Sigue el ¡¡Jaleo, jaleo!! en el PP de Cantabria

Muchos lectores que nos escriben nos dicen  que el jaleo del Partido Popular ya aburre. Y piden que se pongan de acuerdo y se repartan los cargos porque según dicen nuestros lectores de lo que se trata es de eso, de repartirse los cargos. Y en alguna medida tienen razón y lo están  intentando. Nacho Diego ofrece el  50% a Buruaga. El enfrentamiento es como una galerna del Cantábrico que bien conocemos en Cantabria pero después  siempre llega la calma chicha.
La filosofía del entorno de Rajoy es la renovación y el enterramiento de las viejas estructuras del partido y las únicas CCAA que se resisten son las de Canarias, Baleares, Asturias y Cantabria. En nuestra comunidad se presenta especialmente difícil porque no esta vertebrada una tercera vía y son todos viejos amigos de toda la vida en política, verdaderos profesionales de ésta. Nosotros auguramos al final una sola lista al Congreso Regional, y  habrá que esperar mejores tiempos para que se jubile la clase política de toda la vida por años de permanencia viviendo de ella, pero vamos a contar como están pinados los bolos al día de hoy.
Para empezar diremos que no hemos visto desde el tiempo que opinamos y  oteamos  el paisaje político de Cantabria que un partido monte jaleo o escándalo defendiendo los intereses de los ciudadanos; el jaleo, el escándalo se monta porque a uno le quitan un cargo, amenazan con quitárselo y poner a otro etc. Triste pero es verdad.

Ustedes tienen que fijarse en quien es quien de los que apoyan a uno u otro y los intereses personales que llevan en la maleta. Los senadores, los tres fueron nombrados por Diego luego es de bien nacido ser agradecidos. El ex alcalde de Riotuerto que brujuleaba por la tercera vía o la tierra de nadie ha visto que era cosa de dos y ha optado por Diego. Hay otros que callan como el Delegado del Gobierno Samuel Ruiz, nombrado a instancia de Diego, tiene el corazón “partío” pero sin duda su pragmatismo le hará nadar y guardar la ropa, pasar desapercibido para seguir con quien sea; y otros como Iñigo Fernández que no salió como diputado pero fue repescado por bajas en la lista se fue con viento fresco al lado de Buruaga. José Manuel Igual mantiene el tipo y quiere ser equidistante. Martinez Sieso ya en jubilación no se mueve salvo le digan desde Génova aquí o allí, y le han dicho allí y allí se ha apuntado y quedado quieto sin respirar, es un gran  político del Si Señor. Triste pero es verdad

Y así, amigos de la boina se dividen y toman partido los que se  llaman a sí mismos los “importantes” del PP de Cantabria. Y podemos seguir poniendo nombres, que lo haremos, según pasen los días y el jaleo aumente de decibelios. Los ciudadanos tienen derecho a saber. Unos tienen hambre porque fueron descabalgados  y se suman a la corriente de Diego o Buruaga según vean más o menos posibilidades. Es triste pero es verdad. El otro día decía un buen amigo y abogado también en una tertulia que coincidimos que el Congreso  lo va a ganar Revilla como sigan en esa mala derrota emprendida. Triste pero es verdad.

El Partido Popular es la única alternativa al bipartito PRC-PSOE y quien esté con el ganador tiene posibilidades de  sillón. La tesis que manejan los estrategas de Génova es que con Diego de presidente de los populares cántabros no llegarán al gobierno y esa tesis puede ser o no, falta mucho todavía. Pero es cierto que la animadversión y enemistad entre Revilla y Diego de seguir aquel a pesar de la edad tiene difícil encaje para pactar un acuerdo de gobierno en el futuro y el episodio del puro es irreparable aunque en política todo es posible. Triste pero es verdad.
Dicen los de Génova,  o al menos ese es el run run, que quieren que Buruaga alcance el poder en el partido para pactar con Revilla y es que todo vale  en esta política de falta de principios éticos y morales, todo es posible... Es mejor que Génova tenga menos poder sobre los candidatos y éstos  más apoyo de los militantes y que  estén convencidos de que el cambio de cara es para mejor. Ahora bien seamos serios y rigurosos cuando el Partido Popular perdió las elecciones, que las perdió, toda la junta ejecutiva tenía que haber dimitido y haberse ido a sus casas. Triste pero es verdad.

El banquillo del PP es numeroso como la barreras de presiones de algunos -caciques  irredentos de toda la vida- que todos conocemos, que  impiden la renovación. En efecto amigos de la boina Cantabria necesita una profunda renovación de sus políticos del PP, del PRC y del PSOE porque llevan treinta años fracasando y  hundiendo nuestra “tierruca”. Triste pero es verdad
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