¡Esto es la releche! Por Pedro Arce

Si no hacemos nada y nos quedamos de brazos cruzados, entre todo acabaremos con la ganadería de leche de Cantabria. ¡No es broma! Sabemos en unos pocos años, el censo de ganaderías de leche de Cantabria se ha visto reducido a la cuarta parte; solo unos pocos años más, no muchos, y quedarán tan solo unos nostálgicos a quienes no les importe perder dinero?

Llevamos ya un tiempo denunciando la situación límite de nuestros ganaderos de leche. ¡Y nadie nos cree! La Administración ve el problema, pero se encuentra inerme ante la situación, viendo pasar la crisis; los centros comerciales buscando la leche al mejor postor y no les importará nada ir a buscarla a China o donde sea; los ciudadanos, pasando del tema y los ganaderos sin atisbar aún al lobo, que se va a comer a sus vacas.

¡Y hasta los médicos nos dicen que la leche entera y tal como sale de la vaca no es buena! Y andan recomendando la leche semidesnatada o desnatada o con otras martingalas. A mí me dijeron ya de pequeño que la leche es uno de los mejores alimentos y sigo tomándola entera y está más que riquísima.

Pero lo que es la vida: los sindicatos ganaderos de Cantabria están más que preocupadísimos y se han unido para visibilizar el problema ante la sociedad de Cantabria y para ello están realizando acciones de protesta ante los centros comerciales para que no vendan ?la leche a pérdidas?, para que al ganadero le paguen la leche al precio de coste y para que los ciudadanos puedan tomar la mejor leche de Cantabria, al tiempo que se ayuda a un importante sector, se evite el despoblamiento rural y se potencie nuestro verde campo. ¿O no nos importa que acabe todo él de monte bajo?

Hoy se han manifestado en el Carrefour de Torrelavega y ha sido una acción decepcionante, pues sí han asistido todos los representantes ganaderos de Cantabria, pero muchos de estos estaban dedicados al trabajo en el campo y no asistieron como si el tema no

fuera con ellos; la acción consistía en regalar leche de la mejor calidad a todos los ciudadanos que por allí pasaban y muchos de ellos recelaban, pues quizás ya no estaban acostumbrados a una leche blanca, entera y de la mejor calidad como es la de Cantabria. Tal es así, que muchos cientos de litros quedaron sin repartir y hubo que recurrir a algún centro asistencial?

Como sigamos por este camino de infravalorar nuestra leche de Cantabria, ¡lo dicho!, nuestro campo se muere y los ganaderos se jubilarán, se buscarán otro trabajo menos sacrificado y mejor gratificado y acabaremos tomando sucedáneos de leche, traída de no sé dónde.

El Gobierno de Cantabria ha planteado una campaña de promoción de la leche de Cantabria para fomentar su consumo, reclamar un precio justo y poner en valor este excelente producto, infravalorado desde hace décadas, hasta el punto que los ganaderos venden su leche más barata que lo que cuesta una botella de agua que nos ofrece ya la propia Naturaleza. La campaña se plantea como un acto solidario y los ganaderos lo que quieren es justicia y ¡Ya!

Alabo esta campaña, pero dudo de que la depauperación del campo y la huida hacia otras ocupaciones de los ganaderos, presentes o futuros, no siga la misma tendencia y después ya no vale lamentarse por la leche derramada. Y me pregunto, para empezar: ¿Por qué muchos centros que dependen o reciben subvenciones del Gobierno de Cantabria (Hospitales, Comedores Escolares, Cantur, Residencias de la Tercera Edad, etc.), no siempre utilizan leche de Cantabria, que es la mejor? Por ahí podemos empezar?

Mucho cacarear que ello contribuiría a fijar población en el medio rural, mantener y crear puestos de trabajo, dar valor a lo nuestro, preservar nuestro verde paisaje de praderías, generar riqueza y utilizar ?productos de proximidad o km. 0?, pero después se nos va la fuerza por la boca y somos muy olvidadizos.

¡Todos tenemos que defender el campo de Cantabria si no queremos que se mueran nuestros pueblos!