Alarma y escandaliza el ataque reiterado de Sánchez a la Justicia española. Por Carlos Magdalena 

Pero lo que verdaderamente alarma es que ningún socialista salga en defensa de los jueces del Tribunal Supremo, del Consejo General del Poder Judicial y de todos los tribunales y jueces de España cuando deberían de saber que el Poder Judicial es fundamental para la existencia de la democracia. ¿Miedo? Un país occidental, europeo siguiendo a Montesquieu (1689) se rige por el sistema de división de poderes: ejecutivo, judicial y legislativo, mientras que en España el único bastión que todavía no ha podido tocar ni mangonear  Sánchez y su Gobierno es justamente el Tribunal Supremo pero en ello están.

Hay que defender al Tribunal Supremo, al Tribunal Constitucional, a los Tribunales  Superiores porque ellos son en la actualidad la única garantía de que se mantenga la democracia en nuestro país. La Fiscalía ha caído en manos del poder político con el nombramiento de la socialista Dolores Delgado  y  quien manda en ella según nos confirmó  sin ambages ni sonrojo Pedro Sánchez. Y aún cuando últimamente  estamos acostumbrados  a que las sentencias no se ejecuten y que se tome a los jueces como el pito de un sereno o que  se dicten leyes para evitar la ejecutividad de las sentencias como es el caso de la sentencia que obliga  a impartir castellano en las aulas de Cataluña hay que decir ¡basta! Este fraude de ley está siendo muy utilizado por el presidente Sánchez  para imponer su autoridad frente al Estado de Derecho.

El Partido Popular tiene que acudir a Bruselas y denunciar estos hechos porque está en peligro nuestra democracia que tanto nos ha costado conseguir.  No se puede continuar así.