Turistas de las tres P. Carlos Magdalena

El turista de las tres P es el que mayoritariamente nos visita, es el turista del paseo, playa y pipas.

Y termina un verano, raro, raro, raro donde acuden a refugiarse de los insoportables calores de otras Comunidades muchos veraneantes nacionales y también extranjeros. En breve el Gobierno de Cantabria, los comerciantes, los hosteleros, los restaurantes, y en general el mundo de la hostelería y de otros sectores nos digan sus conclusiones. Lo de que se ha visto en Santander, en Cantabria, mucha gente es una evidencia pero hace falta saber los dineros que han dejado en nuestra tierra.

Lo importante no es que vengan muchos turistas sino saber cuánto dinero esa mucha gente se ha gastado en Cantabria. Nosotros ya hemos hecho nuestra pequeña encuesta a pie de calle y muchos de los entrevistados nos dicen que el turista en general ha pasado las vacaciones en nuestra ciudad en nuestros pueblos a la retranca y limitando el gasto. Las familias gastan la mayor parte de su presupuesto en el alojamiento y el resto de los gastos los recorta en la medida de lo posible. Sin ir más lejos el otro día en el bus, medio que habitualmente utilizo a pesar de los llenos insoportables en verano, unas parejas que viajaban juntas iban a comprar pollo asado para repartirse, o vemos en la playa o en los bancos familias haciendo bocadillos de pan comprado en algún supermercado con el embutido a repartir.  
Y no es de extrañar porque un simple helado cuesta 3,50 lo que supone 14 euros para una pareja con dos hijos, y qué decir de sentarse en una terraza que resulta casi prohibitivo. Observamos que el consumo de alterne se centra más en la gente de joven que alterna con más alegria tal vez porque no tiene tantas obligaciones o porque el concepto de ahorro es diferente.

                                      Los antiguos jardines de la Plaza Italia que la alcaldesa desmanteló
En los supermercados, pescadería etc. dicen que sí han vendido más durante veinte días de verano pero que la gente mira el euro y la cantidad de gente que se veía en la Plaza del Mercado muchas veces van más a ver los magníficos escaparates de peces y a hacer fotos que ha compraren, y es que había días que se parecía a la Boqueria de Barcelona que se ha convertido más en un museo que en un mercado. En definitiva más compras de lo habitual pero sin agobios.

Los que no han parado han sido los servicios públicos, basuras, container, papeleras siempre a rebosar. Los buses del TUS una agonía ir en ellos a casi todas las horas y si funcionaba el aire acondicionado ni tan mal porque no siempre era así.
Unos servicios públicos que tenemos que pagar  los santanderinos y demás cántabros porque nos gusta dar el todo gratis a los de fuera, somos así de generosos con los visitantes porque para pagar ya estamos los santanderinos etc. Y es por ello que siempre desde aquí y desde otros ámbitos decimos que lo importante para iniciarse es implantar la tasa turística, que no es la panacea pero algo es algo, junto con el pago de aparcamiento en según qué zonas gratis o el pago de acceso a según qué lugares, en fin lo que decimos todos los años y no se hace por pusilanimidad de nuestros mandatarios.
En efecto los santaderinos nos quejamos que todo lo pagamos nosotros, más las improvisaciones y abandonos de nuestra alcaldesa y está bien que nos visiten pero también que dejen algo en la hucha para hacer frente a los gastos extraordinarios. Lo que sí hemos visto como decimos en nuestro titular, es muchos paseos, mucha playa,  y los come pipas de banco.

En breve nos iremos quedando solos, el verano toca a su fin, empiezan los colegios, las vacaciones terminan y toca volver a los trabajos, a la rutina del día a día y pensar cuál es el siguiente puente que podemos aprovechar para salir de la rutina. Nos quedaremos solos para poder pegarnos y atizarnos mucho más a gusto,  y a no ponernos de acuerdo en nada. Pero está en nuestro ADN y es así como funcionamos.
¡A ver que nos cuentan los medios oficiales y los seudo-oficiales!

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