Un empresario y la piedra filosofal

..... es que los contratos, las adjudicaciones y todo lo que tiene su origen en la administración se iba a cumplir de forma escrupulosa conforme la normativa que se contienen en nuestro ordenamiento jurídico y fundamentalmente en lo que hace referencia a la contratación administrativa. Lo que el presidente pretendía, entendimos, es tratar de deslindar una acción empresarial  y una acción política y que cada actuación ocupase su sitio en el organigrama de la sociedad. Lo que no se podía hacer, o al menos el presidente pretendía, es mantener la figura del político empresario o el empresario político porque esa asociación muchas veces, y lo hemos visto en demasia, produce corruptelas e incluso  corrupción.

 El tema está ahí y quizá algún empresario que ha vivido de sus vicios al ver que se escaparon por la ventana que ha abierto el presidente, esas seudo influencias, se queje y clame porque sigan las prebendas y esa especial comunicación con la política y sobre todo con los políticos. 

Los empresarios tienen que estar en sus respectivas asociaciones empresariales y que éstas sean  representativas e independientes para defender los intereses estrictos de los asociados. Una asociación empresarial independiente es la mejor palanca que puede tener  Cantabria, naturalmente que no nos referimos por desgracia a la actual CEOE; una asociación dependiente del poder político claudicante es lo peor que puede existir en una comunidad. Como verán nuestros lectores hemos pasado del empresario que quiere jugar a político para  estar cercano al cocido, o dicho de otra manera hacer negocios de mantel, a una asociación seudo empresarial nada representativa, ni participativa como es “nuestra” CEOE.

Todavía recordamos  una reunión, estábamos fatídicamente en la mesa de al lado, cómo uno de estos empresarios a los que nos referimos  comía angulas con una líder socialista y ¡eso que ya se habían dado cuenta de que lo de la crisis era real !. Ese creo que no es el camino y el presidente de Cantabria así lo dijo nada más tomar posesión de su cargo.

 Es muy lícito el que el empresario mantenga un lobby, un grupo de presión para defender sus intereses de forma legítima, prensa, radio, televisión e incluso oficina de imagen y personal capaz. De acuerdo. Pero la no existencia del mantel a algunos les está poniendo nerviosos, de los nervios Es una situación que debe tender a desaparecer por más que a algún empresario le este costando entenderlo y  adaptarse a los nuevos tiempos y pretenda mantener a toda consta  un canal abierto directo con el poder político convenciendo con argumentos como que tiene poder, dinero e influencias… Mal.