y bien pudiera suceder que esto ocurriera ya con un gobierno del PP, al que la ciudadanía echase la culpa).

Y aún tenemos las cuantiosas contrapartidas que habrá que engrosar a la Cataluña de ERC o el País Vasco del PNV, insaciables e insolidarias a más no poder, para convencerles de que aprueben estos presupuestos. ¡La zanahoria de todos!

Pero centrémonos en algunos aspectos de Cantabria, pues hace no muchos días podíamos observar a Miguel Ángel Revilla y al Sr. Mazón eufóricos con lo que saldría de los presupuestos, aunque cuando se ha hecho público el proyecto, han fruncido el ceño y se han ido por los cerros de Úbeda, diciendo que negociarán durante su tramitación, y algo sacarán para justificar la zanahoria, aunque el palo que nos da a Cantabria es de órdago.

¡No! No es de órdago, es absolutamente indignante e insultante, con algunas partidas que si no fuera tema bien serio para nuestro futuro, son irrisorias, como aquella que proponen para el AVE con Madrid de cerca de 8 millones de una obra que está presupuestada, ahora, en 740 millones, con lo que es fácil deducir que nos toman el pelo o piensan finalizarla allá para las primeras décadas del siglo XXII; las demás obras de infraestructuras, incluso las que ya estaban en estado muy avanzado en su ejecución o tramitación en la época de Íñigo de la Serna, han sido paradas o ralentizadas y ahora nos ponen migajas, similares a las del AVE: tercer carril de la autovía entre Polanco y Santander (2 millones de euros); desfiladero de la Hermida, tren a Bilbao, autovía Aguilar-Burgos, La Pasiega, el Puerto? ¡Calderilla! ¿O no es calderilla los 462.000 euros para el ferrocarril de Santander a Bilbao, salvo que los vascos aprieten las tuercas porque les interesa a ellos para venir a Castro o Noja?

Han dejado en el aire las inversiones para el soterramiento de las vías en Torrelavega, culebrón que lleva décadas; y quizás ha sido a propósito, para conceder en las modificaciones una cantidad simbólica y así justifican otra zanahoria, que deje ahíto a quienes tienen que aplaudir a este gobierno.

Supongo que la delegada del Gobierno en Cantabria, la nuera de Tezanos, el del CIS, tiene obligación defender lo que le mandan desde Madrid; sin embargo, que el Sr. Zuloaga pretenda que comulguemos con ruedas de molino, para apoyar a su señor, nos parece indignante, falaz y pretenden vendernos la burra, que acaban de pintarrajear. Y estoy seguro

que muchos españoles y cántabros, incautos o desinformados o excesivamente ideologizados, pensarán que estamos para tirar cohetes; y de eso, nada, y los hechos del próximo año serán tozudos. ¡Cuánto me gustaría equivocarme!

La consecuencia es que nos seguirán mareando la perdiz, intentarán engañarnos y confundirnos, poco se hará en inversiones (aún menos que lo presupuestado) y la deuda seguirá creciendo para que las generaciones futuras sigan más hipotecadas que los de ahora; mientras Pedro Sánchez se ríe de todos a mandíbula batiente, disfrutando con sus amigotes del Falcón y el Super Puma, el buen jamón y las residencias estatales. Y el que venga detrás, que arree, que ya echaremos a la gente a la calle y estarán los sindicatos ya con ganas de levantarse de su bien engrasada poltrona y salir a incendiar la calle.

Este proyecto de presupuestos es un palo para Cantabria y la mayoría de los españoles, aunque algunos se conformen con unas pocas zanahorias?