Los ahorradores, pequeños accionistas de los Bancos condenados a desaparecer.  Por Carlos Magdalena

Ha llegado la hora de vender las acciones, por ejemplo esas cuatro acciones que muchos santanderinos enseñaban y se honraban de tener, que algunos recibían como regalo en el bautizo, al nacimiento, por ser el B.Santander  garante de un dividendo, acciones, que se conservaban a lo largo de los años y de mayores iban a las Juntas del Banco que  se celebraban en la ciudad y otros también a las comidas que organizaba la familia Botín, tiempos pasados que no volverán. Todo está roto.

En Cataluña lo que se regalaba al nacimiento del hereu era  el carnet del Barca. Pues eso, olvídense? ya no queda nada.

Que sí, que ha sido la crisis pero detrás de la crisis empujando a ésta  está el  Gobierno, estos comunistas que quieren nacionalizar la energía, la banca, las carreteras y las herramientas de comer. Que quieren volver al puro comunismo que fracasó en la Unión Soviética. Pero ellos no son culpables porque si buscamos un culpables los  podemos hallar, es la cuota socialista del medre, de las poltronas y de vivir de puta madre  que les está permitiendo gobernar allanando el camino para que el  retorno a la senda de la sensatez sea más difícil todavía o imposible si no hay elecciones.

En una economía de mercado no se puede ir sin medida con impuestos ni para la banca ni para la energía ni mucho menos asfixiar a los ciudadanos como lo  están haciendo para poder vivir ellos o ir poniendo parches a base de subvenciones para ir tirando y aguantando a base de ayudas a las clases más desfavorecidas mientras la clase media cada día está más empobrecida y endeudada con un nivel adquisitivo en mínimos de subsistencia.

¿Que hay que pagar impuestos? evidentemente como los pagan todos los países en Europa y los de Norte de  Europa, con una salvedad que allí cobran unos salarios y perciben unas pensiones gloriosas  y esos impuestos se ven y se palpan en la calle, los ciudadanos los disfrutan mientras aquí los disfrutan los de siempre. Aquí   pagamos una inmensidad de impuestos estatales, autonómicos, locales, directos, indirectos etc. hasta por comer  una sardina,un melón o una sandía  mientras que no recibimos más que servicios ruinosos, deteriorados, abandonados pero eso sí los políticos, la clase dominante, los que mejor viven y la  que mejor posicionada está para subsistir mientras el resto vive de migajas. Además algunos hablan y mienten muy bien, van a clases de oratoria con nuestro dinero porque son conscientes de que nos tienen que convencer de lo inconvencible.

Este Gobierno reparte la miseria para los que vivimos aquí toda la vida y también para los que llegan subidos en  patera o en linea aérea mientras ellos, los políticos, siempre se quedan con la mejor parte.

 ¿Qué quién  tiene la culpa  de este estado de cosas? usted y yo amigo que lo permitimos.