La tertulia de Claudio Acebo y la polémica del aparcamiento del Sardinero. Carlos Magdalena

Como no podía ser de otra manera el director del programa quiso hacerse eco de lo que se habla en Santander, el interés de la alcaldesa de construir un aparcamiento en el Sardinero, un aparcamiento que ya existe.

Claudio quiso pulsar la opinión de los tertulianos y fui  yo mismo el que comenzó ratificando mi opinión publicada a través de este digital desde los inicios del anuncio por parte del Ayuntamiento en un art.  del mes de mayo y también con posterioridad. La decisión de la alcaldesa es ininteligible. Un presupuesto desmesurado e incomprensible por su elevada cuantía para  pintar, poner pichi, cuatro enchufes  para vehículos eléctricos y dos máquinas expendedoras y para cobrar con sus barreras valorado todo ello en 4,5 millones (¿?)

Si el aparcamiento de verdad se construyese bienvenidas sean dos plantas de aparcamiento, porque sería una infraestructura más para el futuro y para cubrir las necesidad de aparcamiento en la zona, principalmente en periodos vacacionales porque ahora el de superficie está vacío salvo en verano. Pero no es así lo que pretende ahora es lo contrario de lo que se decidió y pidió subvención al Ministerio de Transporte que era un aparcamiento subterráneo.

El tertuliano Joaquin Rubio opinaba claramente que lo dejara libre, que no se trata de justificar ninguna inversión. Mientras  Fernando Pérez aludió a que de futuro habría que incentivar para que los coches se dejen en Camargo y se venga en tren, comparando un poco la ocurrencia  y el follón que se montó con el cambio del metrobús que puso a toda la opinión pública santanderina en contra.
Lo de los aparcamientos disuasorias es la serpiente de verano, aunque ya no estamos, y lleva años y años con el cuento de la buena pipa, pero algo habrá que hacer y en esta ocasión parece que se coge el rábano por las hojas. 
    Carrancio sugirió el aparcamiento de la zona portuaria que alguna vez se ha mencionado pero resulta difícil porque el Puerto necesita ese espacio para uso propio Y es que además apuntó y bien Joaquín, que no hay gente en Santander en el Sardinero para hacer un aparcamiento de esa naturaleza con un gasto innecesario; otra cosa sería el sanear el tema de pintado y asfaltado, como decimos más arriba, pero con otras cifras porque no salen los números. En verano sí, pero es que  en verano se llena todo.

Claudio sacó a colación la otra idea de la alcaldesa, que es en la S 20 poner un carril de bicis y recordó que esa media autovía se quiso un principio que fuese un vial rápido de desahogo de los coches de entrada y salida de Santander y ahora te viene con esto que quitaría espacio etcétera. 

Y después del anuncio de la S 20, toca cargarse los jardines de Piquío, verdadero monumento y patrimonio de la ciudad de Santander, que con cuatro botes de pintura sería suficiente como hizo en su día el alcalde , Gonzalo Piñeiro, porque cada canto rodado y arbusto pertenece a nuestra historia.(Carlos) 

Claudio cambió de tercio con la visita de María Buruaga a Madrid, donde  iba a ser recibida por Sánchez.  Se hizo un pequeño análisis de esa visita, que no iba a pasar nada salvo regresar con las manos vacías dada la focalización que siente el presidente de España en otras Comunidades.
Decíamos que se trata de una entrevista de pasar el rato, de amabilidad, escuchar, añadiendo Joaquín y Fernando que había que aprovechar la singularidad de Cantabria y aprovechar todo lo que nos diesen. Aunque ya anunció Claudio que haga lo que haga la presidenta y pida lo que pida será criticada por la oposición.
Hablamos de la financiación que es el verdadero caballo de batalla, y se puso encima de la mesa algo muy importante por parte de Joaquín Rubio apuntando que en la actualidad existe un sistema de financiación inviable para todos, el llamado común, y un sistema de financiación cojonudo de vascos y navarros al que quiere unirse Cataluña, formando parte de los ciudadanos de primera de vascos y navarros y no seguir con el resto de Comunidades Autónomas.
En este punto se enervó Claudio porque ya está bien de tener que estar de rodillas cuando los vascos viven con privilegios y que existan dos Españas; lo que había que hacer es anular esos fueros y señoríos que están caducados y que deberían ser nulos, estamos en el siglo XXI. En efecto en diciembre en la Conferencia de Presidentes tenía que darse la valentía de proponer la igualdad y solidaridad de todas las CCAA anulando los fueros y señoríos vascos y dar los primeros pasos para crear un sistema de financiación para todos sin desigualdad y acabar con la desigualdad actual. Por ahí habría que empezar y gastar menos papel en dimes y diretes e ir al origen de la controversia. Y es que vascos y navarros nos asustan con sus mastodónticas obras porque les sobra el dinero, y como decía Claudio mientras aquí lloramos y nos ponemos de rodillas por intentar conseguir una estación intermodal que cuesta la paupérrima cifra de 35 millones  al independentismo se le va a chorrear con miles de millones.
Se habló mucho y bien, ¡hasta la siguiente!

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